Liubliana

Tal vez te preguntes, ¿por qué gastaría mi dinero y mi tiempo en viajar a Liubliana cuando tengo tantas ciudades renacentistas en Italia y playas con arena en Croacia, los países vecinos? De hecho, esos lugares son geniales, pero también lo es Liubliana a su manera. Voy a intentar demostraros por qué la mayoría de los turistas que vienen se quedan tan sorprendidos al verla.

Casco antiguo de la ciudad

Lo que más visitan los turistas cuando vienen a Liubliana es el centro de la ciudad. Está situado en una pequeña zona a ambos lados del río Ljubljanica, donde se puede ver la ciudad en un paseo en barco. Hay muchas cafeterías y bares en ambos lados, siempre están llenos de gente que van allí para compartir las últimas noticias. El centro también cuenta con muchos edificios antiguos de diferentes colores, pequeños balcones llenos de flores, muchos lugares para sentarse y fuentes de agua que se pueden utilizar para hidratarse. En definitiva, es una ciudad muy turística. Lo mejor es visitarla durante los meses de primavera y verano o durante la época navideña, para poder ver las luces, los árboles decorados, los puestos y muchos lugares que ofrecen vino caliente.

La plaza de Prešeren es una plaza central que cuenta con una iglesia de color rosa y es un sitio que tiene su propio clima en el centro durante el verano (por lo que a veces caen pequeñas gotas de agua que salen desde arriba para refrescarte durante el verano). Se puede llegar a ella a través de uno de los puentes llamado el puente Triple, construido por el arquitecto más famoso de Eslovenia, Jože Plečnik.

A la derecha de la plaza se encuentra la plaza Kongres y en el camino se puede hacer una parada en Zvezda, la mejor pastelería de la ciudad. Cerca se encuentra NUK, la Biblioteca Nacional, que cuenta con unas escaleras perfectamente decoradas. A la izquierda de la plaza de Prešeren, se encuentra el Mercado Central, que es especialmente atractivo los viernes de verano, ya que existe algo llamado "cocina abierta" (odprta kuhna), donde se puede probar la comida de diferentes restaurantes de la ciudad. Hay dos puentes importantes en esa dirección: el puente de los Carniceros, donde las parejas sellan su amor con candados y el puente de los Dragones.

El rascacielos era el edificio más alto de Liubliana. Está situado en la calle Slovenska Cesta. El ascensor te llevará hasta el balcón de arriba donde hay un bar y un restaurante, ambos bastante caros, pero aún así, merece la pena visitarlo en los días soleados, ya que ofrece una bonita vista del centro.

Las orillas del río.

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El castillo

El magnífico castillo de Liubliana asoma justo al lado del centro de la ciudad. Está situado en la colina y está rodeado por un pequeño bosque. Hay varias maneras de llegar: se puede ir en coche por la calle principal, pero lo más recomendable para los turistas es simplemente seguir uno de los pequeños senderos que rodean el castillo y que te llevan hasta allí. El primero sale de Vodnikov trg y está marcado con una señal, aunque también se puede utilizar el funicular. El castillo ofrece una vista espectacular de la ciudad, que podrás ver aún mejor si subes a la torre. La entrada al patio del castillo y a las murallas es gratuita. Únicamente tendrás que pagar por ver las exhibiciones y la torre, en caso de que quieras hacerlo.

El castillo de Liubliana.

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La verde Liubliana

El año pasado, Liubliana fue nombrada Capital Verde de Europa, y existe una buena razón que lo justifica. Podrás encontrar árboles y plantas en el centro de la ciudad o subiendo al castillo y, donde más, en el parque más grande de la ciudad llamado Tivoli. No lo confundas con el parque de atracciones de Copenhague que lleva el mismo nombre. Aunque no tiene montañas rusas, es un gran lugar para relajarse; además, siempre hay mucho movimiento, ya que mucha gente va al parque para divertirse o para relacionarse con los demás, ya sea sentada en un café, en un banco o (por qué no) en el césped.

