La Piedra del Peñol y Guatapé

Guatapé, como uno de los lugares turísticos más pintorescos y naturales de Colombia y a tan solo dos horas de la ciudad de Medellín, es un municipio que acoge a cada turista local o extranjero que va a visitar. Al llegar al pueblo, uno se los sitios más espectaculares para visitar es La Piedra del Peñol.

Cómo llegar en transporte público

Estando en la ciudad de Medellín, es necesario dirigirse a la Terminal de Transportes y allí abordar un bus público que se dirija hacia el municipio de Guatapé y continuar hasta la Piedra del Peñol, siendo ésta la última estación posible. La hermosa vegetación que se visualiza durante el trayecto, es un abre bocas de los paisajes próximos a apreciar en la Piedra del Peñol.

Embarcados en la aventura y llegados a la estación de la piedra, se ofrecen varias oportunidades para subir hasta la entrada del sitio, entre ellas están: en caballo, en jeep, en moto o caminando con el fin de ejercitar el cuerpo. Dicha primera subida dura alrededor de 15 minutos.

Una vez se llega a la base de la piedra, el paisaje parece ser prometedor, lo cual anima a los visitantes a tomar el rumbo hacia la cúspide de la piedra y disfrutar la grandeza de la naturaleza. Para subir a la cúspide hay que pagar la entrada en la taquilla. El ascenso en todo un desafío, puesto que únicamente es por medio de los más de 700 escalones que la componen. Es todo un ejercicio y es importante manejar un buen estado físico sin extremos, así como realizar paradas con el fin de descansar y tomar energías para continuar.

Una vez pisado el último escalón, la victoria física ha sido lograda, sin embargo, la vista panorámica próxima a obtener, facilita la recarga energética de cualquier persona, pues es un paisaje que vislumbra por su belleza. Pequeños y contiguos islotes se perciben a kilómetros de velocidad. Es toda una vista de 360° que deja sin palabras a más de uno y lo mejor de todo es tomar un tiempo en silencio para disfrutarlo. Además es un excelente lugar para capturar impactantes fotografías naturales. Para quienes quieren obtener un recuerdo conmemorativo del momento, son invitados a que aprovechen y compren los souvenirs en la tienda que está localizada en la cúspide.

Luego de haber alimentado el alma y el espíritu con el paisaje, los turistas regresan al pueblo para almorzar y explorar sus pintorescas calles que agradan por su particularidad y tradición. El pueblo se recorre caminando y los habitantes son felices de recibir a los turistas y hablarles sobre sus costumbres, cultura y compartir con ellos una taza de café, siendo la plaza es uno de los lugares más representativos del pueblo.

Si vas a Medellín, no puedes irte sin visitar antes el Peñol de Guatape, ya que lo considero como un "must see" de Colombia del que no te arrepentirás jamás. Eso sí, debes de mentalizarte para caminar mucho y subir algunas escaleras pero aquello tendrá su recompensa.

El camino

(Llegando a la piedra del Peñol)

Para llegar al Peñol hay que transitar la carretera, pero esta experiencia es muy bonita por el paisaje que se tiene de la ciudad de Medellín al irse y la vista del Peñol y el agua al llegar. Es muy rápido llegar a Guatapé porque se encuentra a menos de dos horas de la ciudad de Medellín, sin embargo el camino tiene muchas curvas, por lo que es recomendable tomar alguna pastilla si es que te mareas fácil. En el camino hay algunos lugares barátos donde podrás disfrutar la típica comida colombiana a los precios más bajos, ya que la venden personas en la carretera y no en restaurantes.

Descripción

Al llegar al pueblo y dirigirse al peñón, vas a observar un enorme monolito que tiene escrito "GI", ya que no se pudo terminar de escribir en él Guatapé porque fue declarado como Patrimonio de la Humanidad y esto lo proteje automáticamente de cualquier modificación en su estructura. La entrada al peñón es por detrás, ya que hay una serie de escaleras construidas para permitir a los visitantes subir.

Un poco de historia

Aunque es relativamente "descrubrir" una piedra de más de doscientos metros fue resalta por su tamaño, escalarla puede ser algo a lo que no todos estén dispuestos. De hecho, no fue hasta el año de 1954 cuando Luis Eduardo Villega López y sus acompañantes subieron el monolito por primera vez, imagínate el trabajo para subirlo si no siquiera se habían adecuado las escaleras. Como recordatorio a ellos, en la parte superior se encuentra una especie de mural donde sus nombres se encuentran grabados.

A vivir la experiencia

Subir 725 escalones no es algo a lo que estemos acostumbrados, pero hay que estar dispuestos a hacerlo ya que recibirás todo tipo distracciones que ni siquiera te harán recordarlo. Las escaleras suelen estar un poco estrechas pero el día que fui era fin de semana y no había mucha gente por lo que se podía transitar muy bien.

(El escalón antes de llegar a la cima)

La primera ayuda será el poder ver en qué escalón vas, esto te motiva a no mirarlos y seguir adelante. Otra de las ayudas es el regalo que te da la vista, ya que esta va mejorando con la altura y muchas veces podrás parar y descansar contemplando el panorama, podrían pasar horas y seguirías miránodolo, el juego de colores es algo que no se olvida.

(Vista a medio camino)

Una vez arriba

Cuando uno termina de subir la vista se vuelve increíble, puedes apreciar gran parte del lugar cubierto por agua, y esto no es natural del paisaje, se ve asi porque las empresas públicas de Medellín inundaron el área en 1970 para construir un complejo hidroeléctrico, por lo que la zona cambió por completo y se hizo más turística.

Al llegar a la cima estarás feliz pero con muchísima sed y cansancio, pero no te debes preocupar por nada porque se pueden comprar refrescos, aguas, jugos y antojos a un precio accesible, pero mucho más elevado de lo que cuestan abajo (también hay baños, así que no te preocupes). La zona es muy segura para turistas, la vista es preciosa y es un lugar del cuál uno no se puede escapar.

La tienda de recuerdos

No todas las personas tienen el ánimo de subir y para ellas habrá muchas personas vendiendo recuerdos del lugar en la parte baja, pero las personas que hayan decidio subir se encontrarán con una tienda de recuerdos que se encuentra antes de llegar a la cima. Esta tienda ocupa todo el piso, y tiene cualquiero tipo de recuerdos que te puedas imaginar, eso sí, los recuerdos son más de colombia en general que de la Piedra del Peñol. El precio de los recuerdos es muy justo y podrás encontrar regalos para lo que sea que estés dispuesto a pagar, eso sí debes de traer efectivo porque muchas veces no tienen pago con tarjeta.

¿Costo?

A pesar de que la entrada tiene costo ($12000 COP cuando yo fui), es muy accesible

¿Cómo llegar?

Te recomiendo mucho ir en un bus turístico ya que si vienes sólo te saldrá mucho más económico, aparte de que ayudarás a un país que vive del turismo.

Si es que vas en carro debes de tomar la carretera (la Autopista Reginal -> Autopista Medellín - Bogotá -> Marinilla - El Peñol) y finalmente sigue el tramo de El Peñol - Guatapé.

Recomendaciones

• Es mejor ir en un Tour, ya que no sólo conocerás la piedra sino te darán un tour por el pueblo, paseo en lancha, transporte y almuerzos.
• Por tu comodidad te recomiendo demasiado que te traigas unos buenos tenis y ropa cómoda, ya que me encontré muchas chicas que subieron en tacones y falda, no pasaron el mejor de los momentos.