Palacio Ducal

Menudo fallo hubiera sido no hablar del Palacio Ducal, posiblemente el edificio más visitado junto a la Colegiata. Y uno de los lugares obligatorias que se deben visitar de la ciudad de Gandía.

Cómo llegar

El lugar se encuentra cerca de otros monumentos y lugares por lo que será fácil que entre por nuestro recorrido, lo mejor es visitarlo después de visitar la plaza del Ayuntamiento de la que ya hablamos. Desde esta plaza se coge la pequeña calle Ausias March y se llegará hasta el Palacio Ducal.

Si uno está en el Paseo de las Germanías deberá ir hasta el principio, cerca de un Burger King y la prmera calle se encontrará el Palacio Ducal. En cuanto al coche, mi consejo es el mismo que el de la casa de la Marquesa o el de la plaza de los Palomitos, dejar el coche o en el parque donde normalmente se hace la feria o dejarlo en el aparcamiento gratuito del Gregorio Mayans.

Un poco de historia...

El siglo XVI fue el siglo de Oro de la literatura en valenciano siendo la actual Gandía uno de sus centros literarios. Además, también políticos, los únicos Papas españoles han sido valencianos. Calixto III y Alejandro VI fueron papas valencianos, este último con ciertos vínculos con el municipio de Gandía.

Tenemos que retroceder al siglo XIV, el rey Jaime II, tuvo un hijo, Pere, del cual creó el señorío de Gandía para dárselo en 1325. El hijo de Pere y nieto de Jaime II, fue Alfonso el Viejo (el mote viene a que murío con 80 años), el cual, ascendió el señorío de Gandía en un ducado y la razón de porque se llame Palacio Ducal. Con Alfonso el Viejo se construyó el actual Palacio Ducal.

Posteriormente, llegarían los famosos Borja. El título nobiliario había acabado en manos del rey Fernando II el Católico y Rodrigo de Borja (el futuro Alejandro VI) compraría el Ducado de Gandía en favor de su hijo Pedro Luis de Borja, primer duque de Gandía en el año 1485.

Fueron los siglos XV y XVI, el mayor explendor del palacio, por este lugar pasaron personajes de gran importancia como María Enríquez y Francisco de Borja. Este último creo que lo expliqué en el artículo de la plaza del ayuntamiento pero es curioso que en mi viaje a Portugal verlo como estatua en el Palacio de Mafra o en el Museo de San Roque en Lisboa.

La importancia de Francisco de Borja es tal que fue canonizado y es sin duda, una de las figuras más importantes de la Orden de los Jesuitas.

El lugar perdió su importancia a partir de la muerte del onceavo duque de Gandía, en los siglos siguientes el Palacio Ducal pasará de manos de nobles siendo de otros lugares y quedando, por tanto, abandonado. Estos nobles básicamente cogerán todo lo importante que se pueda coger del Palacio Ducal, estando prácticamente abandonado. Mientras que el título nobiliario pasaría a la Casa de Osuna, que para quien no lo sepa se encuentra en Andalucía, una distancia bastante lejana de Gandía, siendo la actual poseedora del título de duque de Gandía de Málaga.

En 1890, la Orden de los Jesuitas se hará con el edificio en subasta pública, una de las razones será restaurar el edificio donde nació San Francisco de Borja. El edificio también fue (y es) utilizado una parte como colegio privado.

La importancia del edificio fue respaldada en 1964 cuando fue declarada Bien de Interés Cultural.

Durante toda su historia ha tenido varias reformas, las más importantes en época de los Borja y mucho más posterior, las diversas reformas realizadas por los jesuitas.

El Palacio Ducal

Es importante saber la historia del Palacio Ducal para no llevarnos a error, es decir, en la visita al Palacio Ducal veremos diversas salas del Palacio pero los muebles o son imitaciones o son muebles de otros lugares ya que cuando llegaron los jesuitas a restaurarlo ya sea los nobles o cualquier ladrón de la comarca, los objetos valiosos habían desaparecido. Como curiosidad decir que el objeto más antiguo es el cerrojo que se encuentra en la puerta que es del siglo XII o XII y que por su escaso valor aún continua en el Palacio Ducal.

