REAL CAFE BERNABEU

Este café es uno de los que más me impresionó y no precisamente por la calidad del café como ahora os comentaré.

Cualquier aficionado madridista suele comprar algún tipo de prenda o material de su equipo cuando se deja caer por la capital, y muchas de ellas no son precisamente baratas, pero tener un recuerdo del Real Madrid CF en tu habitación es siempre grato, además de llenar las arcas de tu club, sin embargo, aquí el recuerdo no es de tipo material.

En este lugar el obsequio madridista no es otro que la “simple vista” del césped del Santiago Bernabéu mientras disfrutas de un buen café, el color verde le da un fondo especial a tu velada y cubre de magia tu estancia allí.

El sitio se sitúa en la puerta treinta del hermoso estadio, es bonito dirigirse a él ya que en primer lugar te encuentras con la visión del estadio Santiago Bernabéu, un grandioso estadio rico en historia y títulos futbolísticos. A partir de ese momento, tu trayecto andando son imágenes muy televisivas pues muchas veces habréis visto que en los alrededores del estadio y en el lugar donde se compran las entradas a los partidos, es frecuente que periodistas interroguen a los aficionados madridistas bien sobre el partido inmediatamente anterior o bien sobre noticias actuales del club.

Cuando entré al café me atendió una chica que se encontraba en la recepción y un hombre un poco más mayor que a mí parecer era el jefe del local, muy amablemente nos explicaron a mi amiga y a mí lo que ofrecía el lugar, y mientras que esperábamos que el café fuese más caro la verdad es que nos quedamos anonadadas con el precio del café sumado a la vistas que ofrece, solamente tres euros.

Cuando entras compras el “ticket”, que por tres euros te permite disfrutar de una bebida, ya sea un café, un coctel o copa, una cerveza o un refresco y sentarte en el lugar que quieras con miras al campo de fútbol.

El sitio tiene dos pisos, un piso inferior donde se encuentra una sala común y donde están los aseos, éstos últimos me llamaron la atención al ser un tanto diferentes a los aseos normales, son un tanto futuristas e innovadores, me gustaron la verdad.

En el piso de arriba es donde la gente disfruta de la comida y la bebida, y donde están las cristaleras que cercan una parte del estadio y que permiten ver el campo.

Cuando subimos a la parte superior hubo una cosa buena y otra “mala”, por un lado nos impresionó el sitio, ya que tenía una apariencia de gran calidad, mesas con manteles muy bien preparadas y gente muy bien arreglada (no nos creíamos que una café ahí valiese solamente tres euros) todo ello con un fondo verde del campo de fútbol más famoso de España. Lo malo era que todas las mesas pegadas a la cristalera estaban ocupadas y solamente quedaban mesas de “segunda” fila.

No obstante esto que en un primer momento nos decepcionó un poco se solucionó rápidamente, ya que el propio encargado (se ve que no era la primera vez que pasaba eso allí y no me extraña) nos dijo que en cuanto se quitase una mesa nos la limpiaría y nos pondría allí para que pudiésemos disfrutar del café y del campo en primera fila.

La verdad que nos dio un poco de verguenza porque la gente que estaba en esas mesas se había pedido platos especialmente caros y no sabíamos si con un simple café nos valdría para que nos pusieran en primera fila, pero gracias al jefe, que por cierto era argentino, pudimos disfrutar completamente de nuestro paso por allí.

Aunque nosotras solamente pedimos un café (o por lo menos era nuestra primera intención inicialmente), el Real Café Bernabéu es realmente un restaurante, pues ofrece todo tipo de platos que merece la pena comentar, o por lo menos alguno de ellos, yo tomé nota por si en alguna otra ocasión vuelvo, pues lo precios no me parecieron excesivamente caros. Así pues, el sitio ofrece lo siguiente:

- Menú de desayuno: con café, leche, infusiones o zumos y bollería artesanal, pudiendo añadir taquitos de tortilla o pan con tomate fresco (el menú varía desde tres hasta diez euros en función de la cantidad y del tipo que escojáis).

- Aperitivo y tapas: ensaladilla rusa, queso manchego con mermelada de tomate, tramezzinis de pavo, brochetas de chistorra, etcétera.

- Menú banquetes: Este tipo de menú sí es un poco más caro, varía entre unos cuarenta a cincuenta euros dependiendo del tipo de menú, incluye aperitivo en mesa que va desde tosta templada de sobrasada mallorquina, cebolla caramelizada con queso de cabra o espeto de pollo campeora ahumado; ensalada de la casa con berenjenas y miel de mil flores, tomate de Tudela con aceite de sarmiento...

Como plato central puedes elegir entre solomillo de cerdo ibérico asado a la piedra con salsa cremosa de boletus, carrilleras de ibérico con crema de patata y trufa negra, salmón noruego al horno o merluza a la gaditana.

Para finalizar existen todo tipo de postres que por lo menos tenían muy buena pinta.

Como consejo personal, visto lo que nos ocurrió a nosotras, llevad más de tres euros en el bolsillo porque pasamos del café a un platazo de jamón ibérico, y es que cuando ves como pasan esos platos cerca de ti y la gente disfruta de un buen trocito de jamón a tu lado el español no puede resistirse y nosotras acabamos cayendo en la tentación; eso sí, mereció la pena pues estaba riquísimo aunque también hay que decir que muy económico no fue (casi diez euros de plato).

Para acabar con esta entrada os recomiendo que, aunque no seais madridistas, merece la pena ir al sitio, si no queréis gastaros mucho dinero pediros solamente el café que sí es muy económico (y es requisito para poder entrar, es decir, no podéis entrar de gratis, os obligan a pagar el ticket de tres euros antes comentado) porque no os arrepentiréis.

Para llegar al Estadio Bernabéu, y por tanto, a este café, podéis coger el transporte público, ya que se encuentra algo alejado del centro de la ciudad. Si elejís metro, tenéis que bajaros en la parada "Santiago Bernabéu", la línea que os llevará allí es la 10. Y, si váis en autobús, las líneas que podéis coger son la 43, la 120 y la 150. ¡Hala Madrid!