Cementerio del Père-Lachaise

Quizá suena raro que diga que uno de mis lugares favoritos para relajarme en París es un cementerio. No, ni soy rara ni me divierto estando cerca de la muerte. Os prometo que es un lugar muy bonito y tranquilo.

¿Cómo llegar?

Encontrarás el cementerio si coges las líneas 2 o 3 de metro y te bajas en la estación "Père-Lachaise". Hay dos entradas diferentes y, normalmente, la principal está abierta hasta las 19 h en verano y hasta las 17 h en invierno.

¿Qué se puede hacer allí?

Es un punto de interés turístico. ¿Sabías que La Fontaine, Molière, James Morrison, Edith Piaff, Oscar Wilde y otros famosos están enterrados aquí? Puedes dar un paseo y ver sus tumbas. La Fontaine y Molière están uno al lado del otro y sus nichos no tienen nada de especial. Son simples tumbas. La de James Morrison también es muy sencilla, pero la gente le adoraba y ahora le hacen ofrendas, aunque todavía no entiendo por qué algunos le pegan chicles masticados. Hay un árbol muy cerca que protege todo lo que las personas dejan. La de Oscar Wilde también es muy querida entre los visitantes. La gente la besa y deja la marca del pintalabios como muestra de amor por el autor y su obra. Recientemente pusieron una lámina de cristal para proteger la tumba porque hubo incluso quien intentó demolerla y acabar también con el ángel que la decora. A modo de mantenimiento, limpian a menudo ese cristal de todos los besos. Es un lugar turístico que no debes perderte, sobre todo si tenemos en cuenta lo bonito que es.

¿Por qué es un lugar tan especial?

Me encanta visitarlo porque es un cementerio muy antiguo y para nada aburrido, no como los de Alemania que, aunque son modernos, tienen tumbas viejas, muchas estatuas, criptas y mausoleos. Aquí hay cuervos, tumbas y ventanas rotas que le dan un encanto especial. Es un lugar tan tranquilo que ni siquiera oyes el tráfico y hay muchos espacios verdes, algo que, sin duda, echo en falta en París. En mi opinión, es un buen lugar para relajarse un poco, leer un libro o dar un paseo. Es muy diferente a todo lo demás.