Roma, la ciudad eterna. Además del Coliseo, uno de sus puntos más emblemáticos en la famosísima Fontana di Trevi. Inmortalizada en la película de Federico Felini, La Dolce Vita (¡con el guapérrimo de Marcello Mastroiani! <3 ), esta fuente es impresionante no sólo por su belleza y sus detalles arquitectónicos, son también (y tal vez, sobre todo) por su tamaño.
No es una fuente cualquiera o como la mayoría que son de forma circular y que se encuentran en medio de una plaza. La Fontana di Trevi se caracteriza porque cuenta con una gran fachada tallada en una gran pared de casi cuarenta metros de ancho. En este artículo, les hablaré un poco más sobre este monumento :)
La hermosa Fontana di Trevi... ¡lástima que ese día estuviera nublado y que me sintiera taaaan cansad! Apuesto a que en otras condiciones, habría podidos disfrutar mucho más de la visita... ¡¡¡definitivamente tengo que regesar!!! >.<
Un poco de historia…
Pues datos históricos y arquitectónicos, ¡hay muuuuchos, un montón! Pero no los aburriré con todos ellos :P Sólo les diré que en un inicio, la Fontana di Trevi no era más que un pequeño estanque. No fue hasta el siglo XVIII que el papa Clemente XII mando a hacer de ese estanque, una gran fuente monumental. Sin embargo, el arquitecto originalmente a cargo de la obra, murió antes de poder verla terminada. Por cierto, la Fontana di Trevi es tan grande que la plaza en la que se encuentra, ¡es prácticamente ocupada por esta magnífica obra de arte!
Otro dato curioso, es su nombre. Aunque no se sabe a ciencia cierta la etimología de “di Trevi”, se cree que ese nombre viene del latín “trivium” y que quiere decir “tres vías” o “tres calles”. Tal vez se preguntarán: ¿por qué tres? ¿cuáles calles? Pues es que la Fontana di Trevi se ubica precisamente en la intersección de las calles Via delle Muratte, Via del Lavatore y Via di S. Vincenzo.
Lo que vi y mis impresiones…
El día que visitamos la Fontana di Trevi, estaba nublado (¡oh sí, lo recuerdo muy bien!). Pero tuvimos suerte porque justo después de haber tomado fotos y demás, fue cuando empezó a llover. Además, afortunadamente la lluvia no duró tanto y no fue tan intensa.
Recuerdo también que estaba muy emocionada y ansiosa de llegar a la fuente. Nos bajamos en el metro Barberini y seguimos los letreros que indicaban el camino hacia la fuente. Creí que la encontraríamos luego, luego saliendo del metro, pero no. Además, en la calle no había letreros claramente visibles que indicaran cuál de todas las callejuelas teníamos que tomar para llegar hasta la dichosa fuente :/
Lo bueno es que cuando preguntamos hacia dónde teníamos que caminar, un pasante nos dio las instrucciones necesarias ^^ Cabe decir que las calles de Roma son caóticas. No por su tráfico, sino porque no son como, por ejemplo, las de Puebla o las de la ciudad de México, que están trazadas en forma de un tablero de ajedrez. Es decir, bien derechitas y que forman un cuadrante. Eso es algo que puede confundir un poco (¡o un mucho! x) ) a los turistas. Pero bueno, con ese tipo de monumentos tan famosos, no hay gran problema. Son tan conocidos que, aun sin mapa, preguntando es muy fácil llegar a ellos :)
Desde este ángulo uno podría decir que sólo son piedras medio talladas :p Pero no, la Fontana di Trevi es realmente muy impresionante por todo el trabajo tan imponente que tiene en sus detalles, tanto grandes como pequeños
Seguimos avanzando derecho y luego giramos a la izquierda… cada vez estábamos más cerca de la Fontana di Trevi. Cuando al fin llegamos a ella… ¡me di cuenta de el verla no me había emocionado ni impresionado tanto como lo esperaba! No, no es que no sea hermosa (¡vaya que sí lo es!), pero creo que mi humor no estaba al cien :(
