En la parte norte de la ciudad vieja, cerca del museo Municipal, aun se aprecia un lienzo de muralla y una torre cilíndrica de cuidada factura, salvada de la destrucción por haber quedado en el interior de un centro religioso, hasta edades relativamente próximas.
Pero donde mejor se aprecia el poderío de la ciudad es en el Pretorio. Este conjunto se halla en los aledaños del viejo ayuntamiento, bajo las edificaciones modernas. Es visitable. Al lado de la entrada hay un acceso a la vieja red de cloacas del saneamiento urbano y un aula en la que se exponen diversas piezas originales de la época romana: cerámica, elementos epigráficos, etc. Una maqueta nos permite ver una reconstrucción de la zona en los días del imperio romano.
Al lado se pueden ver los magníficos restos de aquellas viejas edificaciones que hace cerca de dos mil años dieron lustre a esta urbe.