La entrada cuesta 6 euros aunque existe un descuento del 20% si se presenta el billete de cercanías, en el caso de coger el tren desde Valencia u otros lugares. Por los datos que tengo no hay descuento de carné joven o carné de estudiante. También existen descuentos de grupos.

En cuanto su horario de lunes a sábado de 10.30 horas a 13.30 horas y de 16 horas hasta 19.30 horas. Los domingos tiene el mismo horario solo que abren por la mañana.

En al primera imagen se ve la puerta principal del Palacio, aunque pueda parecer una reconstrucción el escudo de armas es de la época y más o menos se conserva el resto de la fachada.

A continuación entramos en el denominado patio de armas que se puede ver en la segunda fotografía, donde de lo poco que se conserva originalmente es la escalera de honor. De aquí pasaremos a la primera planta del edificio.

En esta planta empezaremos por la Cámara de la duquesa, donde se supone que nació San Francisco de Borja y donde podemos ver unos cuantos azulejos bastante bonitos, que son de la ciudad de Manises, muy tradiciónal de esta ciudad.

Se continua por la sala de las Águilas, cuyo nombre proviene de varios dibujos de este ánimal que podemos encontrar en el curioso friso. Después tenemos la Sala de los Estados de Cerdeña, cuyo nombre proviene a cierta unión entre los Borja y los Centelles, esta última tenía territorios en esta isla italiana, además de unirse al ducado de Gandía, el cercano condado de Oliva.

A continuación, tenemos la Sala Verde y el Aposento de la Torrecilla, cuyo lugar se supone que fue la habitación de la duquesa María Enríquez, donde se destacan unos azulejos bastante bonitos del siglo XV.

Posteriormente, accederemos al Salón de Coronas, fue reformado en tiempos de los Borja y cuyo nombra se debe a la doble corona que decora toda la sala. Procede de la fusión de dos coronas, esto fue utilizado por Alejandro VI en su mandato como Papa y luego, utilizado por sus hijos. En la parte superior del friso, se puede leer una inscripción en latín que viene a significar en español "Corred que para comprender que únicamente será coronado aquel que pelee según la ley".

Pese a que muchos azulejos fueron repuestos por los jesuitas aún se pueden ver algunos azulejos originales. Esta sala se encuentra bastante decoradas con varios tapices y con un cuadro del siglo XVIII. En estos tapices se pueden ver escenas de la vida de San Francisco de Borja. Anexa a esta sala se encuentra la Santa Capilla, donde San Francisco de Borja practicaba sus oraciones y diversos deberes.

A continuación, tenemos la Galería Dorada que es la sala más bonita del Palacio Ducal, siendo un referente de la arquitectura civil barroca valenciana, la razón de esta sala fue para celebrar la canonización de San Francisco de Borja. En ella encontramos cinco salas en las que destacan toda la preciosa decoración y que por eso recibe el nombre de "Galería Dorada". Aparte de la decoración, se puede destacar los distintos techos de las distintas salas y que dan nombre a cada una de estas salas: Sala Heráldica de la Familia Borja, Sala Ornamental, Sala de la Glorificación de San Francisco de Borja, Sala de la Sagrada Familia y Sala del Cielo y la Tierra.

Y con esto acabamos la visita, el lugar posiblemente podría haber sido mucho mejor si no hubiera estado casi un siglo abandonado pero al menos los jesuitas lo cuidaron y restauraron.

En conclusión, es un lugar precioso, que podría ser mucho más, pero que aún así merece la visita y es parada obligatoria para todo aquel que pase por Gandía. Lo más destacable son los azulejos y los distintos murales más que en el mobiliario, pero aún así totalmente recomendable la visita al Palacio Ducal.