Passage Choiseul

Un soleado día de invierno, tuve el coraje suficiente como para adentrarme en lo desconocido. En otras palabras, me perdí y descubrí este maravilloso lugar. Dicho lugar, que me gustaría compartir hoy con vosotros, es el Passage Choiseul; el cual se encuentra tan solo a unos minutos de distancia de la boca de metro Quatre-Septembre.

Se trata básicamente de un pasaje semicubierto donde se pueden encontrar principalmente tiendas de ropa, pero también hay muchos locales donde poder ir a comer o tomar un simple aperitivo. Yo no entré en ninguno de estos locales, pero a continuación os hablaré de los que he seleccionado como opciones a las que ir si alguna vez me apetece salir a comer fuera.

Empezaré hablándoos de un lugar llamado Bistropolitan. Parece ser un restaurante con un menú sencillo. Los precios varían según que platos escojáis. Es genial para aquellos que solo quieren comer algo rápido y ligero ya que el menú del día más postre cuesta a partir 7 euros. Eché un vistazo dentro del local y vi que algunos de los platos se preparan con antelación y se mantienen calientes en el fuego. La comida tenía un aspecto bastante suculento, así que puede que vuelva y la pruebe si estoy (o me vuelvo a perder otra vez) por la zona.

Unos pasos más allá (literalmente) del Bistropolitan, tenemos el restaurante coreano Ari Ari. La primera impresión que tuve fue que el local parecía bastante ajetreado. La mayoría de las mesas estaban ocupadas por clientes que disfrutaban de su comida al aire libre, y esto me pareció algo muy alentador. Como todo dueño inteligente de un restaurante, ofrecen menús que se pueden comer fuera del local. Pero lo que me atrajo más fueron sus precios que rondan entre los 9'50 y los 8 euros. Por 9'50 puedes pedir lo que me pareció pollo frito con salsa de soja dulce. Asumo que el pollo tendrá ese agradable brillo pegajoso que le da la salsa de soja y el fuerte sabor picante del chile. O por lo menos así ha sido cada vez que he probado un plato coreano. Sino, podéis pedir el ramen con marisco y verdura. A juzgar por la fotografía, este ramen os saciará y os dará la energía que necesitáis para sobrevivir a los fríos días de invierno. También cuentan con otras opciones en el menú, como la deliciosa verdura encurtida por la que la cocina coreana es tan conocida.

Justo al lado hay otro restaurante coreano, pero bastante más pequeño. En comparación, el Ari Ari es tres o cuatro veces más grande que este local, cuyo nombre olvidé memorizar. Pero no tiene perdida, los tres restaurantes mencionados hasta ahora son todos vecinos. Como ya he dicho, es muy pequeño y está muy abarrotado. El menú parece también muy suculento. Por lo que pude ver, ofrecen platos tradicionales coreanos con, por supuesto, verduras encurtidas. El servicio empieza a las 11:30 de la mañana y termina a las 7:00 de la tarde. Este menú "non-stop" es una gran opción si os apetece comida coreana pero os habéis perdido la hora del almuerzo en los demás restaurante coreanos.

Alejándonos de la cocina coreana, me topé con un lugar que me pareció muy interesante. En este local sirven platos "más saludables" con ensaladas, sopas y wraps. Parece un sitio ajetreado, así que deben de estar haciendo algo bien. Los precios son muy razonables, o al menos entran dentro del presupuesto que pretendo gastarme al salir a comer fuera. También sirven platos calientes como pollo o ternera, como podéis ver en la fotografía de abajo. Buscad esta pizarra si os interesa este restaurante porque, de nuevo, olvidé su nombre (desafortunadamente, esto se está convirtiendo en costumbre).

Si os gustan las hamburguesas como a mi, os aconsejo ir al Bio Burger y echar un vistazo a su menú. Últimamente han abierto muchas hamburgueserías de este tipo y se está convirtiendo en tendencia. Me moría por comer en este local, ya que me gustan tanto las hamburguesas, pero como acabo de volver de un viaje en el que comí demasiadas, pensé en volver otro día. En el cartel verde que hay en la entrada se explican todos los beneficios que Bio Burger tiene en un intento por alcanzar la calidad en su restaurante. En la segunda fotografía podemos ver su menú. Según entendí, puedes comprar una hamburguesa pero vendrá sin patatas fritas u otro acompañamiento. Puede que queráis probar sus bebidas caseras como la limonada, el té helado o lo que quiera que sea el moit moit. Si os animáis a ir a este restaurante, ¡avisadme!

Si os apetece algo más local, más francés, también tenemos este restaurante llamado Croque. Probablemente podéis adivinar qué sirven aquí. Esta es la pizarra que hay en la puerta donde nos presentan el menú que tienen para almorzar. Es un poco más caro que las demás opciones si pedís croque monsieur, pero eso lo dejo a vuestro criterio. Aunque, teniendo en cuenta que hace mucho frío y que el sol se pone temprano, comer en este restaurante es una buena opción no solo para calentaros un poco, sino también para saciar vuestro estómago hambriento. Después de todo, estamos ante el menú happy croqueur.

Los restaurantes que he mencionado hasta el momento son los lugares a los que yo iría. Como siempre, os invito a entrar en otros locales que encontréis por los alrededores. Recuerdo que había un restaurante de sushi justo al final del pasaje que me pareció interesante, pero no le presté mucha atención porque desde fuera no parecía tener muy buen aspecto (era un sitio muy oscuro y no había mucha gente comiendo dentro). También había un restaurante japonés cuyo menú estaba escrito en japonés. Esto siempre indica que saben de comida japonesa; o que simplemente han contratado a alguien para que escriba el menú en japonés.

Pero os animo a que vayáis a estos locales. Después de todo, están muy cerca de muchas bocas de metro. Aunque, como ya he dicho, yo me bajaría en Quatre-Septembre porque creo que se llega más fácilmente desde allí. La Rue Sainte-Anne, también conocida como Japan Town, está a solo unos minutos de distancia y allí encontraréis algunos restaurantes más. Aquí os dejo las fotos de otros dos establecimientos donde vi que incluso la gente hacía cola para entrar.

A veces es bueno perderse, de este modo puede que os topéis con lugares muy interesantes a los que ir a comer.