Se extiende hasta la colina de Þišenski y otras, cuenta con una iglesia de color rosa situada en una de estas colinas, Rožnik, desde donde tendrás una gran vista de la ciudad y del castillo. Aparte de los árboles y un montón de pistas, también puedes encontrar pequeñas zonas donde puedes practicar el esquí. Si caminas un poco más, llegarás a Koseze, un lago muy popular entre la gente que vive en Liubliana para pasar un rato en la naturaleza. Y si estás demasiado cansado para volver andando, entonces puedes coger el autobús para ir al centro desde allí.

Lago Koseze.

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Museos y galerías

Si te interesa el arte, Liubliana no te dejará indiferente. En el centro de la ciudad hay varias exposiciones contemporáneas que se pueden visitar gratuitamente. Es una buena manera de conocer algo de la cultura sin tener que pagar por ello. Para mayores exposiciones puedes hacer una parada en uno de los museos más grandes de camino al parque Tivoli en Slovenska Cesta. Hay una Galería Nacional muy conocida con una colección de famosos pintores eslovenos. Al otro lado, se encuentra el Museo de Arte Moderno que contiene las obras de arte más recientes de los siglos XX y XXI. También hay muchos otros que puedes elegir según tus preferencias, como por ejemplo: el Museo Geográfico, el Museo de Artes Gráficas, el Museo Ferroviario y el Museo Etnográfico de Eslovenia.

Existe también una zona de Liubliana que tiene un ambiente muy especial llamado Metelkova. Es un lugar alternativo decorado con graffitis muy cerca de la estación principal de autobuses y de ferrocarril. Allí también se pueden encontrar artistas, bares y un albergue que antiguamente era una prisión.

Metelkova.

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Erasmus en Liubliana

He estado en Erasmus en Madrid y sinceramente no hay ningún lugar como ese. Pero aunque a los eslovenos les gusta optar por España para realizar el Erasmus, a los estudiantes españoles les gusta Liubliana. Aparte de las razones anteriores, existen muchas otras razones.

La mayoría de los estudiantes Erasmus eligen vivir en una residencia de estudiantes con dos personas más en una habitación. Es barato y así uno puede conocer a muchos otros estudiantes de todo el mundo. Además, también se hacen muchas fiestas.

Los estudiantes tienen el privilegio de comer a un precio más bajo. Hay algo llamado "vales de comida" para estudiantes; solo sirven si llamas a ciertos restaurantes (puedes encontrarlos en la página web: studentska-prehrana. si). De esta manera, puedes comer por apenas 3-4 euros por una comida completa y en algunos lugares cerca de la facultad de Filosofía incluso puedes conseguir tortilla o pizza gratis. Pero recuerda que tienes que ir primero a la oficina de estudiantes para poder utilizarlo.

Además, hay varias opciones muy buenas para desplazarse de un lugar a otro. Hay líneas de autobuses urbanos alrededor de Liubliana y normalmente hay uno cada 10-15 minutos (dependiendo de la línea y la hora). Una tarjeta mensual puede costar alrededor de 20€, pero también puedes optar por pagar un billete de autobús individual. También puedes hacerlo comprando una tarjeta urbana e introduciendo dinero en ella, o llamando a un número de teléfono en una máquina dentro del bus. Un billete puede costarte 1,20 €. Para más información, puedes consultar su página web: lpp. si

Aunque también, puedes ir en bicicleta, ya que es una ciudad muy tranquila para hacerlo. Solo asegúrate de ponerle candado a tu bicicleta cada vez que la dejes aparcada en algún lugar o podrías quedarte sin ella. Existe también un servicio público de bicicletas, pero no es muy fiable, ya que a menudo algunos puntos de venta de bicicletas se agotan o se pierden. Y como es una ciudad pequeña, siempre puedes ir andando.

Liubliana se encuentra cerca de muchos otros lugares interesantes, por lo que hay muchas opciones para hacer excursiones de un día o de fin de semana. Por ejemplo, puedes visitar la ciudad de Bled, Piran, Venecia, Zagreb, Crikvenica, Viena... Y no tendrás ningún problema para encontrar una línea de transporte que te lleve hasta allí.