¡¡Hola a todos!! En esta entrada quiero hablaros de una playa a la que fuimos una vez durante mi estancia en la isla de Tenerife: Playa Abama. Se trata de una playa paradisíaca de arena blanca a los pies de un gran hotel de lujo, pero que es de acceso público.
¿Cómo llegar?
Es una locura llegar hasta esa playa, nos costó bastante encontrarla. Se supone que está en una localidad llamada "Playa San Juan", sí, ese es el nombre del municipio entero, no es que se refiera a la playa en concreto, así que pusimos esa ubicación sin saber este detalle y nos llevó al pueblecillo el cual tiene una pequeña playa de arena negra pequeña y sin más, al ver que no era la que buscábamos dimos medias vuelta.
Piscinas naturales
En nuestro aventura en este pueblo vimos también algunas personas disfrutando de unas psicinas naturalesque estaban allí, estaban genial con colchonetas y súper a gusto, nos planteamos quedarnos allí, pero el inconveniente era que era todo rocas, no había arena blandita para tumbarnos, iba a ser muy incómodo, así que decidimos seguir buscando la playa de Abama. Además el espacio era reducido, pero me gustaron bastante:
Hotel "The Ritz-Carlton"
Creo recordar que conseguimos llegar finalmente poniendo la ubicación de este hotel, por lo que para llegar a la playa aunque os resulte raro hay que entrar en él, fue lo que más nos confundió a nosotras ya que no sabíamos si nos iban a llamar la atención pero así lo hicimos y no nos pusieron problemas, de hecho si quieres ir a la playa tienes que entrar y aparcar dentro del territorio mismo del hotel, el único incoveniente es que los aparcamientos están arriba del todo, por lo que tendrás que dejar el coche arriba y bajar andando un buen rato, ya que se trata de una cuesta bastante larga, y lo peor nos es bajarla, si no subirla. Para los residentes en el hotel hay un ascensor, pero claro, nosotras no podíamos utilizarlo por lo que eran unos quince minutos para bajar y otros quince para subir.
Para bajar tuvimos suerte, ya que unos trabajadores que bajaban con su furgoneta se ofrecieron a llevarnos y llegamos en nada, pero la vuelta subiendo la cuesta, fueron uno quince-veinte minutos intensos.
La playa
Como ya he dicho, la playa tiene una preciosa arena dorada, es muy tranquila y el agua también ya que tiene un rompeolas,lo que hace que no haya ningún peligro en el agua.
El agua no es muy cristalina, supongo que es por la arena que pesa poco y se eleva.
A la izquierda tiene una parte de rocas desde la cual puedes saltar al agua desde una altura de uno o dos metros. también si sigues más adelante puedes dar un paseito, como se puede ver en la primera imagen.
Cuando nosotras fuimos estaban celebrando allí una boda al aire libre, con servicio de katering y todo, muy lujoso, y estuvimos allí viéndola, era un sitio bastante bonito.
En definitiva, si estáis en Tenerife, os recomiendo quevayáis a esta playa, merecerá la pena, eso sí, seguid mis intrucciones para llegar, cuesta un poco.
Atardecer en Abama