Guía básica de la comida mexicana. Cinco platillos
Guía básica de la comida mexicana. Cinco platillos
En la entrada anterior les hice una especie de introducción a lo que es la comida mexicana y a dos de sus aspectos primordiales: la tortilla y la salsa. Es muy importante que sepan sobre eso antes de saber sobre cualquier platillo, pues realmente son la base de nuestra alimentación.
A continuación encontrarán una lista de los platillos mexicanos más típicos y más destacados de toda la incalculable variedad con la que contamos. Cada ciudad, cada pueblo y cada estado pueden tener sus maneras especiales de elaborarlos, pero en general puedo garantizarles que los siguientes platillos los pueden encontrar en cualquier rincón de mi México lindo y querido.
Aquí tienen:
Quesadillas
Este es uno de los platillos más sencillos pero también más ricos, más económicos y más fáciles de encontrar. Aunque hay una cierta polémica sobre su constitución y su esencia, yo les diré lo que la mayoría del país entiende por “quesadilla”, y si alguien les dice lo contrario es porque son chilangos o chilangas (de la capital) o de algún lugar cercano a la Ciudad de México.
Así pues, las quesadillas, para quienes somos de provincia, son lo siguiente: una tortilla rellena de queso y doblada a la mitad, es decir, en forma de medio círculo o media luna. Así de sencillo. Esta es la quesadilla básica, pero no la única que existe. La quesadilla puede estar rellena de cualquier cosa que acompañe al queso. Las más comunes son las rellenas de carne (bistec, chorizo, pollo, etcétera), de papa, de champiñones, de flor de calabaza, y de tantos tantos otros guisados típicos mexicanos.
La quesadilla, a pesar de ser algo tan sencillo, tiene muchísimas presentaciones, pues no solo depende de lo que esté rellena, sino también del tipo de tortilla del que esté hecha (hay de tortilla de harina y de maíz, ambas son muy ricas) o de si está frita o es de comal. Esta expresión “de comal” es importante que la entiendan si van a viajar a México y a comer comida típica, pues significa que el alimento no va frito, sino que se calienta directamente en el comal (recipiente o plancha donde se cuecen los alimentos). Así, si alguna vez les preguntan si su quesadilla será frita o de comal, ustedes tendrán que pensar si la quieren con o sin aceite.
La fotografía que sigue es de una quesadilla hecha con tortilla de harina.
Las quesadillas son uno de los platos más más tradicionales del país. Las encontrarán en cualquier lugar y siempre podrán pedirlas con rellenos diferentes o sin ningún relleno (la quesadilla sencilla en la mayoría del país se entiende como simplemente la tortilla rellena de queso), de harina o de maíz, fritas o de comal. Como sea que la pidan, les encantará y seguramente se quedarán con ganas de probarlas en sus diferentes versiones. Las ventajas de las quesadillas es que son muy fáciles de elaborar y por eso mismo también suelen ser muy económicas, dependiendo, claro, del lugar donde las compren.
Es tan fácil de hacer, que incluso ustedes podrían probar hacer una en casa. Si quieren saber cómo preparar quesadillas de champiñones, den click aquí para ver la receta que hace tiempo compartí.
Las quesadillas que son fritas suelen ir acompañadas de lechuga crema y queso. Los mexicanos y mexicanas generalmente añaden a las quesadillas de cualquier presentación salsa de la que tengan en el lugar donde se está comiendo y a veces incluso limón. Ponerle o no salsa y ponerle o no limón ya es decisión de cada quién.
Chilaquiles
*Alerta de picante inevitable*
Este es uno de los desayunos típicos mexicanos, que probablemente pueda resultar algo pesado para quien no esté acostumbrado o acostumbrada a comer tanto para el desayuno, así que si no se sienten preparados o preparadas para desayunar chilaquiles, pueden probarlos en el almuerzo o incluso en la comida.
¿Conocen los totopos? Probablemente no. ¿Conocen los nachos? Están hechos con triangulitos de tortilla (de maíz) fritos. Pues los chilaquiles son, ni más ni menos, totopos bañados en salsa, que puede ser roja o verde, y que generalmente van acompañados de cebolla, crema y queso y pueden también llevar pollo, arrachera, huevo, frijoles, entre muchas otras cosas.
Yo no soy muy fan de los chilaquiles por la cuestión del picante, pero sí admito que es uno de los platillos mexicanos que no pueden dejar de probarse, a menos claro, que tengan tanta dificultad para comer picante como yo; en ese caso, les recomiendo que no se arriesguen tanto, pero si tienen oportunidad de comer no todo un plato, pero al menos una pequeña prueba, no la dejen ir.
Enchiladas
*Alerta de picante inevitable*
Este, junto con las quesadillas y los tacos, yo diría que son los tres platillos más populares a nivel nacional. No hay lugar del país donde no encuentren enchiladas, y algo que tiene este platillo en particular es que en cada lugar lo preparan diferentes, por lo que podrán encontrarse con nombres como “enchiladas suizas” (estas las encuentran en todo el país), “enchiladas mineras” (típicas del estado de Guanajuato), “enchiladas potosinas” (del estado de San Luis Potosí), “enchiladas morelianas” (típicas de mi estado Michoacán), entre otros.
