Monumento a Washington

Introducción

El Monumento a Washington, más conocido como Washington Monument, es uno de los monumentos más importantes y característicos de la capital de los Estados Unidos.

Este monumento se encuentra en el lado oeste del National Mall, el parque nacional más importante de Washington, donde se encuentras los más famosos monumentos y edificios de la ciudad, como el Monumento a Lincoln, la Casa Blanca o el Capitolio.

Un poco de historia...

El monumento a Washington se empezó a construir en 1848 y se termino 1888. Está dedicado al primer presidente de los Estados Unidos, George Washington, el cual jugó un papel muy importante en la historia de este país al llevar a los Americanos a la victoria en la Guerra de Independencia que tuvo lugar entre 1775 y 1783. La Guerra de la Independencia enfrentó a las 13 colonias británicas originales en América del Norte contra el Reino de Gran Bretaña, y tras la victoria de las colonias, Gran Bretaña reconoció la independencia de sus colonias en el Tratado de Paris.

Un dato curioso es que en 1884 se convirtió en la construcción mas alta del mundo, hasta que en 1889 la Torre Eiffel le arrebató ese puesto de honor. Aun así, es la construcción mas alta de Washington DC, y lo más probable es que lo siga siendo porque hay una ley que restringe la altura de los edificios en la capital Americana, y muchos de los ciudadanos creen que hay una ley que prohíbe una construcción de mayor altura que el monumento a Washington, pero según parece solo es una creencia. Me alegro de que esta ciudad no sea la típica ciudad estadounidense llena de rascacielos, porque los cielos que se pueden contemplar aquí son impresionantes, no he visto nada igual en mi vida.

El monumento

Este monumento conmemorativo es un gran obelisco blanco de unos 170 metros de altura y está construido en mármol, granito y piedra. El arquitecto que lo diseñó fue Robert Mills, sin embargo, murió 30 años antes de que se finalizara. Debido a la falta de fondos, el monumento tardó 40 anos en terminarse, y se tuvo que utilizar un tipo de mármol diferente, esta diferencia se puede apreciar en el obelisco a partir de una altura de 50 metros.

Hay una inscripción en cada una de las caras del piramidón en ingles, pero no son muy interesantes.

En un principio el monumento iba a tener un emplazamiento diferente, pero al ser un terreno pantanoso e inestable, se cambió a su emplazamiento actual. El emplazamiento actual cuenta con varias ventajas, como que es un terreno elevado, lo que permite que el monumento se vea desde muchas partes de la capital, y al no ser un terreno privado, está seguro de futuras obstrucciones visuales. Por otro lado, el monumento puede ser visto desde el Monte Vernon, donde George Washington vivió durante un tiempo hasta que murió y allí es donde se encuentra su tumba.

La administración de este monumento la lleva el Servicio de Parques Nacionales.

Opinión y experiencia

Cuando llegué a Washington Dc, desde Arlington (Virginia), lo hice en metro, y nada más salir al exterior, fue lo primero que vi, así que le tengo bastante cariño a este monumento. Me impresionó bastante por su altura, y por la gran explanada en la que se encuentra. Al no tener otros monumentos o edificios a su alrededor, se puede ver en todo su esplendor, y aunque ya lo había visto en Internet, o películas, no tiene nada que ver, hay que ponerse en la base donde se encuentra para darse cuenta de su belleza y magnitud. Como no, en la base hay varias banderas norteamericanas alrededor del monumento, y parece que lo están custodiando.

He tenido la suerte y la desgracia de ver este monumento con nieve en la esplanada, digo suerte porque es muy bonito, el monumento es blanco y la esplanada blanca, y desgracia porque hace tanto frío que no se puede disfrutar bien.

Ha tenido varias amenazas de bomba, y otros intentos, pero sin éxito hasta el momento.

A parte de tener que visitar el monumento desde la base, otro lugar que os recomiendo es desde el Monumento a Lincoln, que se encuentra justo en frente del monumento a Washington, separados por un estanque conocido como Lincoln Memorial Reflecting Pool (la Piscina reflectante del monumento a Lincoln). Desde este sitio se han tomado las más famosas fotos del monumento, y es precioso, ya que el monumento se ve reflejado en la piscina y la vista es preciosa. Yo tuve la suerte de ver un atardecer rosado con el monumento y su reflejo en el agua. Y si estáis en la ciudad el 4 de Julio, se celebra el día de la Independencia de los EEUU, y se pueden ver unos impresionantes fuegos artificiales en la Piscina reflectante.

Cómo llegar

Para llegar al monumento, podéis seguir la pista a la cúspide del obelisco (no lo recomiendo porque las distancias engañan) o ir en metro. La parada de metro más cercana es Smithsonian o Federal Triangle (lineas naranja, plateada y azul).

Espero que os guste tanto como a mí, por cierto no lo he comentado antes pero la visita es gratuita, así como la de todo el National Mall y la mayor parte de los museos de Washington DC. Os lo recomiendo sin dudarlo!