Gugelhupf

En mi país hay varios platos que forman parte de la comida típica de allí y la mayoría de ellos son postres. Algunos se pueden hacer muy rápido y otros llevan más de un día de preparación. Uno de los postres típicos de mi país que se puede preparar en una hora (y eso no quiere decir que no esté buenísimo) se llama gugelhupf. Se usa mucho en las bodas, así que si conocéis a alguien que se vaya a casar, podéis hacerle este postre, os aseguro que le encantará. Aquí os dejo la receta de mi abuela, que ya sabéis que cocina genial.

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Así es un gugelhupf típico.

Ingredientes

  • 300 gramos de harina común
  • 125 mililitros de leche desnatada
  • 3 huevos grandes
  • 100 mililitros de aceite de canola (también podéis usar aceite de girasol)
  • 200 gramos de azúcar (también podéis usar azúcar moreno si queréis)
  • 2 cucharadas grandes de cacao en polvo
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 1 cucharadita de levadura en polvo
  • 1 cucharada grande de ron

También necesitaréis un molde redondo para que el gugelhupf tenga la forma de la foto.

Preparación

El primer paso para hacer gugelhupf es precalentar el horno a 200 grados Celsius. Después, coged un bol mediano y mezclad huevos, azúcar y extracto de vainilla. Podéis utilizar una batidora eléctrica, es mucho más rápido y fácil. Batidlo todo hasta que la masa esté espesa.

Añadid la leche, el aceite de canola (o de girasol) y el ron. Mezcladlo todo muy bien y añadid la harina. No os olvidéis de añadir la levadura en polvo. Una vez se me olvidó y tuve que tirar el gugelhupf porque estaba duro como una piedra y no se podía comer.

Posdata: probad la masa de gugelhupf, está deliciosa. Pero no comed mucho u os dolerá la barriga, hablo desde mi propia experiencia.

El siguiente paso es llenar el molde con aceite de canola y harina. Esto evitará que el gugelhupf se pegue al molde. Os pido por favor que os aseguréis de que se cubren todos los rinconcitos del molde con aceite y harina. De lo contrario, será imposible sacar el gugelhupf del molde cuando esté listo.

Coged otro bol y echad un tercio de la masa de gugelhupf en él. Poned los otros dos tercios de la masa en el molde. Añadid el cacao en polvo y dos chucharadas grandes de leche en la masa que habéis echado al bol y mezcladlo todo. Esto hará que la masa esté menos densa y podrá "flotar" en ella para que así se le marque esa típica línea negra en medio que se puede ver cuando cortas el gugelhupf.

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Lo divertido de hacer gugelhupf es que la línea de en medio nunca sale igual.

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Este gugelhupf tiene una forma diferente al de antes. Cuanto más lo horneas, más fácil es hacerse una idea de la cantidad de leche y cacao en polvo que hay que utilizar para que la línea oscura de en medio sea diferente.

Meted el molde con la masa en el horno y horneadlo durante quince minutos. Si no sabéis si el gugelhupf se ha horneado bien o no, pinchadlo con un palillo en medio. Si al quitar el palillo, no está manchado de masa, el está listo para comer.

Poned boca abajo el molde en un plato grande y dejadlo enfriar durante media hora. Después, quitad el molde. Si lo habéis hecho bien, el gugelhupf tiene que salir del molde fácilmente. Si no sale, usad un cuchillo e id metiéndolo por los lados del molde. Esto hará que el gugelhupf se vaya despegando y pueda salir.

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Con esta foto parece que sacar el gugelhupf del molde está chupado.

Conservación y consejos de presentación

Sin duda, la parte más difícil de hacer gugelhupf es sacarlo del molde. Varias veces me pasó que por no repartir bien el aceite de canola y la harina por el molde, el gugelhupf se partió en dos cuando intentaba sacarlo. Sigue estando igual de bueno pero tiene un aspecto horrible.

Para que esté aun mejor, podéis echar azúcar en polvo por encima del gugelhupf antes de cortarlo. Para mí no hace falta echarle azúcar por encima, ya que está lo sificientemente dulce, pero estoy de acuerdo en que tiene mucho mejor aspecto con esa capa de polvo blanco.

En cuanto a la conservación, gugelhupf es uno de los postres que no hay que tardar en comérselo una vez hecho, porque se endurece muy rápido. Para que se conserve lo mejor posible como si estuviera recién hecho, enrolladlo en papel de aluminio, esto lo mantendrá en buen estado una semana como mucho. Si véis que el gugelhupf se endurece enseguida, metedlo en el microondas junto con un vaso de agua y dejadlo treinta segundos, esto hará que se reblandezca.


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