Papa a la Huancaina

¡Hola a todos los cocineros del mundo! Espero que estén teniendo días increíbles como yo. Hoy les quería contar una de las principales recetas de los hogares peruanos. Considero que todo aquel que vaya al Perú no puede irse de ahí sin probar la deliciosa crema a la huancaína, que es la protagonista de este plato utilizado principalmente como entrada.

El plato en sí ha tenido tanto éxito en los últimos años que hay muchos restaurantes que los ofrecen en su carta como platos de fondo y la crema se volvió tan requerida, que hoy en día, no hay restaurante peruano que no cuente con dicha crema, la van a encontrar en diferentes lugares, desde las famosas pollerías, chifas, hasta los lugares en donde se vende ceviche, anticucherías, inclusive las grandes cadenas de fast food o comida rápida, tienen a la crema huancaína como una de sus opciones, a parte de las tradicionales cremas que utilizan, como el kétchup, la mayonesa y la mostaza.

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Pues bien hoy les quería traer la receta de este exquisito plato muy sencillo de hacer por cierto y también contarles un poquito de la historia del por qué le llaman así “Papa a la Huancaína”, ya que Huancayo es uno de los lugares bonitos a visitar del Perú. ¿Es que acaso este plato emblemático, proviene de ese lugar? Pero no, no es de Huancayo, es e Lima, así es un plato limeño.

Les contaré la historia que me compartió una de mis profesoras en la universidad especialista en Gastronomía y que además también corroboré más adelante leyendo algunas publicaciones del mismo rubro. Cuenta la historia que tras realizarse la construcción de la estación central del ferrocarril de Lima, los obreros que participaban en la obra, salían muy hambrientos y cansados al atardecer para tomarse un descanso. En ese entonces había una mujer que para poder sobrevivir y no pasar necesidades, se las ingenió para poder vender en ese horario en los exteriores de la obra, papa que sancochó con una crema incluía queso, leche y ají amarillo, lo hizo de esa manera ya que era una mujer que no sabía cocinar mucho y era lo único que tenía y podía comprar en ese momento. Todas las tardes iba con el mismo potaje a ofrecerles a los obreros que como tenían mucha hambre no dudaban en comprársela. Una tarde la señora enfermó y se ausentó entonces, al no encontrarla los obreros empezaban a preguntar a los transeúntes, si sabían de su nombre y nadie tenía referencia de ella, hasta que alguien dijo: “¿Se refieren a la papa de la huancaína que venía todas las tardes?, pues ella se encuentra muy enferma y no podrá venir”. Desde ahí le llamaron a ese plato papa a la huancaína y las personas, entre ellas mujeres que la probaron le agregaron algunos ingredientes más y hoy en día es muy popular en todos los hogares de la costa y sierra del Perú.

Sin embargo permítanme decirle que a pesar de tener sus orígenes de Lima, la mejor papa a la huancaína que he probado ha sido en un restaurante de Huancayo, en donde utilizan el batán, que es una especie de piedra grande en donde mezclan y trituran todos los ingredientes. ¡Créanme cuando les digo que es un sabor extremo!

La receta que les traigo no es en batán, pero sí es muy sencilla, ya que este implemento no lo tienen todos en casa pero sale también muy rico. Así que ahí vamos:

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Ingredientes para 4 porciones:

• Medio kilogramos de papas sancochadas.
• Un paquete de galletas de agua, galletas sodas o sino también pueden emplear panes, 2 panes de esos que les queda en el desayuno, sale más consistente y cremoso, el que ustedes prefieran da igual.
• Medio tarro de leche evaporada.
• Un ají amarillo grande.
• Dos cebollas pequeñas.
• 250 gramos de queso fresco.
• Aceite vegetal.
• Sal al gusto.

Ingredientes para la decoración:

• Dos huevos sancochados.

• Hojas de lechuga.
• 4 aceitunas grandes.
• Un pimentón de preferencia rojo cortado en juliana.

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Preparación

Las papas que están previamente sancochadas, las pelamos y las partimos por la mitad, ya que sobre ellas verteremos la deliciosa crema a la huancaína, así que una vez listas las colocamos en los platos a servir, no olvidar que cada plato deberá tener como base una o dos lechugas que también le da una excelente presentación.

En una sartén aparte, colocamos el aceite para que empiece a calentar y en la tabla de picar, partimos el ají amarillo en dos, para sacarle todas las pepitas dentro, que a veces le dan un sabor extra picante a la salsa, yo las prefiero sacar, que es lo recomendable pero si lo desean más picante pueden dejar algunas, picamos en cubitos el ajo y la cebolla, y todos estos ingredientes van directo a la sartén en donde nos espera el aceite ya caliente.

Luego de sacar los ingredientes de la sartén, esperar que se enfríen y colocarlos todos juntos en la licuadora, junto con la leche, el queso y no olvidar de las galletas o panes. Empezar a licuar todo de a pocos y luego cuando terminemos, separarlo en un recipiente o sino directamente vaciar la crema sobre la papa sancochada previamente partida en dos.

Ya para culminar con la decoración, colocamos los huevos sancochados previamente partidos por la mitad, las aceitunas, también cortadas por la mitad, sin pepa y los cortes de pimentón de tal manera que se vea muy atractiva a los ojos, ya que como le dije en las anteriores recetas, todo entra por los ojos.

Ya ven que es muy fácil de hacer, saben que lo pueden hacer como una entrada, y si quieren hacerlo como plato de fondo también. En Perú por ejemplo cuando se sirve como plato de fondo acompañando a otros platos como el tallarín, entre otras preparaciones.

Bueno chicos espero que les haya gustado y que muchos de ustedes se animen a probar este exquisito plato.

¡Muchas gracias por leer este comentario! Nos vemos en otra riquísima receta.

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