Me atrevería a decir que cada estado tiene su propia forma de preparar las enchiladas, por lo que me parece mejor hablarles aquí solo de las que encontrarán en todo el país, las enchiladas suizas. Como podrán deducir del nombre de “enchiladas”, contienen chile, pero no son necesariamente picosas. Hay enchiladas como las “rojas”, que también pueden encontrar en todo el país, que están hechas con salsa roja y sí son picosas para quienes no suelen consumir picante. Sin embargo, las enchiladas suizas no pican. Son tortillas enrolladas que pueden estar rellenas de pollo o de queso y que están bañadas en salsa de tomate (ojo, tomate y jitomate son cosas muy diferentes en México) y acompañadas de queso y crema. Ahora, para la diferencia entre tomate y jitomate, este último es la frutita roja que se usa por ejemplo para la salsa de la pizza, que en inglés se llama “tomato”. El tomate, por su parte, es similar en aspecto al jitomate, pero es verde y tiene un sabor bastante diferente. Las enchiladas suizas están hechas con tomate, y a veces también con algún chile para dar sabor, pero en general nunca son picosas, por lo que es un platillo que cualquier persona puede, y debe, probar. La siguiente imagen es de enchiladas suizas rellenas de pollo.
Para los vegetarianos, cuando pidan sus enchiladas, pregunten primero de qué están rellenas, y si les dicen que de pollo, siempre existe la opción de sustituir el pollo por queso, o incluso por papa o alguna otra cosa que no sea carne.
Pambazos
*Alerta de picante inevitable*
Los pambazos no son de los platillos más comunes, no se encuentran en todos lados como los anteriores de los que les he hablado, pero de todas maneras hay muchos lugares donde venden comida típica y no faltan los pambazos, que son la comida preferida de muchos y muchas.
¿Saben lo que es una torta en México? Sé que en otros países de habla española suelen decirle torta a lo que nosotros llamamos pastel, que para entendernos más fácil es lo que en inglés se llama “cake”. En México, por el contrario, la torta no es un postre, sino la versión mexicana de la baguette francesa o el panino italiano. Imaginen una baguette, pero con el pan más ancho y menos largo, y tendrán una torta mexicana. Es un platillo muy barato y muy común, aunque no necesariamente saludable, pues contiene muchísimas calorías.
El pambazo es prácticamente una torta mexicana bañada en la salsa roja con la que se preparan las enchiladas rojas. El relleno puede ser cualquier cosa, carnívoro o vegetariano, y casi siempre incluye lechuga, crema y queso, el típico acompañamiento mexicano. Este platillo sí es picante, así que quienes no soporten el picante tendrán que contentarse con probar una torta, pero realmente la salsa del pambazo le da un sabor muy distinto y además da otra consistencia al pan.
Tostadas
El último platillo del que les hablaré en esta entrada son las tostadas, que son algo muy diferente de lo que en España recibe este nombre. La tostada en México es una tortilla frita, por lo que queda totalmente dura y, al contrario de la tortilla, la tostada no es maleable y no se puede doblar, solo romper. Las tostadas son una base encima de la cual se puede poner cualquier guisado. Los guisados más comunes para las tostadas son la papa, las rajas, la tinga, las manitas de puerco, ceviche (mariscos) y muchos otros guisados tradicionales. Para que sepan exactamente qué lleva un guisado, lo mejor es que pregunten al mesero o mesera que los atienda, pues no quiero cansarlos ahorita explicándoles cada ingrediente de toda la variedad de guisados que tenemos. La tostada, como otros de los platillos que les he comentado, va acompañada de lechuga, crema y queso encima del guisado seleccionado.
Las tostadas suelen ser pequeñas, del mismo tamaño que el de una tortilla estándar, por lo que para llenarse una persona se suelen pedir dos o incluso tres tostadas. Sin embargo, hay lugares donde preparan tostadas sumamente grandes, así que infórmense del tamaño antes de elegir la cantidad, pues se pueden sorprender. Para comerlas se suelen utilizar las manos, pero siempre tengan una cuchara o tenedor cerca, pues como son pequeñas montañas de comida encima de la tostada, muchas veces se caen partes de esa montañita y es más fácil reincorporarlo, o comerlo directamente, con los cubiertos.
Esto fue todo por esta entrada, pero estén al pendiente de la siguiente donde les seguiré compartiendo algunos platillos mexicanos deliciosos y que no se puede perder nadie que venga a México.
Si quieren tener acceso a todas las entradas de esta guía, es muy fácil, pues solo deben dar click a los links que les dejo a continuación.
Guía básica de la comida mexicana. Preliminares.
Guía básica de la comida mexicana. Otros cinco platillos.
Guía básica de la comida mexicana. Otros seis platillos.
Guía básica de la comida mexicana. Cuatro platillos más.
Guía básica de la comida mexicana. Los últimos tres platillos.
¡Gracias por su atención y hasta la próxima!
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