Osteria del Sostegno

En italiano, la palabra "sostegno" significa "apoyo". Y el restaurante del que voy a hablaros recibe este nombre porque parece que las viviendas que hay encima se apoyen sobre él, como si las sujetase. Situado cerca del Panteón, este coqueto restaurante sirve deliciosos platos italianos. Es mi segunda vez aquí, pero mi tío y su mujer vienen aquí todos los sábados. Y si un italiano viene aquí a menudo, ¡tiene que ser muy bueno!

Hay algo que me encanta de este sitio: es reservado e íntimo. Está medio oculto en un callejón, lejos de los transeúntes, por lo que no se ve ni se escucha pasar a nadie. También me sorprendió bastante que el personal fuera tan simpático; aunque son muy profesionales, su actitud amistosa con los clientes me hizo sentir como en casa. El dueño trabaja también en el restaurante, lo que me parece un punto a favor y una gran muestra de pasión y dedicación por su negocio.

La decoración:

El restaurante está decorado de forma tradicional. Me encantan los restaurantes temáticos, y en este caso imitan la Roma antigua con sus paredes de ladrillo y fotos de monumentos históricos de la ciudad. Las mesas son clásicas, de madera, con manteles y vajilla blancos que contrastan con la cálida luz del interior.

En el interior hay una pequeña sala con unas siete mesas, pero también cuenta con una terraza cubierta del mismo tamaño. Me gustan los restaurantes pequeños porque suelen servir la comida más rápido y se puede hablar con tranquilidad al no haber mucho ruido. Además, los camareros están siempre muy pendientes, algo que no suele pasar en restaurantes más grandes. Las dimensiones de este restaurante le dan un aire de intimidad perfecto para citas y reuniones familiares o de trabajo.

Creo que cuesta mucho encontrar un buen restaurante en el centro de Roma, ya que la mayoría son para turistas y sirven comida mediocre a precios desorbitados. Por eso, este es el mejor sitio que puedo recomendar: uno de los restaurantes más antiguos de la ciudad, en el centro de Roma y con una relación calidad-precio increíble.

La comida:

El menú es muy variado. Entre los entrantes podemos encontrar "bruschetta" de tomate, ensalada de espinacas con manzana, parmesano con nueces o "carpaccio" de ternera con rúcula y parmesano. Los platos principales incluyen platos de pasta tradicionales como "Cacio e Pepe", carbonara o "amatriciana" y algunos más originales como pasta con garbanzos y trufa, pasta fresca con trufa negra o ravioli de ricota y espinacas con salsa de tomate. Si no te gusta la pasta, también tienen platos de carne como bistec de ternera a la parrilla, ternera asada, cordero y pollo. Y sus postres son de otro mundo. Los preparan allí a diario y puedes elegir entre tiramisú casero, tarta de chocolate, helado y fruta fresca.

La última vez que fui, pedimos un entrante de garbanzos y judías con un surtido de panecillos. Me pareció ideal para abrir el apetito y empezar a comer. Luego pedí pasta "amatriciana", porque ya la había pedido antes y sabía que era un acierto. El "guanciale" (la parte más grasa del carrillo, que es lo que usan en vez de bacon) era suculento y sabroso, y la pasta era una auténtica delicia. Creo que me salté un poco la dieta, pero bueno. Mi madre fue fiel a su dieta y se pidió "straccietti" con alcachofas. Los "straccietti" son finas tiras de ternera con aceite de oliva y hierbas. Mi tío pidió "puntarelle", un tipo de endivia; son unos largos tallos verdes aliñados con aceite de oliva y vinagre - te recomiendo que los pruebes, son muy frescos y acompañan muy bien a cualquier plato. Cuando llegó la hora del postre estábamos llenísimos, pero mi tío quiso que probásemos el tiramisú... y valió la pena: estaba riquísimo. También me pedí frutos del bosque para parecer que me cuidaba un poco.

En definitiva, no podría haberme gustado más. Cuento los días que me faltan para volver a Roma y comer en este magnífico restaurante. ¡Es un tesoro oculto!

Así que si estás por Roma, descubriendo su historia y sus monumentos, como el Panteón, te recomiendo que te pases por aquí para comer. Cierran los domingos por la noche y los lunes, y si quieres venir lo mejor es que reserves mesa. Para más información, visita su sitio web (en italiano).