Disneyland

Desde pequeños, soñamos con vivir las mismas aventuras que nuestros personajes favoritos; pues bien, ¡en Disneyland París podemos hacer estos sueños realidad!

No hay un máximo de edad para ir; tanto grandes como pequeños pueden disfrutar de este lugar. Pero sí que hay que tener en cuenta la época del año. De hecho, mucha gente no sabe que algunos espectáculos solo se organizan en determinadas épocas del año.

Durante Halloween, por ejemplo, hay villanos de dibujos que no están durante el resto del año: la madrastra de Cenicienta, Cruella de Vil, Gastón... Y en Navidad, hacen un desfile especial y organizan una fiesta por Año Nuevo con espectáculo de fuegos artificiales.

Personalmente, creo que vale la pena comprar una entrada de dos días, sobre todo si quieres ver los dos parques: Disney Park y Walt Disney Studios. La entrada doble te permite cambiar de parque cuando te apetezca durante el día.

Otro consejo que tengo es comprar el Fast Pass a menos que quieras pasar largas horas haciendo cola por dos minutos de atracción o para sacarte una foto con algún personaje. El Fast Pass te hará la vida más fácil. Y, si puedes, ve con alguien que ya conozca el parque. Yo fui con mi guía personal, un gran experto en Disney: mi amigo Miguel, a quien agradeceré eternamente haberme enseñado lo mejor del parque y haberme invitado a pasar dos días de ensueño con su familia.

Pero vayamos al grano.

Lo primero que no te puedes perder en Disneyland París es la atracción It's a small world, que además es la primera que te encontrarás en el parque. Esta atracción representa cómo veía Walt Disney el mundo y no te quitarás su cancioncilla de la cabeza en todo el día.

Justo al lado está el pabellón de las princesas. A lo largo del día, van pasando por allí las princesas para que te saques fotos con ellas. Yo me pude hacer una foto con Bella y con Rapunzel, e incluso puedes pedirles un autógrafo si quieres. Hay un pabellón para los personajes más importantes y hay otros personajes que se pasean por el parque. Y no te preocupes si no te puedes hacer una foto con alguno, porque luego salen todos en el desfile.

El desfile Disney Stars on Parade, a las cinco de la tarde, es el mejor momento de todo el día en el parque. Allí podrás ver a todos los personajes desfilando en carrozas personalizadas al ritmo de la música. El mejor sitio para ver el desfile es cerca del castillo de la Bella Durmiente; ¡pero tienes que ir al menos media hora antes para coger sitio!

Si lo que te gustan son las emociones fuertes, prueba la Star Wars Hyper Space Mountain. Son unas montañas rusas a las que subes a oscuras, una experiencia que te quita el aliento. Si quieres algo parecido pero para toda la familia, también está Star Tours: The Adventure Continues, una proyección de los personajes de la película que te acompañarán en una aventura por el espacio.

Cada atracción es única por sus fantásticos decorados. La que más me gustó (y que no te puedes perder) es la de Piratas del Caribe, una atracción cubierta que simula que es de noche. Está muy conseguida.

Por lo relativo a los Studios, os aconsejo la atracción de Toy Story, RC Racer; es muy rápida pero también se adapta a los más pequeños y a personas con movilidad reducida, y la Tower of Terror, desde la cual se puede ver todo el parque durante un segundo.

Para finalizar vuestra visita, no os podéis perder Disney Illuminations, un espectáculo de luces y proyecciones en el castillo de la Bella Durmiente, todo un símbolo de Disneyland, que os hará soñar y cantar.

Y no podéis volver a casa sin una foto con la estrella indiscutible de Disney: ¡Mickey Mouse!