Ese día habíamos llegado muy temprano por la mañana a Roma (¡a las 5:55 a.m.!). Como la noche anterior habíamos tomado un bus desde Venecia, no había dormido lo suficiente y tampoco de la manera más cómoda posible. Así que entre eso y el clima (nublado :( ), creo que no ayudó mucho a que pudiera apreciar la imponente obra arquitectónica que tenía frente a mí… espero tener la oportunidad de regresar a ese lugar. Estoy segura que una segunda vez me permitirá apreciar mejor el esplendor de la Fontana di Trevi :)
Algo que recuerdo es que, a pesar de que el clima no era tan favorable… ¡había mucha gente! Tomando fotos, tirando monedas a la fuente, comiendo helados, etcétera. Como ya lo dije, siendo uno de los puntos más visitados de Roma, es normal que hubiera muchos turistas. Entre la multitud, escuché a una chica que dijo en voz alta y muy enojada: “¡Ash, me choca la gente!” Se quejaba de que hubiera tantos visitantes en ese lugar jajaja
A mi mamá y a mí nos dio risa: ¿pues qué esperaba? ¿Estar completamente sola ahí? Tal vez debió haber privatizado el lugar, si tan sola quería estar jajaja además, bueno, que con los millones y millones de seres humanos sobre la faz de la tierra, creo que será muuuuy difícil el que vaya a un lugar donde no haya gente :P (A menos que quiera visitar la Antártida y los pingüinitos :p ). En fin, todo esto para decirles que si van a este lugar, prepárense para ver a otros turistas… ¡y de a montón!;) No vayan a ser sangrones como esa chica, eh :P
Mmm... creo que es ahora que observo nuevamente las fotos de mi viaje, que aprecio en más justa medida su hermosura. No me había dado cuenta que tiene por ejemplo ese árbol tallado, ni tampoco de las posiciones de las estatuas o de las esculturas que la coronan, allá en lo alto... ¡tengo que regresar ahí! :D
Aunque estaba cansada, noté que había un hotel justo frente a la Fuente di Trevi. Se llama precisamente “Hotel Fontana”. Me acuerdo que la ventana de una de sus habitaciones, estaba abierta. Cuando la vi, pensé en la magnífica vista que los huéspedes de ese hotel deben tener. ¿Se imaginan despertarse, abrir la ventana y que lo primero que vean sea la Fontana di Trevi, con sus bellas estatuas? :O Pues si tienen unos cien euros y que no saben qué hacer con ellos, pueden reservar una de las habitaciones de este hotel ;)
Ah, volviendo a eso de que había mucha gente, a mí no me molestó. Puedo decir que casi hasta lo disfruté. Justo frente a la fuente hay una especie de gradas en las que se pueden sentar. Ya sea para contemplarla, para comerse un rico y tradicional gelatti (¡hay muchos comercios en los alrededores!) o para observar a los demás turistas. Observar a los pasantes es una de mis actividades preferidas: es interesante ver la multitud de personas y hasta, a veces, escuchar sus conversaciones :p Y no es que sea chismosa, pero a veces, cada cosa que oye uno x)
Como es normal, había parejas y familias tomándose fotos. Me llamaron la atención una señora y su hija que estaban visitando la fuente y tratando de tomarse una selfie.Eran asiáticas, coreanas tal vez. Me dio ternura y gusto porque ese día yo también estaba con mi mamá :) Así que les propuse tomarles una foto y, ellas en cambio, nos tomaron otra a mi mamá y a mí ^^ Puedo decir que hice mi buena acción del día jajaja Además, unas horas después, cerca del Coliseo, volvimos a toparnos con esa señora y su hija, ¡y hasta nos saludamos!
De entre la multitud de turistas, alguien dejó caer una bella rosa :) Yo la recogí y saqué una foto de la flor con la fuente como fondo... Creo que este lugar debe ser uno de los escenarios más románticos, después de aquella legendaria escena de la película clásica "La dolce vita"
No estuvimos mucho tiempo ahí en la fuente. Caminamos de regreso hacia el metro y, como no teníamos mapa, le pregunté a una chica de un restaurante, dónde había una oficina de turismo. Nos dijo que la más cercana estaba a unas calles de ahí, casi al lado de la Fontana di Trevi. Como no teníamos ganas de caminar de regreso hasta ahí, nos sugirió ir a un hotel y pedir ahí un mapa.
