Amsterdam

¡Hello, amigos!

Y hoy os vengo a escribir de, sin duda, una de las mejores ciudades de Europa, y que sin duda, si estáis haciendo vuestro Erasmus por el norte de Europa, no debéis dejar de ir (y repetir si es necesario). ¡Imagino que ya sabéis de que fántastica ciudad hablo! Amsterdam.

Como ya os conté en varias de las primeras publicaciones que realicé, desde Bélgica (Bruselas, exactamente) puedes visitar gran parte de Europa por la mitad del precio que lo harías si viajaras des de España. Además, el hecho de que esté en el centro de Europa, también ayuda, ya que puedes ir a casi cualquier país con autobus sin que se haga muy pesado. Flixbus y Megabus son las dos compañías más económicas de autobuses, ¡así que anotaroslo!

Bueno, sin saberlo, cogimos el viaje para el fin de semana anterior al tan famoso y popular "King's Day", que es el 27 de Abril. Aparentemente, suena divertido, pero tuvimos bastantes problemas para encontrar hotel/hostel donde hospedarnos, todo estaba ocupado o era carísimo. Así que si ese día queréis estar en Amsterdam, perfecto, ¡pero planearlo con antelación!

Marchamos hacía Bruselas el 25 de Abril en el primer tren. Tomamos nuestro Megabus y a las tres horas (alrededor de la una) estábamos en Amsterdam. La estación de autobuses no está en el centro de la ciudad, pero hay un tram que te lleva a la plaza de la estación, con lo que está genial y bien comunicado.

Ahí, te recomiendo que compres el bono de billete que cubre 2, 3, o más días... los que necesites. Lo primero que hicimos fue comer e ir al hotel, ya que con las mochilas era bastante incómodo hacer turismo. Después, de vuelta al centro.

El primer día vimos los típicos puntos turísticos del centro; la Plaza Dam, el Begijnhof, las iglesias más populares, y paseamos por los canales. El barrio rojo lo dejamos para lo último. A las 18:00h, las chicas teníamos hora reservada para la casa de Anne Frank. Así que ahí nos dirigimos. Los chicos, de mientras, se nos adelantaron con el coffee shop.

Sin duda, la casa de Anne Frank es lo más recomendable de Amsterdam bajo mi punto de vista. Hay tanta historia detrás... tanta injusticia. ¡Es un lugar que no podéis saltaros! Os recomiendo, pero, que reservéis hora por internet que sólo os va a costar 0, 50 céntimos más y os evitáis las largas colas.

Al acabar la visita del museo, nos unimos a los chicos, quienes ya estaban algo "contentillos". Si queréis ir a coffee shop os recomiendo los de la cadena de Bulldog. Están por todas partes y al parecer, eran los más conocidos ya que estaban a tope de gente. La verdad, fue una noche de 10. Me lo pasé super bien y hubieron muchísimas risas... quizá más de las que tocaban, ¡pero ya estaba bien! Salimos del coffee shop al rededor de las dos de la marugada e intentamos buscar la fiesta. No os recomiendo nada que os paseéis de noche por el barrio rojo (es ahí donde estaba situado el coffee shop al que fuimos). Hay 40 personas en cada esquina intentándote vender droga y no se quedan cortos con los intentos de hurto. Así que escapamos como pudimos de esa zona y acabamos en un lugar que, ni recuerdo el nombre ni os lo voy a recomendar. Lo pasamos bien pero no supimos acertar con la fiesta ese día.

Volvimos al hotel alrededor de las 5 de la mañana, y con esto se acaba el primer día. El segundo y el tercer día (King's Day) os los explicaré en las dos siguientes publicaciones :)

¡Hasta pronto!

Ámsterdam es la ciudad de las luces. Sus canales y puentes, su centro histórico renacentista y su ubicación estratégica hacen de Ámsterdam una de las capitales europeas más interesantes.

Desde luego, no podemos olvidar el rol económico que cumple el gran puerto, incluso si compite con Rotterdam. Tampoco podemos olvidar su historia, especialmente durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Ámsterdam fue ocupada por los soldados Nazis y la comunidad judía prácticamente desapareció de la ciudad.

Ámsterdam es también un lugar fantástico por su transgresión respecto al uso de drogas blandas, que puedes comprar en "coffee shops", o la legalización de la prostitución en el mundialmente famoso barrio rojo.

La plaza Dam es una plaza de Ámsterdam, la capital holandesa. Muchos eventos tienen lugar aquí. Se encuentra en el centro histórico de Ámsterdam, cerca de la estación central. Antaño había una presa en el río Amstel.

En la plaza Dam puedes ver el Palacio Real, que era un ayuntamiento y pasó a convertirse en una residencia real en el siglo XIX, Nieuwe Kerk (Nueva Iglesia) del siglo XV, y el museo de cera Madame Tussauds. Hay un monumento nacional, un pilar de piedra blanca, que conmemora las víctimas de la Segunda Guerra Mundial.

La plaza Dam se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas en Ámsterdam. Creo que todo el mundo adora esas palomas que se reúnen en las plazas, ¡y la plaza Dam no es una excepción! Hay un montón de palomas ahí y a la gente le encanta hacerse fotos con ellas.