La primera impresión que me dio el Motel Super 8 fue de: -Estoy en una película americana basada en un cómic. Porque el cartel que te encuentras nada más llegar invita a pensar eso. Pero nada más lejos de la realidad. El Motel está ubicado en una zona muy buena de South Tahoe.
Lo primero que llama la atención desde luego es ese cartel enorme con amarillo y un ocho rojo gigante. Te lo encuentras por la carretera de Lake Tahoe Boulevard, justo al ladito del Ski Run Marina en el que comentaba puedes reservar el crucero en el Tahoe Queen, aunque desde mi punto de vista, si no vas muy sobrado de presupuesto no vale la pena. Pero claro tampoco lo he hecho, pero por lo que nos contaron en el Motel... no parecía la repanocha, desde luego.
A poco más de cien metros tienes ya la orilla de la "playa" del Lago Tahoe. Al atardecer toda esa zona es preciosa para pasear por allí y contemplar la naturaleza del Lago en estado puro. Pero ya hablando de lo que es el motel en sí.
En la habitación la verdad es que encontramos de todo en unas condiciones bastante buenas teniendo en cuenta nuestra última experiencia jaja.
HABITACIÓN:
El motel es mucho más grande que el anterior en que estuvimos, el BlackJack... en el caso de Super 8 tiene 107 habitaciones. Una para mi número mágico. Ñeee. Bueno fuera frikeces, en la habitación teníamos dos camas grandes, donde después de juntarlas pudimos dormir cómodamente los cinco (bueno... con tanto roce de mi compi por detrás que casi me tiraba de la cama no sabría decidir si lo que tuve fue una experiencia con hombres o no... jaja no sé si eso llega a entrar en la definición... dejémoslo ahí). El caso es que dormir pudimos dormir, y para cuatro personas que es para lo que está diseñado de sobra. Además si tenéis que dormir apretados como era el caso había aire acondicionado así que sin problema por eso.
La decoración es normalita tirando a cutre (como marca la tendencia de todos los motales por allí al parecer). Desde luego para mi forma parte del encanto de ir a un motel de carretera jaja. Había TV por cable, aunque no llegamos ni a usarla creo. Un pequeño microondas, la mini nevera (sin mini bar, no había nada dentro, era para uso propio), una mesa y dos sillas. A las que las chicas dieron buen uso sacándolas al pasillo para fumar (pasillo que era la calle, vaya).
Diferencia con el anterior importante para los adictos a las redes. Hay conexión Wi-Fi gratis. Eso sí, llega cuando quiere. No todo va a ser tan bonito, que estamos en medio de la nada, que no se olvide xD.
Con el baño sí nos llevamos una sorpresa respecto al anterior. En Super 8 se lo curran y ponen toallas, vasos (en su respectiva e higiénica funda) e incluso secador de pelo. Ah, y como toque detallista, una calentadora de agua pequeñita, como para preparar té o café y un par de sobres de cada. Aunque supongo que más pensado para el invierno.
UBICACIÓN Y EXTERIOR:
Además de estar al lado del Ski Run Marina, el motel también está relativamente cerca del famoso "Harrah's Casino" (bueno famoso por la zona, vale). Nosotros no llegamos a ir, pero estaba como a poco más de tres kilómetros según nos dijeron, por lo que es factible llegar a él andando.
En el exterior de la habitación, paseando un poquito, porque el motel era también bastante grande, llegamos a la piscina al aire libre. Es la que veis en la foto. Parece que no está mal, ¿verdad? Bueno y si os digo que el agua no era exactamente de ese color... ¿qué os parece?
De hecho tenía un color que no sabría definir. Pero no se acercaba al transparente en ninguna escala que yo conozca jajaja. Era más bien... marrón-verdoso. Parecía que fuera a salir de allí cualquier ser de la mitología urbana de bosques y lagos (tal vez esté exagerando un poquitín jaja). Al parecer se les rompió el filtro, o se quedaron sin cloro... o yo que sé. Pero aunque aquello no parecía practicable, los hombres de verdad son como los buenos marineros, y navengan en aguas turbulentas. Así que nos quitamos la ropa y nos expusimos a las millones de bactería que nos estarían esperando allí ansiosas, seguro. Pero como fuimos sólo los chicos y ponernos a echarnos fotos uno a otro iba a ser un poco extraño e incómodo (más teniendo en cuenta que habíamos dormido pegaditos la noche de antes), decidimos no dejar documentación gráfica al respecto jaja. Ambos sabemos que ocurrió, y eso será suficiente esta vez.
Supuestamente tenían también bañera de hidromasaje y restaurante. Bueno la bañera de hidromasaje estaba parada (supongo que al ser verano... eso lo reservarán para invierno... mi teoría, pero igual es que era tarde o vaya usted a saber), y el restaurante no llegamos a verlo abierto tampoco. Tal vez porque abría sólo en temporada de invierno que es cuando el motel está lleno hasta los topes. Una pena porque en las fotos de la reserva tenía buena pinta, según explican sirve todo tipo de platos estadounidenses (hamburguesas, básicamente) y especialidades internacionales (no me extrañan, si se limitaran a los estadounidenses iban apaña'os jaja). Aunque aquellas chimeneas llamaban la atención... digan lo que digan la comida hecha en chimenea sabe mejor. También vimos desde fuera una mesa de billar y algunas televisiones, por lo que el local estaba bastante bien montado, una pena que no lo viéramos en activo.
