El centro turístico Avani de la costa de oro, Sepang

Avani es y siempre será uno de mis hoteles favoritos en toda Malasia. La sensación de estar flotando en el agua añadida a la serenidad y la tranquilidad del lugar y a las grandes facilidades proporcionadas, es simplemente maravilloso. Yo diría que es un hotel que se merece cinco estrellas, excluyendo algunos detalles sin importancia a los que llegaré a lo largo del artículo.

Cómo llegar:

Sepang es una pequeña ciudad situada cerca del aeropuerto internacional de Kuala Lumpur (KLIA). Así que si acabas de llegar a Kuala Lumpur y Sepang es tu destino, es mucho más fácil ir allí desde el aeropuerto. En mi caso, yo ya estaba en Kuala Lumpur, así que mi familia y yo decidimos reservar un viaje, desde la aplicación “Grab” que mencioné en el post anterior. Pagamos unos 120 ringgits (moneda malaya) por el viaje, lo que era una tarifa justa. Se tarda una hora en llegar allí con un taxi o un coche.

(El complejo turístico cuando estábamos entrando desde la entrada)

(La playa junto al complejo turístico)

Descripción y experiencia:

Tan pronto como llegamos, fuimos recibidos por el personal. Eran todos muy amables y nos ayudaron a registrarnos. Reservé una suite familiar, que era básicamente dos habitaciones contiguas con dos camas individuales, una cama doble y dos baños separados. Utilicé "Groupon Malaysia" para reservarla porque tenían una gran promoción y ahorramos mucho dinero gracias a ello. Yo diría que Avani no es un resort barato, las habitaciones puedes llegar a costar hasta 1000 ringgits por noche durante la temporada alta, pero el resort ofrece muchas promociones, así que recomiendo que lo planeéis con anticipación y reviséis la página web regularmente para cualquier descuento.

Nuestra habitación era simplemente magnífica. Mi estancia favorita era el balcón, donde podía relajarme con un buen libro de Paulo Coelho mientras escuchaba el sonido de las olas rompiendo en la orilla. Aunque tengo que admitir que no había muchas olas, el mar estaba más tranquilo que nunca. Durante el día el nivel del mar estaba muy bajo, pero a medida que llegaba la noche, el nivel del agua subía mucho y era paradisíaco.

(Mi lugar favorito, el balcón)

Nos instalamos en la habitación y luego salimos a descubrir la piscina. Lo primero que debes hacer es coger una de las bicicletas que el resort provee porque el sitio es muy grande, así que es más fácil y divertido desplazarse en bici, por supuesto.

(Camino que conduce a las habitaciones)

La piscina estaba muy limpia y tenía una vista infinita, como si pudieras perderte en la vista. Mira las fotos que dejo a continuación y juzga por ti mismo. Y el gimnasio, oh el gimnasio era fabuloso. ¿Quién no querría correr en una cinta de correr con vistas al océano? De repente me convertí en un deportista allí.

(vista de la piscina)

(vista de la piscina desde el lado)

(La vista de la playa)

Debo decir que el complejo es más bien un lugar de vacaciones familiares. Es silencioso y bastante vacío. Además, tampoco se ve a tanta gente en la playa. Sepang es también muy pequeño, así que no hay muchas actividades en las que puedas participar. La mayoría de la gente que conocí allí también eran familias. Durante mi estancia de tres días no vi ninguna actividad nocturna por allí, aunque si tienes coche puedes conducir para encontrar un pub o algo así.

(Más fotos del complejo turístico)

(Advertencia: Todas las fotos que se encuentran en este artículo fueron hechas por mí mismo)

Qué comer:

Sí, la comida, la parte más importante de todas las vacaciones. ¿Recuerdas cuando dije que esta era una estancia de casi cinco estrellas? Vale, el casi lo puse por la comida. El complejo turístico tenía un gran restaurante. Una noche fuimos al buffet a cenar, ya que venía con la reserva, pues si hubiese sido por mi, no hubiéramos ido. No me malinterpretéis, no digo que la comida fuera de baja calidad, nada de eso. Es sólo que personalmente no me gustaba nada, pero al final del día es sólo mi opinión y a otras personas les puede gustar. Si no quieres comer en el resort, hay unos 2 ó 3 pequeños mamak de playa (restaurantes tradicionales malayos) por ahí, así que puedes ir a comer a uno de ellos. Nosotros probamos un par de comidas diferentes allí y estaban todas muy buenas, así que sí, no te morirás de hambre, eso seguro. No os preocupéis por eso.

¡En general, la pasé muy bien en este hotel!

Espero que hayáis disfrutado de este artículo.

Saludos.