Mis amigos y yo lo sabemos. Es como un pacto no sellado entre nosotros. Sabemos que la playa es nuestro sitio. Estar en la playa cura los corazones rotos. No puedo contar las veces que he faltado a clase para ir a la playa. Bueno, en realidad sí que puedo. Fue solo una. Simplemente quería quedar bien, pero en realidad soy una estudiante responsable. Lo que quería decir es que la playa es nuestro hogar. Malasia tiene unas de las mejoras playas en todo el mundo y creo que ya era hora de hablar de ellas y de algunas experiencias que he vivido en dichas playas. No sé porque no he hablado de este viaje en el blog, ya que es una de las mejores experiencias que he vivido jamás.
Así que voy a hablar de una de las experiencias más maravillosas e increíbles que he vivido en la isla Pangkor. He pasado tantas experiencias maravillosas en las playas del complejo turístico de la isla. Hablaremos de los detalles en un momento, así que espero que puedas lo increíble que es este complejo turístico. Pangkor es una pequeña isla muy subdesarrollada. Si quieres saber más de islas más grandes y desarrolladas deberías buscar información acerca de Langkawi o de Penang, de las cuales hablaré más adelante en futuras entradas de mi blog.
(La playa del complejo turístico de la isla de Pangkor)
Cómo llegar
En avión (No recomendado):
Como he dicho antes, Pangkor es una isla muy pequeña. Lo que quiere decir que no tiene aeropuerto y obviamente no puedes volar hasta ella. Aunque es posible coger un vuelo a Ipoh, ir a Lumut desde ahí y después coger un ferry hasta Pangkor. Aunque es un poco molesto porque tendrías que ir a Lumut desde Ipoh.
En tren (tampoco lo recomiendo):
Básicamente, da igual el medio de transporte en el que vayas, tendrás que ir hasta Lumut y de ahí coger el ferri hasta Pangkor. Puedes coger un tren a “Batu Gajah” y de ahí ir en taxi hasta Lumut. No sé cuando puede costar el taxi, pero se sabe que los taxis no son muy baratos en Malasia.
En autobús (Recomendado):
Mi alternativa es ir en autobús. Es el método más barato y fácil para llegar a Lumut directamente desde Kuala Lumpur. Es como yo suelo ir desde Kuala Lumpur. Es bastante práctico ya que vas directo a Lumut. El viaje de ferri tarda unos 45 minutos de Lumut a la isla Pangkor. El billete cuesta unos 10 ringgits para un adulto y el horario del ferry es desde 7:00 h hasta las 20:30 h. El trayecto es muy interesante, aunque el ferry puede bastante lento algunas veces.
(El trayecto en ferry)
Descripción y experiencias:
Vale, aquí es donde se empieza. Tras un viaje de 45 minutos muy tranquilo en ferry llegamos a Pangkor. Aun así el ferry no iba tan lento. La cosa era que el viaje era un poco espontáneo y no habíamos reservado en ningún hotel. Doy por seguro que vosotros no cometeréis el mismo error, aunque al final no tuvimos ningún problema. Nos fue mejor incluso. La estancia en la isla fue una experiencia fantástica. Estoy dándole vueltas al viaje, a ver si encuentro algo que no me gustase de él para ser imparcial, pero no encuentro nada.
Visitamos un puñado de hoteles que eran muy baratos y no muy buenos cuando en realidad queríamos hospedarnos en un sitio de calidad. Así que le preguntamos al conductor de taxi que nos había traído desde el ferry y nos llevó al complejo turístico más caro y con más calidad de toda la isla; al Pangkor Island Beach Resort. La vista era tan increíble que no se puede describir. Era tan bella que no me salen las palabras. La única manera de saber como era la vista era estar allí y experimentarla de primera mano.
Por desgracia, en estos sitios no te dejan darte una vuelta por el lugar para ver si te gusta el ambiente y quieres quedarte si no tienes reserva. He visto este tipo de comportamiento en uno de los hoteles de Port Dickinson. No había nada parecido a un complejo turístico playero. Nos dimos una vuelta, estuvimos en la playa y al volver reservamos una habitación. Escogimos una habitación para cuatro, que básicamente tenía dos camas de matrimonio aunque solo eramos tres. Y encima, como era fin de semana tuvimos que pagar unos 75 ringgits extra por persona. Fue un poco molesto pero no nos importó. La reserva incluía un desayuno tipo bufé y una cena también de estilo bufé. Tenía un montón de ganas de comer mucho. Es comida, siempre tengo ganas de ella. No me acuerdo del precio exacto de la habitación por noche pero creo que rondaba los 900 ringgits, aunque fue hace dos años y no sé si las tasas han cambiado respecto a hoy en día. Si reservas online hay promociones y rebajas, así que merece la pena echar un ojo.