Cerca del motel también están el centro comercial Bijou (no esperéis un centro comercial tipo cualquiera de Madrid, Valencia o Barcelona), es un centro con algunos comercios jaja. Y andando a un pateo largo la estación de esquí Heavenly. Unos cuatro kilómetros. Pues eso, un pateo bastante majo, sobre todo si vas cargado con todos los "apechusques" del esquí.
CONDICIONES:
La hora de entrada cuando reservas puedes hacerla el mismo día que tienes la reserva a partir de las dos del mediodía. Una horita más tarde que en anterior que estuvimos. Y la salida debe ser antes de las doce del mediodía (una hora más tarde que en el anterior que estuvimos, así que se compensa por la hora más tarde que te dejan entrar, "las gallinas que entran por las que salen"), para que tengan tiempo de reorganizar y limpiar, como Jobs manda.
Sobre el tema de entrar personas extra en la habitación tienen una política también bastante tolerante. El personal hay que decir que era muy simpático y por eso no se puede poner ninguna pega.
La condición es que si entran cinco en una habitación de cuatro, supuestamente se puede pagar por siete euros una cama supletoria (sólo se permite una por habitación), pero también decían en las condiciones que un adulto o niño (o varios, no lo especificaban) se pueden quedar gratis en la habitación si usan las camas que hay. Muy enrollados en ese sentido. Hasta que un día llegue un grupo de veinte españoles y se metan en una habitación de cuatro con dos camas dobles por ahorrar. Sí, amigos, no miren con esos ojos... peores cosas he visto. Que a los españoles en los buffets libres de desayuno nos temen por algo... Y con motivos. Qué pésima imagen damos.
Las medidas que han tomado algunos sitios es poner horario de desayuno de siete de la mañana a nueve, así se aseguran que pocos españoles van a llegar mientras siga abierto jaja. Para pillos nosotros, pillos ellos, deben pensar. Y no les quito razón.
En temporada de esquí (en invierno básicamente) las habitaciones son de las más asequibles que hay por la zona, estando sobre los cincuenta euros, y fuera de temporada como fuimos nosotros nos costó menos de cuarenta euros la noche, reservando para cuatro, lo cual no está pero que nada mal. Menos mal aún si comparo con algunos albergues en los que he estado por diez euros la noche en europa en una habitación con siete u ocho personas y una sola ducha para todos. No digo más.
DESAYUNO GRATIS:
Ah, y a diferencia del anterior, este sí incluye desayuno en el precio. Un verdadero lujo. Y si encima tenemos en cuenta lo que ponen de desayuno ya está más que genial. Os dejo una foto de los básicos de desayuno que podías elegir:
Básicamente vasitos pequeños (a prueba de españoles) para elegir entre café o leche en la primera maquinita, zumo de naranja (un poco así así, hay que reconocer, pero eh, incluído en el precio no esperarás naranja natural exprimida) en la segunda maquinita, chocolate caliente en la tercera (que bueno en verano no va mucho, pero qué carajo, para mezclarlo con la leche y mojar magdalena... sobrado), y cereales de dos tipos. Supuestamente unos eran Frosties (y no se que sea un esnob pero de Frosties solo tenian la pegatina jaja, aun así no estaban malos) y los otros más como de fibra o dietéticos o algo así. Y en la foto no se ve pero había un poco de bollería industrial, básicamente magdalenas normales y otras con arándanos. No recuerdo si una de las chicas llegó a coger una con trocitos de chocolate, pero esas volarían a los diez minutos jaja.
En resumen, me sorprendió gratamente la verdad el motel Super 8. No le pongo cinco estrellas porque está viejo y en algunas cosillas de la habitación tienes que hacer "la vista gorda". Pero por todo lo demás y teniendo en cuenta el anterior, la verdad que genial.
No pudimos tampoco disfrutar de todo lo que ofrecía por no ser temporada alta de esquí, pero a la vez por eso mismo estuvimos más tranquilos y nos salió más barato, así que compensa. Creo que el truco con este tipo de moteles es ir con expectativas muy bajas, así vas sorprendiéndote con cada cosita o detalle nuevo y aprecias y valoras mucho más y mejor el lugar jeje.
Ah, que no se me olvide comentar. Esto es algo típico que os pasará en todos los moteles. Os cobrarán sobre el percio de la reserva el 10% del precio por impuesto municipal. Pero vamos que rara vez suele llegar a los tres euros. Lo digo más que nada para que no penséis que os intentan timar jaja. Que es así, vaya.
Si vais al Lago Tahoe alguna vez (cosa que recomiendo muchísimo) del rollo road trip o mochileros low-cost, sin duda sabréis apreciar el encanto de este motel. Así que recomendado queda. Y ya después del descanso y un desayuno genuino y generoso. A poner rumbo a Yosemite Village. ¡Arranca que nos vamos!
Seguiremos informando! Powodzenia!