A esta joya arquitectónica yo la llamo la basílica de los mil nombres... porque en cada idioma es un nombre distinto y pese a que prácticamente todo en este país tiene varios nombres, los de esta iglesia se te quedan más fácilmente en la cabeza.
La Basílica del Sagrado Corazón en español.
La Basilica of the Sacred Heart en inglés.
Basilique Nationale du Sacré-Cœur en francés.
Basiliek van Koekelberg en flamenco.
Basiliek van het Heilig-Hart en holandés.
Sea como sea, yo la llamo la basílica de Bruselas y constituye la quinta iglesia más grande del mundo. Sus dimensiones en vivo y en directo la verdad es que te dejan con la boca abierta y por dentro aún más.
Se ubica en el distrito de Koekelberg, en uno de los extremos del Parc de Elisabeth. Se puede llegar en la línea 19 de tranvía con dirección De Wand y la parada es "Bossaert-basilique" o la siguiente "College Sacre-Coeur".
Es un atractivo turístico indispensable en Bruselas para me gusta, pese a que muchos turistas la pasan por alto. Y lo que menos gente sabe es que tiene una de las mejores panorámicas de la ciudad en su cúpula.
He ido a visitarla en varias ocasiones por dentro ya que es gratuita y siempre que puedo llevo a mis visitas allí, pero solo he subido una vez a la cúpula ya que cuesta 5€. Pero es un dinero muy bien invertido tengo que decir.
La iglesia se ubica en el centro de una gran explanada con cesped y enfrente suya tiene uno los parques más largos de Bruselas por lo que no hay edicios altos que impidan verla desde cualquier punto de la ciudad. Tiene 89 metros de alto y 167 de largo. Destaca por su estilo arquitectónico Decó del siglo XX (de hecho, es considerada el monumento de arte decó más auténtico de Europe occidental) y lo que más resalta son sus dos torres en la fachada principal y la cúpula verde del centro.
Se levantó con motivo de la conmemoración del 75º aniversario de la independencia de Bélgica. El rey Leopoldo II fue quien la mandó edificar pero su construcción se vio obstaculizada durante las dos guerras mundiales y no fue terminada completamente hasta 1971.
El ascensor nos permite subir 52,8 metros de altura y creo que es rooftop abierto al público más cercano al Atomium por lo que nos da unas maravillosas vistas de él, aunque aún un poquillo alejado. Se puede subir en ascensor o por las escaleras para los que más se mantienen en forma. Yo opté por subir en el ascensor y bajar por las escaleras. No olvidéis si decidís visitar su cúpula tomaros la típica foto entre los dos torreones y con toda Bruselas de fondo. Magnífica. Por la parte sur de la basílica se puedo contemplar como comienza una de las mayores avenidas de la ciudad: la avenida de Carlos V.
La iglesia también alberga el Museo de Arte Religioso Moderno, con una colección de arte contemporáneo traído desde la diócesis de Brujas.
El arte deco del interior de la iglesia destaca por mármol de tonos blanquezinos y marrones y un mobiliario muy moderno para las iglesias a las que estamos acostumbrados a ver. También llaman la atención las grandes vidrieras con motivos de la vida de Jesús en un sinfin de colores vistosos.
La última vez que asistí tuve la oportunidad de presenciar una misa en francés con la presencia de un coro gospel. Me apasionan los coros gospel a los que ya tuve oportunidad de ver cantar en Nueva York y siempre es una gran oportunidad para mí poder asistir a sus actuaciones.
A lo largo de la basilíca, como en prácticamente en todas las iglesias que llevo visitadas en Bélgica, Holanda, Francia etc... tiene varios soportes para donar 1€ a cambio de poder encender una vela y realizar cada devoto sus oraciones.
La iglesia curiosamente también cuenta con un restaurante al bajar las escaleras de la salida en el que se pueden encontrar menús a buen precio e incluso hay quienes eligen realizar sus bodas, cenas de empresa y aniversarios en este restaurante. También dispone de tiendas con souvenirs y motivos religiosos. Y por si fuera poco, en ella se establece la sede de "Radio Spes", la única estación de radio autónoma neerlandófona católica de Bruselas que se puede sintonizar en la página web www.radiospes.be.
La basílica también hace funciones de teatro ya que en el sótano encontramos grandes salas y salones donde se pueden realizar fiestas de familia, recepciones y conferencias, previa reservación.
Eso sí, si tengo que poner una gran pega es que también cobren hasta por ir al aseo, me parece exagerado e inoportuno en una iglesia.
Está muy bien iluminada y el espacio dedicado a los feligreses es increíblemente amplio, apostaría que los que se sienten en la última fila de sillas ni siquiera llegan a ver al sacerdote que profesa la misa.
Apuntárosla en la lista de tesoros bruselenses porque merece realmente la pena una visita.
Qué ver Bruselas,
Bruselas,
Bélgica