Nos instalamos en una habitación con vistas al jardín, porque una habitación con vistas al océano era demasiado cara. Después de instalarnos fuimos a la piscina, desde la que se tenía una vista increíble del océano desde un lado. En el otro lado estaba la barra del bar. No hay nada mejor que tomarse una copa mientras te das un baño, incluso si esa copa es un té helado y no un coctel. Puedes ver las vistas y juzgar por ti mismo. En relación a la higiene, la piscina estaba súper limpia. Me cercioré mucho. La piscina era espectacular, es todo lo que puedo decir.
Ahora toca hablar de la playa, la que era increíble y majestuosa. Como he dicho, la vista era lo mejor. Las tumbonas eras perfectas para tumbarse y tomar el sol. Cada vez que recuerdo lo tranquila estaba en esta playa, me entran ganas de volver. Visité un montón de playas diferentes en la isla, pero la que más me gusta es la playa del hotel. Es más privada y más apartada, además de que puedes pedirte bebidas en el bar de la piscina y te lo traen a la playa mientras tomas el sol. Es un puntazo. Si no te alojas en el complejo turístico hay un par de playas a las que puedes ir. Entre las más famosas está la playa de “Pantai Pasir Bogak”. Puedes buscar como ir en Google Maps.
(Las vistas de la playa)
El agua de la playas de Pangkor no está tan limpia como las de las islas como Redang, pero el agua está más limpia que la de Cherating en Kuantan, que está bastante turbia. Sé que son muchas playas y muchos nombres de islas, pero prometo que hablaré de todas ellas más tarde.
Algunos de los deportes acuáticos que puedes practicar en esta playa y en la playa de “Pantai Pasir Bogak” son montar en barco y hacer Jet Ski Aunque nuestro hotel supuestamente tenía equipamiento para practicar esas actividades, nunca vi a nadie practicarlas los dos días que estuve. No hay muchas más actividades que hacer, aunque puedes alquilar una motocicleta por poco y darte una vuelta por la isla. También hay bicicletas para alquilar. En el complejo turístico de la isla de Pangkor también hay una pequeña sala para los niños, en los que puedes hacer actividades. Eso es todo, en relación a qué hacer.
(El complejo)
Hablemos de cosas más importantes. Como todos sabéis para mi lo más importante es la comida. Y sin duda, la comida era increíble. Mi boca se está haciendo agua ahora mismo. Como he dicho antes, teníamos bufé tanto para desayunar como para cenar. El bufé para cenar era uno de los mejores bufes en los que he estado. Empezaba bastante pronto, como a las 7:30 p. m. - 8:00 p. m. Al entrar a la sala te rodeará el olor de la comida que te espera.
Había mucha variedad, era increíble. Yo siempre digo que no soy muy fan de comer filete. Sin embargo estaba tan bueno que comí filete hasta explotar. También me gustó mucho la pasta ya que podías elegir los ingredientes que quisieses y te la preparaban a tu gusto. Y por supuesto, los filetes estaban espectaculares. La gran mayoría de la comida era internacional, aunque también había un poco de comida tradicional malaya. La zona de postres no era para tanto y el helado no sabía bien. Pero literalmente era lo único a lo que se le podía poner pegas. Todo lo demás estaba muy bien.
En relación al bufé que había para desayunar, también puedo decir que todo estaba genial. La variedad y la calidad era muy buena; estaba al nivel de un hotel de 5 estrellas. Doy por sentado que habéis estado en bufés para desayunar, así que voy a explicar los detalles. Solo quiero decir que todo estaba muy bueno.
Me pasé casi todo el segundo día en la playa, tomando el sol y leyendo. Es lo que más me gusta hacer. Después me pegue un baño en el mar y cuando intente dejar mis gafas de sol en una piedra que estaba bastante afilada, me resbalé y me hice daño en la mano. Quitando eso, el baño estuvo genial. Cuando volví a la habitación para preparar mi maleta podía sentir que no quería irme. Este lugar es como el paraíso.
Espero que os haya gustado mi artículo. ¡Hacedme saber vuestras opiniones en la sección de comentarios, por favor!
¡Hasta la próxima!