Xurreria La Tassa

Vivir tres meses en Madrid y no probar los churros habría sido muy raro. Por tanto, como mi cuatrimestre como auxiliar Comenius está a punto de acabar, decidí que ya era hora de probar este dulce típico; aún más si tenemos en cuenta que, te lo creas o no, acaban de abrir una churrería en mi vecindario, a solo unos minutos andando desde mi casa. ¿Que cómo estaban los churros? Bueno, puedes juzgar por ti mismo con solo ver las fotografías...

Por lo que sé, la Xurreria La Tassa, en la calle Vilanova i la Geltrù, ha sido un gran descubrimiento. No obstante, antes de continuar, creo que debería explicar qué son los churros ("xurros" en catalán). Este tipo de tentempié dulce, muy conocido en España, está hecho de mantequilla, harina, sal y azúcar. Una vez hecha la mezcla, se fríe durante un minuto más o menos y se come con chocolate caliente. De hecho, son tan populares en España que hay una expresión española para decir que un producto está teniendo mucho éxito comercial: "venderse como churros", lo que en inglés sería "sell like hot cakes".

Ahora bien, a decir verdad, los churros se suelen vender en los puestos callejeros y, por tanto, la gente se los come durante el paseo a media tarde, aunque todo el mundo sabe que la mejor forma de comerlos es con chocolate caliente, como ya he dicho. Por eso, fui a la Xurrería La Tassa que, a pesar de haber abierto hace solo un mes, ya tiene cierta reputación en Vilanova i la Geltrù. Afortunadamente, nada del local me decepcionó: tanto los churros como el chocolate estaban deliciosos.

Por tanto, os recomiendo encarecidamente el lugar, no solo para desayunar algo dulce, sino también para comer un sándwich frío o caliente. Además de los precios, que están muy bien (por un 1, 50€ tienes una porción abundante de churros y por 3 € tienes churros con chocolate), otro punto a favor de la churrería es que, a diferencia de otros bares o cafeterías, no se encuentra en la Rambla Principal. De este modo, no necesitarás andar 15 minutos si no vives en el centro, como es mi caso.

Haber estado en España tres meses sin probar los churros habría sido raro. Como se acerca el final de mi primer trimestre como auxiliar Comenius, he decidido que ha llegado el momento de probar esta dulce especialidad. Además, lo creáis o no, acaban de abrir una nueva xurreria en mi barrio, a dos minutos de mi casa. ¿Cómo me ha ido? Pues... ¡podéis juzgarlo vosotros mismos viendo las fotos!

La xurreria La Tassa di Vilanova i la Geltrù ha sido un agradable descubrimiento. Aunque antes de seguir sería mejor explicar qué son los churros (xurros en catalán). Este tipo de dulce, que es bastante popular en España, consiste en una serie de trocitos de una masa compuesta de harina, sal y azúcar, que tras freírlos durante unos minutos, se comen con chocolate caliente. De hecho, son tan populares que hay una expresión idiomática en español con ellos para indicar que un producto se está vendiendo con éxito: "venderse como churros", la equivalente de la inglesa "sell like hot cakes" o la italiana "andare a ruba".

La verdad es que los churros normalmente se compran por la calle, en puestecitos, y se comen paseando por la tarde. Todo el mundo sabe que la mejor manera para apreciarlos de verdad es, como ya he mencionado, acompañándolos de chocolate caliente. Esta es la razón por la cual he decidido acercarme a la xurreria en cuestión, que habiendo abierto hace apenas un mes ya ha conseguido cierta reputación en Vilanova y la Geltrù. Afortunadamente, no me he llevado ninguna desilusión: tantos los churros como el chocolate estaban deliciosos.

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Recomiendo totalmente ir al local, ya sea para un dulce desayuno o para un tentempié a cualquier hora, ya que también tienen bocadillos. Además de por los precios, que son perfectamente accesibles (1, 5 € por una abundante ración de churros, 3 € los churros con chocolate), otra razón para elegir este lugar es la localización: a diferente de muchos otros bares o cafés, no está en la Rambla Principal, por lo que no tendréis que hacer la caminata de 15 minutos si no vivís en el centro, como es mi caso.

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