¡Hola a todos, viajeros! En esta entrada vengo a hablaros de uno de los museos más importantes de Seúl: el memorial de Guerra de Corea.
El tema de la guerra de Corea es algo que había estudiado desde que iba al instituto, pero no fue hasta llegar a Seúl que realmente aprendí la importancia que ha tenido en marcar la historia del país. Uno de los museos más conocidos de la ciudad, e incluso del país, es el memorial de guerra de Corea. Así que, después de mes y medio estudiando en Seúl, decidí que era hora de ir a visitarlo.
El Memorial de Guerra de Corea se encuentra situado en el distrito de Yongsan-gu de Seúl. Es el memorial de guerra más grande del mundo, con una superficie de casi 117.000 metros cuadrados.
Se inauguró por primera vez en 1994, y su principal objetivo es el de dar a conocer la historia de Corea y las graves consecuencias que tuvo el enfrenamiento bélico para los dos países, tanto para Corea del Norte como para Corea del Sur. Esto es algo que transmiten muy bien en todo el espacio del museo y alrededores, en especial los monumentos de la entrada al memorial, de los que os hablaré ahora, o por lo menos esa es la sensación que me dio a mí, ya que hay muchos mensajes sobre paz y libertad en el museo.
Al recinto del memorial se puede acceder desde varios puntos, ya que es muy grande. Si entras por la parte de la derecha, lo primero que verás será una plaza llena de maquinaria militar, y lo que más llama la atención (por lo menos a mí) son los aviones que hay expuestos. Hay helicópteros, un superbombardero y semi submarinos, y lo cierto es que impresiona mucho verlos de cerca y a una escala tan real.
El museo está abierto desde las 9 de la mañana hasta las 6 de la tarde, y la entrada es gratuita así que no dudes el ir a visitarlo ni un momento. Si recorrerte el recinto entero, y con detenimiento, necesitarás alrededor de tres horas (puede que incluso más). Yo personalmente no pasé por todas y cada una de las salas de exhibiciones porque hay muchas y son enormes, y hay temáticas que no me parecían tan interesantes.
Los monumentos del exterior
Antes de entrar en el propio museo, te recomiendo que te detengas brevemente a admirar las distintas esculturas que hay en la plaza principal. Las que más me gustaron fueron el Monumento de Guerra de Corea, una gran estructura en forma de punta que se hizo en el año 2003 para conmemorar el 50 aniversario del fin del conflicto; y el monumento de los Hermanos, una escultura que representa el encuentro de dos hermanos durante el conflicto bélico, cada uno perteneciente a un bando. Este en particular me parecio muy emotivo y conmovedor.
También es importante mencionar el homenaje a los países participantes en la guerra. Justo antes de entrar al museo verás un montón de banderas de distintos países. Este es relativamente reciente, porque se estableció en 2015.
El museo
Dentro del museo encontrarás hasta 9 habitaciones con diferentes exposiciones. Hay tres exposiciones históricas (War History Room, Korea History Room I y Korea History Room II) que, como podéis deducir de los nombres, exhiben toda la historia de Corea, desde las civilizaciones y dinastías más antiguas hasta la guerra entre las dos Coreas y las consecuencias que ha tenido para ambos países. Son salas muy extensas y que explican todo detalladamente, así que tendrás que dedicarlas tiempo.
La sala que más me gustó de todo el museo es el vestíbulo de la Memoria, que se encuentra al fondo nada más entrar en el edificio. Esta sala es una auténtica obra de arte que simboliza el deseo de reunificación y pacificación de la península de Corea. Es realmente bonito, sobre todo el significado que hay detrás de la sala.
Por último, en la planta de arriba encontrarás una sala repleta de equipamiento militar, desde coches, armas, artillería, hasta tanques y cualquier otro objeto tecnológico (radios, teléfonos etc.) que se utilizaron durante el conflicto.
Definitivamente, el Museo del Memorial de Corea es algo digno de visitar. Incluso si no eres especialmente apasionado en historia, te recomiendo que vayas a verlo. Vas a aprender mucho sobre la guerra de Corea y sobre cómo ha marcado al país, y te va a ayudar a ganar una nueva perspectiva sobre el sitio donde ahora vives/ estudias. Y si aún así no te llama del todo la atención, ¡por lo menos ve para poder decir que has estado en el memorial de guerra más grande del mundo!