¡Hola a todos, viajeros! En la entrada de hoy voy a escribir sobre una pizzería monísima en la que comimos mi amiga y yo ayer.
Mi amiga Elena había pasado por esta pizzería prácticamente todos los días para llegar a la universidad, pero nunca había llegado a pasar, y como estábamos buscando un sitio barato donde comer, optamos por entrar ahí.
La Pizzería Nordic está situada muy céntrica, en la calle Gothersgade, haciendo esquina con la calle Nørre Farimagsgade. Es un establecimiento chiquitito, y puede que te pase desapercibido porque la entrada está un poco subterránea, y tendrás que bajar unas escaleras para entrar. En cuanto cruzas la puerta, te inunda un increíble olor a pizza recién hecha, y te llamará la atención que hasta la radio está en italiano.
El señor que nos atendió, quien tenía pinta de ser el dueño del restaurante, era súper simpático, e italiano, así que desde el primer momento supimos que el sitio iba a ser bueno y, sobre todo, muy auténtico.
Pizzería Nordic tiene una decoración muy mona, pero nada extravagante. Es muy colorida, y el menú me pareció súper cuco porque estaba escrito con rotuladores de colores en una pared toda negra, y aunque estaba en danés, el dueño no tuvo problema en traducírnoslo. Era realmente encantador. Incluso estuvo enumerándome durante un buen rato todas las pizzas vegetarianas que tenía (¡y me alegró mucho saber que tenía tantísimas opciones!).
Nos pedimos dos pizzas, una para cada una, y he de decir que es una de las mejores pizzas que he probado nunca, y sin exagerar al respecto. La masa estaba finita y muy crujiente, como a mí me gusta, y se notaba que los ingredientes eran de muy buena calidad. La de mi amiga era de cuatro quesos y, aunque ni siquiera estaba como una de en el menú, el dueño de Pizzería Nordic la preparó encantado. Cada pizza fueron entre 59 y 65 coronas danesas, y todo estaba riquísimo así que el precio está muy acorde a lo que pides (yo diría incluso que es barato, y más teniendo en cuenta que estamos en Copenhague). Aparte, yo me pedí un chai latte que también estaba súper bueno, por 30 coronas, e incluso tenían tiramisú hecho por ellos en tarritos de cristal, para tomar de postre.
El ambiente del restaurante era súper tranquilo, pero a la vez muy animado porque la música era muy marchosa y el sitio tiene un rollo genial. Lo único malo es que es bastante pequeño, así que si vas a comer o cenar un día en el que haya bastante gente igual lo tienes complicado para encontrar una mesa, en especial si sois muchos... Aún así, te recomiendo que pruebes suerte en la Pizzería Nordic porque te aseguro que saldrás super satisfecho con todo.
