Paté casero

Cada vez más, me aficiono a la comida hecha en casa, controlando perfectamente lo que lleva y lo que no. Hoy con internet es súper fácil acceder a nuevas recetas e inventos personales. Aquí os traigo un nuevo aperitivo totalmente casero y sencillísimo.

Esta es una alternativa a todos eses patés a base de pato, de hígado de cerdo, finas hierbas… Además de estar más rico (al menos para mi gusto) estará hecho por vosotros y sabréis cuales son los ingredientes. De nuevo os traigo una receta fácil y sencilla y ¡para toda la familia! Incluso si queréis poner a cocinar a los más peques...

INGREDIENTES

- 3 o 4 quesitos (de estas porciones triangulares).

- Una lata de mejillones en escabeche tamaño pequeño (es necesario que sea en escabeche, no en otra salsa).

- Una lata de atún de las pequeñas.

- Un par de lomos de anchoa bien troceados (dependerá del gusto que tengáis por lo salado).

PREPARACION

En primer lugar debemos mezclar todos los incredientes. Se echan todos juntos al vaso de la batidora. Esto es una de las cosas por las que la receta es tan sencilla. Ni tienes que tener en cuenta el orden de los ingredientes, ni la temperatura... Sencillamente mezclas y bates (he de reconocer que la pinta en este punto no es de lo más apetecible jaja, pero darle un voto de confianza y ya veréis).

La única cosilla con la que tenemos que tener cuidado es con la cantidad de salsa a añadir. Solo debemos verter parte del líquido, tanto del escabeche de los mejillones como del aceite del atún (sino el paté nos quedará demasiado líquido). Incluso es mejor quedarse corto e ir añadiendo poco a poco si queda demasiado pastoso. Sino, si nos queda muy líquido (sobre todo por el aceite del atún) perderá la consistencia y por tanto su atractivo.

Por último, los lomos de las anchoas deben ir bien troceados previamente ya que si no la batidora no los troceará adecuadamente, y si bien le dan un toque riquísimo, es poco agradable encontrarse con un tropezón a tope de salado en un biscote.

Cuanto todo esté listo, tendremos que batir toda la mezcla hasta que quede una pasta uniforme (como siempre esto va a ojo y al gusto de cada uno).

¡A servir!

Ahora solo queda presentar el paté en un cuenco y ya está apto para untar en tostadas o para los sándwiches de la merienda.

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