¡Yo grito, tú gritas, todos gritamos pidiendo helado! El helado es una de esas comidas que los británicos devoramos en cualquier época del año. En verano, nos refrescaremos con un cono mientras intentamos tomar el sol con el patético calor de 15 ºC, mientras que en invierno usamos esto como una especie de protesta de "soy invencible" contra el frío. En otras palabras, nunca dejamos de lado el helado. En un viaje a Camden Town el viernes pasado supe que tenía que darme un capricho, y tras una rápida búsqueda en internet, decidí que Chin Chin Labs sería el mejor lugar para hacerlo.
¿Qué hace especial este lugar?
Chin Chin Labs, el lugar que leí y posteriormente vi por mí mismo, es diferente de la mayoría de las heladerías. Todos los productos son vegetarianos (¡algunos veganos!) y sin gluten. Todos están hechos con (redoble de tambor, por favor) ¡nitrógeno líquido! Cuando entré en la tienda, me recibió una gran nube de vapor blanco. Este era, por supuesto, el producto químico utilizado. Todo el lugar tiene un aire de laboratorio científico, y si tuviera alguna pregunta sobre el nombre del lugar antes de entrar, todas serían aclaradas ahora. (La parte del 'Chin Chin', en caso de que te lo estés preguntando, es la palabra italiana para decir '¡salud!'. )
¿Qué pedí?
Me temo que no fui demasiado aventurera con mi pedido esta vez: helado de caramelo de mantequilla fundida cubierto (gratis) con trozos de panal de polen de abeja. La próxima vez, prometo probar algo un poco más original. Otros ingredientes eran pistacho y cardamomo en polvo y trufas desmenuzadas, y había bastantes postres más elaborados relacionados con el helado para elegir (¡conos de nubes y sándwiches de galletas, entre otros!).
¿Vale la pena hacer publicidad de Chin Chin Labs?
¡Desde luego! No sólo el helado es más suave que en una heladería normal (gracias, supongo, al nitrógeno líquido que contiene), sino que todo el interior de la tienda, parecido a un laboratorio, lo convierte en un lugar muy especial para visitar. Además, todos los empleados que conocí eran encantadores y mi pedido se preparó muy rápidamente. ¿Mi única queja? El espacio para sentarse era un poco pequeño.
¡Pruébalo tú mismo!
Si alguna vez estás en Londres y tienes ganas de algo frío y dulce (o caliente y dulce ¡también hacen chocolates calientes!), asegúrate de ir a Chin Chin Labs en Camden Town. Podrás disfrutar de algunos de los mejores postres que Londres ofrece, ¡y puede que sólo veas algunas reacciones químicas durante la visita!