Puente de la Torre y la Torre de Londres

Uno de los primeros días que pasé en Londres con mi familia, decidimos ir a visitar la Torre de Londres. Pensé que una o quizás dos horas paseando alrededor de la torre serían suficientes. Me refiero a que es una torre, ¿puede haber mucho que visitar en una torre?

Me equivocaba, y mucho. Cuando llegamos a la Torre de Londres y comenzamos a rodearla para llegar hasta la entrada, comencé a darme cuenta de lo grande que este lugar. La torre no es solamente una torre, es una fortaleza. Una fortaleza muy grande y muy antigua. Llegamos justo a tiempo para unirnos al grupo de la visita guiada gratuita que lideraba un «Yeomen Warder» (guardián ceremonial). Este señor iba vestido de uniforme y, con una voz muy potente, lanzaba bromas muy serio para prepararnos para la aventura que nos esperaba. "¡Americanos! podríais haber tenido todo esto si tan solo hubieseis pagados vuestros impuestos" nos dijo. Y comencé a replantearme nuestro "Amexit", nuestra decisión de separarnos de Gran Bretaña (pero me encanta ser libre, así que solo me llevó un minuto recordar porqué nos separamos).

Tras bromear un rato con el «Yeomen Warder» y después de dar una pequeña vuelta por el recinto, vimos el cambio de la guardia. Fue muy divertido porque estábamos seguros de que los guardias intentaban hacerse reír unos a otros todo el tiempo. Además, pudimos ver las joyas de la corona y esto hizo que me acordara del episodio de la famosa serie Sherlock en la que Moriarty robaba estas joyas.

Una de mis partes favoritas de la Torre de Londres fue visitar las casas en las que viven muchos de los «Yeomen Warder». Son preciosas, con flores muy bien mantenidas en la fachada y puertas pintadas de una forma muy bonitas. Empecé a preguntarme si debería alistarme en las Fuerzas Armadas Británicas solo para tener la oportunidad de vivir en una de estas casitas tan monas.

Al final, pasamos todo el día en la Torre de Londres. Todavía no estoy segura de si lo vimos todo. Desde la exposición que muestra cómo eran algunos animales salvajes originalmente hasta las armas expuestas en la White Tower... todo esto me transportó en el tiempo y aprendí muchísimo acerca de la antigua Londres. ¡Incluso vimos a un dragón protegiendo un tesoro!

¡Gracias, Torre de Londres!