La Rentaora es una pequeña joya en el centro de Valencia. Me encanta para ir con amigos, conversar alrededor de una botella de vino (o más de una) y probar varias de sus delicatessem: desde los patés caseros a los quesos aderezados con confituras.
Hay más: ensaladas, humus, tapas y postres... Las raciones no son muy grandes y el precio va acorde al tamaño, lo que permite pedir un mayor número de platos.
El local es pequeñito pero muy acogedor; habrá unas seis o siete mesas y siempre está lleno, por lo que convierne reservar. En verano montan la terraza y, con el clima de valencia, por la tarde/noche se está de maravilla.
Os dejo una foto para que se abra el apetito y os animéis a probar.
Galería de fotos