¡Hola a todos, viajeros! En esta entrada que estáis a punto de leer os voy a hablar de una librería muy peculiar de Venecia: Acqua Alta.
Si hay algo que me encanta de cuando visito una ciudad (sea la primera vez que voy o no), es perderme entre sus calles y encontrar rincones que te quedarías sin poder ver si sólo siguieses la ruta establecida por los mapas turísticos. Así es como encontré, casi por casualidad, la tienda de libros de Acqua Alta.
Sabía que esta librería existía porque una amiga mía, que había estado de viaje por Venecia durante su Interrail, me había enviado fotos de esta tienda. Buscando curiosidades en Google, descubrí que muchos sitios la listaban como una de las tiendas de libros más bonitas del mundo, y la verdad es que cuando la visité no me extrañó en absoluto.
La razón por la que la librería se llama Acqua Alta, según se podía ver en las fotos antiguas que adornaban la tienda, es porque ésta se encuentra a pleno pie de un canal veneciano. Por tanto, en el momento en que el nivel del agua sube lo más mínimo, la tienda se ve enteramente inundada. Es por ello que encontrarás en Acqua Alta algo que te llamará mucho la atención: todos los libros reposan dentro de barcas, bañeras, góndolas, o simplemente están situados a una altura del suelo. El dueño de la tienda tuvo que optar por este sistema para evitar que sus libros se mojaran y deterioraran.
Aún así, es cierto que los libros que venden en Acqua Alta no son los típicos libros best sellers, contemporáneos, como los que puedes encontrar en el Fnac. Más bien, se trata de todo lo contrario, pero yo creo que esto es parte del encanto de la librería. Todos los libros y cuadernos que se venden son más bien antiguos, tienen las páginas amarillas, y algunos están rotos. Obviamente, esto hace que sean muy baratos, y puedes hacerte con un libro por sólo 3 euros. La gran mayoría, como era de esperar, están en italiano, pero aún así es un bonito recuerdo para comprar y regalar, sobretodo porque resulta muy original... (¡no todos los souvenirs tienen por qué ser llaveros y bolitas de nieve!). Aunque si te gust más tirar por lo típico, en la parte de fuera de la tienda también venden un montón de imanes, postales, marcapáginas e incluso mapas de la ciudad.
El olor de la librería también es algo que me encanta de allí. Huele a humedad, pero no es desagradable, sino que te hace adentrarte todavía más en la atmósfera de Acqua Alta y le da un toque totalmente único. Hay libros por absolutamente todas las partes de la tienda, y a veces cuesta caminar por entre las estanterías porque los espacios son bastante estrechos (y si hay gente, ya es casi misión imposible). Aún así, te recomiendo que recorras todos los rinconcitos de la librería, que además no es tirando a pequeña, y dediques tiempo a admirar los libros que ofrece. ¡Puedes hasta comprar recopilaciones de partituras!
En la parte que está más adentrada en la librería encontrarás una especie de patio cerrado en el que delante de la pared de ladrillo que lo separa del canal hay una enorme pila de libros, unos encima de otros, que están pegados para hacer las veces de escalera. Así que puedes subir los peldaños de esta (que son libros enormes, y muy antiguos) para asomarte por encima de la pared y admirar las vistas del canal. Llama mucho la atención, y es un sitio con mucha magia. Aparte de asomarte por este patio, también hay una pequeña terracita con un par de butacas-sofás donde puedes sentarte a leer o a admirar el paisaje del canal (eso sí, los sofás no pueden ser más viejos...).
La librería está en un punto muy céntrico de la ciudad, concretamente en la calle Longa Santa María Formosa, así que no tienes excusa para no ir, aunque sea, a asomarte. Es una tienda realmente original, y te aseguro que no habrás visto nada que se le parezca antes. Tanto si eres un apasionado de la lectura como si no, Acqua Alta no te decepcionará lo más mínimo.
