Ledesma

A poco más de media hora de Salamanca se encuentra el precioso pueblo de Ledesma. Os voy a contar la excursión que hicimos para pasar el día allí, que nos gustó muchísimo. Además si no tenéis coche, hay varios autobuses que os llevan desde Salamanca hasta el pueblo. 

El pueblo en sí se puede visitar en medio día, por ejemplo, podéis ir al pueblo y visitarlo durante la mañana y por la tarde acercaros hasta el parque de los Arribes del Duero que tiene paisajes increíbles. Se pueden hacer muchas opciones de turismo activo: rutas a caballo, senderismo, escalada... 

¿Qué visitar en Ledesma? 

Lo primero que veremos al llegar el pueblo seguramente sea la Iglesia de Santa María la Mayor que es lo que más sobresale de su skyline, esta iglesia se encuentra en el mismo centro del pueblo. Si sois de los que, como yo, os gusta ir primero a la Oficina de Turismo a coger el típico mapita o todos los planfletos que os den para que os informen de las mejores cosas que hay para hacer por allí, os cuento que esta oficina está en lo que antiguamente era la Iglesia de San Miguel, allí también está el centro de interpretación Bletisa (antiguo nombre de Ledesma) y por 1€ que nos cuesta la entrada conoceremos todos los secretos de la historia de este pueblo. 

La primera vez que fui a Ledesma, que ha sido cuando hice turismo por allí, las demás veces ya he ido a eventos puntuales o a casas de amigos, era sábado o domingo, no recuerdo bien, y esta aquello lleno de turistas y era todo como seguir a una masa de gente. Creo que era porque había algunas excursiones organizadas desde Salamanca y otros sitios. 

Pues bien, seguimos nuestra excursión por Ledesma por su fortaleza, donde subimos a las murallas y tenemos unas buenas vista del pueblo y al otro lado del campo cercano. Seguimos junto a la muralla, viendo los restos de la muralla que recogía antiguamente todo el pueblo. 

Después nos fuimos a la Plaza Mayor, donde están el palacio de Beltrán de la Cueva y la Casa de los Roderos estos dos edificios se encuentran unidos por un arco, el arco de los roderos, que es una de las entradas hasta la plaza. 

Después, como estábamos cansadas estuvimos andando por los alrededores del pueblo y viendo los puentes que cruzan el Río Tormes, que es una visita obligada en el pueblo.

Por la tarde, hicimos una paradita en una cafetería del pueblo para tomarnos un café y degustar las tradicionales rosquillas de Ledesma, si encontráis a personas mayores de allí del pueblo os contarán encantados la receta tradicional de las rosquillas.

Os cuento un poquito, estas rosquillas siguen actualmente según nos contaron la misma receta que el primer día que se elaboraron. Son completamente naturales y no tienen aditivos. 

Poca gente te cuenta la receta completa paso a paso, pues es un secreto muy bien guardado pero si te cuentan por encima como amasan todos los ingredientes y luego, de forma manual se les da forma de una en una. El proceso es muy laborioso, puesto que es todo de manera artesanal. Y luego ya simplemente se hornean. 

Asi qué si estáis por Ledesma, no olvidéis pasaros por su famosa confiteria a llevaros unas cuantas bolsas de rosquillas.