Arroz turco

Estaba pensando en platos de comida interesantes que pudiera hacer y para que algunos pudierais experimentar. Entiendo que viajar y escribir sobre ello es divertido, pero a mi, si leo un blog, me gustaría encontrar algo que pueda probar. Estaba pensando en dar unos consejos de cocina, que pudieran ser útiles, tanto de la cocina turca como de la asiática y rumana.

Tengo que admitir que hace solo un año que empecé a cocinar, cuando me mudé a Turquía. Está fatal que no aprendas a cocinar hasta los 26 años, pero criarse con una madre moderna que siempre ha preferido las recetas sencillas y la comida congelada era bastante relajante y cómodo. Nunca intenté prestar atención cuando cocinaba, ni siquiera me interesaba.

Las cosas cambiaron cuando me mudé con mi novio: me di cuenta de que la comida casera puede ser útil y ahorrarnos dinero (comer fuera todos los días es algo complicado), así que decidí aprender a cocinar. Compré dos libros de recetas internacionales en rumano, y empecé a practicar.

Cuando estuvimos en Portugal, mi marido Muhammet era el que siempre cocinaba, y solo hacía 4 o 5 recetas de comida turca (aunque están riquísimas), así que me pegué a él y aprendí algunos trucos. Prefiero la comida asiáticamuchísimo más, es mi favorita de lejos, y estoy abierta a nuevas ideas culinarias, siempre y cuando lleven pollo o pescado. Sí, solo como de eso.

Supongo que para aprender a cocinar recetas turcas tienes que empezar por lo básico, que es el arroz normal. Es muy importante saber cocinar este tipo de arroz y, creedme, tendréis que intentarlo unas cuantas veces para pillarle el tranquillo.

En Turquía le ponen arroz a absolutamente todo, es imprescindible, como la pasta para los italianos y las patatas fritas para los estadounidenses. Tiene influencia asiática, igual que toda la cocina turca, pero también podéis encontrar trazas de la cocina griega y árabe, todas mezcladas en un ambiente y unos sabores perfectos.

Por ejemplo, Turquía tiene una cocina diferente en cada región: la del mar Negro, la de Anatolia, la de Estambul, Bursa e Izmir y, por supuesto, la región del sudeste.

Intentaré compartir con vosotros algunos consejos que me enseñó Muhammet y que aplico a diario cuando cocino. ¡Empecemos con el arroz turco!

Cocinando el arroz perfecto

Ingredientes:

• Arroz thai (el arroz largo), digamos que unos 300 g para dos personas.
• 50 gramos de mantequilla o 2 cucharadas de aceite (si no te queda mantequilla).
• Sal
• Pastillas de caldo de pollo (media o un cuarto, dependiendo de la cantidad de arroz que hagas).
• Agua.

Normalmente, los turcos se comen este arroz con judías. Sí, habéis oído bien. Quiero decir, en mi cultura, y supongo que en toda la de Europa, nunca he visto que la gente coma arroz con judías, porque las dos cosas tienen un montón de calorías y cuesta digerirlas, pero los turcos lo comen, y yo por tanto también.

Me gusta bastante, así que deberíais probarlo.

Primer paso:

• Calienta una sartén durante 30 segundos y echa la mantequilla o el aceite.

Mientras que la mantequilla se derrite, pon a hervir un poco de agua, unos 400 ml, por si acaso.

Lava muy bien el arroz con agua fría, al menos durante dos minutos. Hazlo con las manos. Si no lo haces, se quedará pegajoso, y no queremos un arroz que se pegue a cachos.

• Una vez se ha derretido la mantequilla y el arroz está bien lavado y no le queda nada de agua, mételo en la sartén para que se pueda freír un poco con la mantequilla. Remuévelo constantemente, o se te pegará a la sartén.

  Hazlo durante unos 5 minutos, y ya debería estar bien. Es lo que me dice Muhammet y, confiad en mi, se nota. Cuando veas que no se pega, ya estará listo.

• Echa el agua hirviendo sobre el arroz, lo suficiente como para cubrirlo y un poco más. Ten cuidado de no echar demasiada.
• Ahora, añade la pastilla de caldo de pollo y un poco de sal (no demasiada, porque la pastilla ya lleva bastante sal y sabor).
• Mezcla un poco.

Ahora, el secreto importante es tapar la sartén, pero con una tapa que tenga un agujero que deje salir el aire.

Una vez la cubras, déjala 5 minutos y échale un vistazo.

Cuando voy a ver cómo está, siempre lo pruebo, porque a veces puede estar duro. Si pasa eso, tendrás que añadir un poco más de agua, la suficiente para cubrirlo. Vuelve a taparlo y espera otros 5 minutos.

Cuando tu arroz se parezca a esto y al probarlo lo notes suave, ¡está listo!

• Me olvidé de hablaros del fuego: se tiene que cocinar en el fuego más pequeño y a la mínima potencia todo el tiempo.
• Además, cuando pruebes el arroz, añádele sal si le falta.

Tras apagar el fuego, deja el arroz tapado en el sitio al menos 5 o 10 minutos. Dicen que con el vapor se sigue cocinando y consigue el sabor perfecto.

Ya puedes servirlo con judías al estilo turco, con cualquier tipo de carne o con verduras. Es la guarnición perfecta.

¡A mi me gusta con las judías de Heinz!

Bon Appetit

Estad atentos para más recetas.

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