Plaza de los Palomitos

Ya hemos explicado numerosas plazas de Gandía: la de Loreto, la del Ayuntamiento, la de San José, la de Benipeixcar, la del Prado y la de la plaza Elíptica y aunque existen algunas más, pienso que junto a la de los Palomitos, estas son las plazas más importantes de Gandía.

En esta ocasión toca hablar de la plaza de los Palomitos que es sin duda, uno de esos lugares que todo gandiense lo considera importante.

Cómo llegar

Es muy fácil llegar a la plaza de los Palomitos debido a que está en pleno centro de Gandía. Para llegar desde la estación, lo mejor es cruzar la calle Mayor e ir preguntando a la gente ya que en una de las calles de la derecha te llevará hasta la plaza.

Si acabas de visitar la Casa de la Marquesa, aún lo tendrás más fácil ya que enfrente se encuentra una de las calles que te llevarán a la plaza de los Palomitos.

En cuanto en coche, reitero que lo mejor es dejarlo o en el aparcamiento del Gregorio Mayans o en el aparcamiento de la Feria, enfrente del Paseo de las Germanías.

Un poco de historia...

Antes de nada aclarar su nombre, al igual que pasa con la Plaza Elíptica que tiene un nombre oficial y otro extraoficial, aquí pasa lo mismo. Oficialmente se llama plaza del rey Jaime I (o plaça del Rei Jaume I en valenciano), pero extraoficialmente recibe el nombre de plaza de los Palomitos (o plaça del Colomets en valenciano) debido a que se concentran una gran cantidad de palomas en el lugar.

También recibe el nombre de plaza del Segó, pero ese nombre ya que encuentra más desaparecido entre los más jóvenes, siendo más conocido por la gente mayor. Si no me equivoco fue ese el primer nombre que recibió la plaza.

La plaza era antiguamente el huerto del Convento de San Roque pero con la extinción de las órdenes religiosas, el ayuntamiento adquirió el Convento y con ello también la huerta del Convento.

La plaza se abrirá al público en 1855, anterior a otros lugares que ya he nombrado en otros artículos. Posteriormente, se le añadirían otras salidas, al Paseo y a otras calles más pequeñas.

Durante el relativo tiempo que esta plaza ha estado abierto ha pasado por distintas fases, siendo una plaza muy distinta de lo que era en los años 50 de lo que es en la actualidad.

Con la llegada del cine, el Cine Royalty (estuvo en poco tiempo bajo el nombre de Cine Goya) se instaló en esta plaza, convirtiéndose en uno de los lugares más concurridos de Gandía en la primera mitad del siglo XX. El lugar se parecía más a un parque que a la plaza que conocemos ahora. El cine como tal ya se encuentra desaparecido pero la fachada aún se conserva.

Ese pequeño parque, se convirtió en una plaza y posteriormente, en 2012, aún se urbanizó mucho más perdiendo gran parte de su identidad, según mi opinión. El pequeño parque de columpios se concentró en un lugar, y las fuentes de agua desaparecieron en favor de más sitio para los bares. Al haber menos agua, también se acercan menos palomas al lugar.

La última reforma, me parece que ha quedado bastante mal porque prácticamente todo el lugar se encuentro lleno de hormigón, sin apenas espacio verde.

La plaza de los Palomitos

Hay veces que una simple fotografía tomada significa mucho más después que en el momento de hacer la foto, esto me pasó con la fotografía de arriba. Podemos ver los dos símbolos por excelencia de la plaza, por un lado tenemos una escultura dedicada a Jaime I, que para quien no lo sepa fue quien conquistó el Reino de Valencia. Y por otro lado, tenemos una paloma (supongo que alzando el vuelo) que es el otro símbolo de la plaza.

La plaza en sí mismo no tiene nada del otro mundo, es decir, ver palomas se pueden ver en muchos lugares del mundo. Aún así hay tres edificios que merecen ser vistos en esta plaza.

El primero ya lo he explicado y es la fachada del Cine Royalty, en sí mismo poco queda de ese cine. Actualmente, ese edificio es utilizado en sus bajos para distintas tiendas.

Por otro lado, tenemos la antigua estación de correos. Antiguamente, estuvo aquí el instituto Ausias March pero al desplazarse a la plaza Cristo Rey, fue aprovechado para poner aquí el servicio de correos y telégrafos (que estaba en la calle Benedicto VI). Hasta hace pocos años aún se encontraba aquí pero finalmente se desplazó a la calle San Rafael quedando el edificio vacío.

En teoría, debería ocuparlo la biblioteca pero de momento se ha quedado vacío, debido básicamente a la crisis que también afecta a las arcas de los ayuntamientos y gobiernos regionales. Del edificio, sin duda me quedo con el pequeño reloj que se puede ver en su fachada.

Y finalmente, tenemos el convento de San Roque (o Sant Roc en valenciano). El convento tuvo distintos usos con el paso del tiempo, siendo actualmente utilizado como archivo histórico en la parte derecha y como biblioteca en la parte izquierda. La biblioteca es la mayor de Gandía, por eso se llama Biblioteca Central y seguramente sea más grande que la Biblioteca Provincial de Valencia de la que ya hablamos. Se puede ver algún resto del convento, sobre todo en el segundo piso.

Y ya que estamos, recomendar la visita de la iglesia de San Roque que se encuentra al lado del convento. Aunque para llegar deberemos girar por la calle San Roque hasta llegar a la pequeña plaza del Beato Andrés Hibernón, aunque en sí mismo yo no lo consideraría una plaza sino una calle un poco más ancha debido a la iglesia de San Roque.

En conclusión, aunque me parece una plaza que ha perdido parte de su encanto con la reforma del 2012, tiene un par de edificios interesantes y es un buen lugar de descanso. De todas maneras, es una plaza que sí o sí un gandiense la conoce debido a que en su niñez habrá pasado muchas horas en ella.