Mata Nacional do Vale de Canas

En el artículo anterior hablé de Paul Arzila un fantástico humedal con grandes vistas, además de poder observar una gran cantidad de aves pero existen dos lugares naturales dentro del término municipal de Coímbra únicos, uno es la Mata do Choupal en el que destacan los chopos que hay, y otro aunque no tan conocida es la Mata Nacional do Vale de Canas ("Parque forestal Nacional del Valle de Cañas" literalmente en castellano), normalmente se utiliza el nombre de mata para referirse a esos bosques o parques protegidos como es el caso de este Vale de Canas.

Cómo llegar

Dependerá de lo que queramos caminar, en su entrada hay un aparcamiento para coches y hay autobús de la ciudad que se comunica con las casas que hay a la entrada de Vale de Canas, son el número 16 y 16G, a excepción del domingo, el resto de días la conexión con autobús es correcta.

Como ya indiqué en el artículo de Paul de Arzila, estos trayectos en autobús son contados por lo que mirar bien el horario de autobús para no estar esperando demasiado y por otro lado, el precio es barato rondando el euro por viaje aunque deberemos comprar una tarjeta previamente.

También se puede ir caminando como yo hice, cualquier mapa como el de Google Maps puede indicar el camino, de Coímbra llegaremos hasta la freguesía de Tóvim que fue algún antiguo pueblo "comido" por Coímbra. De aquí habrá un camino para subir poco a poco hasta Vale de Canas, no pasan muchos coches y por el arcen se va bien aunque entre la ida y la vuelta se pueden hacer bastantes kilómetros.

Vale de Canas

Vale de Canas se encuentra ya en textos del siglo XVI nombrado como "Mata do Rei" ("Bosque del rey" en castellano), era un lugar que pertenecía a la corona portuguesa y estaba poblada por vegetación del lugar. 

Todo esto cambio en el siglo XIX, cuando fue adquirido por el propio estado portugués que quitó los pinos del lugar para llevarlo a la Mata Nacional do Choupal (del que ya hablaré) debido a unas inundaciones.

Se aprovechó entonces para plantar especies exóticas como el eucalipto pero también autóctonas bajo la supervisión de Manoel Afonso D'Esgueira y con la colaboración del Jardín Botánico de la Universidad de Coímbra (de la que también hablaré). En 1936 tuvo varias mejoras por el profesor Manuel Braga.

Pero por desgracia, en el verano de 2005 hubo un incendio que afectó a la primera parte de la mata nacional do Vale de Canas destruyendo gran parte de ella. Hubo una tarea de reflorestación que en 2014 cuando lo visité no había rastro del incendio.

Al llegar veremos el cartel de bienvenida al lugar, veremos un edificio que parece ser de promoción del lugar aunque lo encontré cerrado. Enseguida hay un cartel que nos indicará un trayecto a seguir, por mi experiencia final veo que no coincide demasiado con lo que debe de ser anterior al incendio de 2005, porque el camino es totalmente distinto.

Llegaremos en primer lugar a un pequeño jardín, el jardín es bonito pero lo cierto es que pasaría perfectamente por un parque urbano situado en una ciudad que de un jardín.

Tiene una gran cantidad de especies de plantas distintas y es bastante curioso de ver, al lado hay un pequeño balcón del que tendremos una vista de Vale de Canas.  A continuación, hay varios senderos y recomiendo ir por donde querais, pero yo voy a contar el mio.

Fui por la derecha y vi un sendero, hay algunos carteles contando la vegetación que hay y las especies más importante, un tipo de lagartija y otro de rana bastante especiales pero que no puede ver. También había un pozo y una pequeña fuente. Cerca de allí hay varios merenderos por lo que el lugar también sirve para ir un día típico de Pascua.

A continuación, hay otra parte mucho más sorprendente al otro lado de la carretera, aquí se encuentran varios eucaliptos y uno es el más grande de Portugal al medir 70 metros. Yo intenté buscarlo pero no los diferenciaba de otros, a la vuelta vi la foto del más grande pero una persona no experta no los sabe diferenciar.

También había dos o tres arboles gigantes como el que tengo en la foto de perfil, en la parte de los árboles es de esos lugares únicos ya que apenas vi dos o tres personas (y eso que me recorrí el Vale de Canas dos o tres veces) y era un lugar muy tranquilo entre la pequeña fuente para regar (la de la segunda imagen) y ver esos árboles delante de otro pequeño merendero. Un lugar único del que me faltan palabras para describir pero aunque esos árboles no sean los más grandes, son muy grandes y por ello merece la pena.

De paso, fui hasta la población de Torres de Mondego, un pequeño pueblo dentro del área municipal de Coimbra pero que se encuentra enclavado dentro de la montaña. Pasaremos Vale de Canas y cuando ya veamos unas cuantas viñas, estaremos en Torres de Mondego. El pueblo no debe llegar a los 1.000 habitantes, se ve bastante rápido y lo único destacable era su iglesia pero en Portugal al pintarlas todas blancas al final te parecen todas iguales.

A la vuelta fui por un camino distinto, parece que unas semanas antes hubo algún "Trail running" son competiciones que hacen en plena naturaleza básicamente de running, de correr, pero al acabarse se quedan señalado y sirven como otro camino más de senderista. Pude adentrarme por alguna otra parte pero en sí ya lo había visto todo.

A la vuelta, volví a pasar la carretera (aunque por un lugar distinto) y pude ver alguna parte que me había dejado de esa primera parte de Vale de Canas.

En general me ha encantado, al igual que muchos otros lugares de Portugal ganaría mucho con una mejor señalización de las cosas, pero el lugar es el que es y totalmente encantado.

En mi caso, me canso más al haber ido a pie pero se puede ver rápido en una hora aunque al contrario de Paul de Arzila yo recomiendo estar toda una mañana recorriendo sin prisa en lugar, lentamente en dos o tres horas y estoy seguro que te gustará más.

Cerca de allí no hay nada es la propia montaña pero si vamos en coche podemos ir a la propia Coímbra, o ya otras como Montemor-o-Velho, Penela o Lousa. Otros lugares de naturaleza son Paul de Arzila y Mata do Choupal en el término de Coímbra, y ya otros son la sierra de Buarcos en Figueira da Foz o las sendas marcadas al sur de Conímbriga y que poco a poco en futuros artículos iré explicando.