Es un bonito restaurante cerca del centro, situado frente al Estacio de Franca. También tiene algunas mesas afuera, donde nosotros nos sentamos. Los peatones pasan muy cerca de la terraza ya que la acera no es muy ancha, pero no es muy molesto. El servicio fue lo suficientemente rápido para nuestro gusto, los camareros fueron muy amables y hablaban en inglés fluido.
Como muchos restaurantes españoles a la hora de comer, "Tasca i Vins" ofrece el Menú del día donde puedes elegir un primer plato (aperitivo), un plato principal y también un vaso de vino o una cerveza. Al final puedes pedir también un café ya que está incluido en el precio. Cada uno de los platos tiene 4 o 5 opciones diferentes, así que tienen bastante variedad. Deberían llamarlo en plural "Menús del día" en lugar de "Menú del día" ya que se pueden hacer muchas combinaciones de platos.
Como primer plato teníamos algunas ensaladas (con esa típica salsa dulce y queso... hmmm... ); para el segundo teníamos paella y costillas de cerdo. Todo estaba exquisito, aunque no era nada extremadamente especial. En cuanto a los precios, estos son razonables teniendo en cuenta la ubicación y teniendo en cuenta que está en una ciudad muy turística.
Yo sólo vi el interior del restaurante cuando fui al baño, pero en mi opinión tiene un bonito diseño interior y un ambiente agradable. La ubicación del restaurante es muy buena, ya que tanto el Museo Picasso como el Parc de la Ciutadella están a un tiro de piedra de allí. También está bastante cerca de las playas de la Barceloneta o Bogatell, así que si quieres escapar de la multitud en un día caluroso después de tomar el sol o de nadar, puedes visitar esta tasca para disfrutar de un almuerzo tranquilo. :)
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