Camino de Santiago: preparativos

Camino de Santiago: preparativos.

¡Hola a todas y todos! ¿Han escuchado hablar del camino de Santiago? Pues yo estoy a punto de vivir esa experiencia y quiero compartir con ustedes poco a poco lo que en ella vaya viviendo. A lo largo de diversas entradas les iré platicando y contando sobre el Camino de Santiago, y conforme vaya haciendo cada tramo les hablaré de los pueblos por los que vaya pasando y todo lo que se presente en el camino.
Mientras escribo esto me estoy dirigiendo a Sarria, el punto de partida desde el cual comenzaré mi camino. Decidí pasar la noche ahí para comenzar el camino mañana a primera hora y que no me toque caminar bajo los fuertes rayos del sol a la hora del calor. A continuación quiero hablarles sobre todos los preparativos que llevé a cabo antes de iniciar el viaje, con el objetivo de que le sirva de guía o resuelva dudas a quien tenga planeado hacer el camino de Santiago.

Planear el trayecto del camino

Cuando, todavía en México, supe que había sido aceptada para realizar una estancia de investigación en la Universidad de Santiago de Compostela, una de las primeras cosas que pensé fue que sería una oportunidad única para hacer el famoso "camino". Ya desde hace tiempo había escuchado sobre el camino a Santiago y me habían dado muchas ganas de hacerlo, así que no pude más que pensar que debía aprovechar esta oportunidad única, ya que probablemente nunca más volvería a estar tan cerca.
Entonce comencé a investigar sobre el camino, sobre las distintas variantes y etapas, y busqué algo que pudiera encajar con mi horario y calendario en la Universidad. Yo creo que esto es lo primero que se debe de hacer: pensar en el tiempo con el que se cuenta, pues no es lo mismo hacer la etapa más corta, de cinco días, que hacer todo el camino francés de más de un mes. Además del tiempo conviene tomar en cuenta también la economía, pues entre más tiempo sea, más dinero se gastará en hospedaje y alimentación. Finalmente, otro factor importante a considerar es la propia condición física: caminar alrededor de veinte kilómetros diarios (generalmente cargando en la espalda el propio equipaje) durante varios días es un reto más que singular, y créanme que, por mucho que uno o una crea que esta preparado o preparada, no siempre es así.

Por todo esto, conviene primero tener en cuenta estos tres factores: tiempo, dinero y condición física, para después ser capaz de fijar un aproximado de días o de kilómetros según la ruta que se desee hacer. Respecto a esto, hay muchísimas rutas o muchísimos tipos de caminos. El más popular, según he visto, es el 'camino francés', pero también he visto otros nombres como el 'camino portugués', 'camino inglés' o 'camino aragonés'. Todos atraviesan diferentes zonas de la península y siguen distintas rutas, pero en todos se puede buscar un punto de partida que coincida con el número de días y de kilómetros que se quieran hacer hasta llegar a Santiago.

Para quienes quieran hacer el camino más corto, una de las opciones más viables  es la que yo estoy por comenzar, que es el final del camino francés, sus últimos cien kilómetros, para lo cual hay que partir desde Sarria y caminar por cinco días (es el tiempo recomendable, pero pueden ser más o menos dependiendo de la disposición y condición de cada quién) hasta llegar al añorado Santiago de Compostela.

La Compostela

Existe algo llamado 'Compostela', o también lo he escuchado con el nombre de 'Compostelana' (aunque más he escuchado el primero), que es un diploma que certifica que se completó el camino de Santiago, siempre y cuando se haya cumplido con el mínimo de kilómetros que se solicitan para cada categoría. Para quienes realizan el trayecto a pie o a caballo se pide un mínimo de cien kilómetros para poder obtener el certificado. Para quienes lo hacen en bicicleta, el mínimo es de doscientos kilómetros.
No estoy segura de cuál sea el precio para obtener la Compostela, pero espero que no sea tan cara, pues a mí sí me gustaría solicitarla como recuerdo y constancia de esta experiencia que estoy a punto de comenzar y por la que me siento muy emocionada. En cuanto averigüe su precio, se los haré saber. (Escribo este paréntesis después de haber terminado el camino; ya sé cuál es el "precio" de la Compostela, y si desean saberlo pueden leerlo en la entrada que hice sobre mis Consideraciones generales del Camino de Santiago).
Para comprobar que se han completado los kilómetros mínimos, lo que se hace es sellar un folleto, conocido como 'credencial del peregrino', en cada parada que se hace. El folleto yo lo conseguí en la oficina de acogida al peregrino, en Santiago de Compostela, que es donde también se puede solicitar el certificado de la Compostela. Me han dicho que esta credencial del peregrino se puede conseguir en Madrid, o supongo que también en otras ciudades, en la asociación de 'amigos del camino de Santiago'.