Justo ya había pensado en esa alternativa :p Así que antes de tomar el metro para ir hacia otro punto de la ciudad, mi mamá y yo pasamos a un hotel. Cuando entré, la chica de la recepción ni saludó y casi hasta parecía que le molestaba nuestra presencia x) Pero lo bueno que había una pila de mapas en el escritorio. Así que directamente lo tomé y así como entré, me salí :D Tal vez pasé por una maleducada, pero la actitud de la chica no daban ganas de sacar los buenos modales. Uno da lo que recibe :P
En fin, el consejo que les puedo dar es que, si no ven ninguna oficina de turismo, hagan como yo y vayan a un hotel por un mapa. ¡No tendrán que pagar ni un centavo por él! :D Y es que vi varios quioscos que tenían mapas… pero los vendían >.<
No, esta ya no es una foto de la fuente. Es una aldaba de una de las puertas que vi cuando íbamos de regreso al metro. Italia es un graaaaan museo al aire libre porque en cada esquina, volteen a donde volteen, siempre habrá un detalle que los cautivará, una hermosa obra de arte. Encontrarán esto hasta en los elementos que uno podría considerar insignificativos y sin importancia... ¡así que sean observadores y sean como detectives en búsqueda del arte! No sólo en la imponente Fontana di Trevi... ¡¡¡sino en todos lados!!!
La costumbre de las tres monedas…
Antes de terminar, les quiero platicar sobre una costumbre famosa entre los visitantes de la Fontana di Trevi: el arrojar monedas. Como sucede con otras fuentes, se cree que, al lanzar una moneda, pueden pedir un deseo. De hecho, la “tradición” marca que se arrojen no una, ¡sino tres monedas! Una vez más el número tres…
Se dice que la primera moneda es para que regreses a Roma (aww <3). La segunda, para que conozcas a un italiano (¡uuuy, la cosa se pone buena! :D) ¿Y la tercera? ¡Para que te cases con él! (¡oh, mio Dio!) ¿Cómo ven?
No les puedo asegurar la veracidad de esa costumbre, porque supe eso después de haber visitado al Fontana di Trevi… ¡así que no lancé ni una sola! (Además, si tomamos en cuenta el tipo de cambio del euro respecto al peso mexicano… no convenía mucho tirar ese dinero a la fuente, ¡ni por un matrimonio a la italiana! Jajaja Y vayan a saber qué italiano me tocaba, eh :p ). Pero bueno, sí vi varias personas que seguían estrictamente esa costumbre. Y recuerdo que me llamó la atención el ver que aventaban más de una moneda. En ese momento, sólo pensé: “Han de tener muchos deseos que pedir” Jajaja
Cómo llegar
Como ya lo dije más arriba, la estación de metro Barberini es la más cercana. Si lo prefieren, pueden tomar también el autobús 175.
Si toman el metro, cuando salgan de la estación tendrán que caminar un poco. Si no tienen mapa, sólo pregunten dónde queda la Fontana di Trevi, no hay pierde ;)
Conclusión
Como conclusión, no me queda más que decir que la Fontana di Trevi es un must de Roma.Además del Coliseo, no pueden irse la ciudad eterna sin haber visitado esta imponente obra arquitectónica. Aunque eso sí, les recomiendo que vayan descansados y con las pilas al cien. De lo contrario, puede que les pase como a mí y que no puedan apreciar al máximo la belleza de este majestuoso monumento :)
Una fuente que se encuentra a la salida del metro Barberini... cuando la vi, me pregunté: "¿¡Ésta es la famosa Fontana di Trevi?! :O " No, no lo es pero eso no niega que verla puede ser un "avant goût" (pequeñito, eso sí :p ) de lo que les estará esperando en la legendaria fuente de la Dolce Vita <3