Mi camino

El trayecto que yo elegí, como les adelanté un poco, fue el más corto para conseguir la Compostela, es decir, el de cien kilómetros, pues lo haré a pie. Mi punto de partida, como ya dije, es la ciudad de Sarria. Haré la última parte del camino francés que consta comúnmente de cinco etapas, que son las siguientes.
Sarria-Portomarín
Portomarín-Palas de Rei
Palas de Rei-Arzúa
Arzúa-O Pedrouzo
O Pedrouzo-Santiago de Compostela

Qué llevar

Hay cosas que son imprescindibles para hacer el camino y otras que no tanto. Es muy importante recordar lo escencial que es viajar ligero o ligera, pues lo que llevemos en la mochila nos acompañará a lo largo de todos los kilómetros que caminemos. Lo que yo considero que no puede hacer falta en ninguna maleta es lo siguiente:

Zapatos cómodos: suficientemente resistentes y sobre todo que ya los hayan usado para trayectos largos y sepan que no les sacan ampollas ni les molestan en algún punto.

Calcetines sin costuras: las costuras suelen sacar ampollas por el roce y la fricción constante, así que es mejor conseguir calcetines o calcetas que no provoquen estos problemas.

Bloqueador, gorra y lentes de sol: recuerda que estarás directamente expuesto o expuesta al sol por largo rato, por lo que será indispensable que protejas tu piel.

Ropa cómoda: de preferencia que sea ligera y no sea mucha, porque entre más sea más tendrás que cargar. Yo traigo únicamente dos playeras, que estaré lavando todos los días en los albergues a los que llegue. Traeré puesta una mientras lavo y espero a que se seque la otra, y así me evitaré traer cargando peso de más.

Impermeable o chamarra que proteja de la lluvia: Galicia (donde inevitablemente tendrán que hacer aunque sea la última parte del recorrido) es una zona muy pero muy lluviosa, así que siempre hay que prever que en cualquier momento podría llover y hay que estar preparados y preparadas para eso. Hay que evitar las sombrillas, pues no resultará nada fácil cargar una sombrilla durante seis horas de recorrido si es que llueve.

Sandalias: simplemente para que puedas usar las regaderas en los albergues sin tocar directamente el suelo, pero también te servirán para descansar lo pies una vez que hayas llegado a tu destino o por si se te mojan los tenis.

Algún 'snack': como son muchísimas horas caminando, es bueno traer algo de comida durante el camino para que no te quedes sin energía. Me recomendaron barritas energéticas o semillas. Yo traigo un bolsa ligerísima de semillas de girasol y unas cuantas galletas.

Agua: no hay mucho que decir al respecto, ya sabemos la importancia de mantenerse hidratados e hidratadas siempre.

Hay quienes me recomendaron llevar  un bastón o dos bastones para recargar mi peso, especialmente en subidas y bajadas, y así evitar lastimar mis articulaciones. Me dijeron que no era totalmente necesario, así que yo intentaré hacerlo sin bastón, y, si llegara a necesitarlo, ya intentaré conseguir uno en algún pueblo por el que pase.

Otras cosas como jabón, shampoo o comida extra son un poco más prescindibles, pues si se olvidan se pueden conseguir en los pueblos que se vayan cruzando, aunque no está  de más si llevas esto contigo, siempre y cuando no signifique mucho peso para tu espalda.

 Estos son los aspectos que me parece importante considerar antes de hacer el camino. Así que si ustedes están planeando el suyo no se olviden de estos detalles y planeen todo lo que puedan con toda la anticipación. Nos vemos en la próxima entrada, y ¡buen camino!

---

Galería de fotos