Mugcake de chocolate al microondas

¡Hola a todos! Si venís a Estrasburgo de Erasmus, y os alojais es una residencia del crous, o en cualquiera otra, lo que más vais a echar de menos es amigos y amigas: el horno.

No sé vosotros, pero yo sin horno no puedo vivir, porque no señores, las pizzas al microondas no tienen nada que ver con una buena pizza casera al horno. Además de lo bueno que está todo cuando está hecho al horno, es mucho más saludable que por ejemplo freírlo, así que cuando vives en sitios como estos donde no hay hornos, o te compras uno o aprendes algunos trucos para sobrevivir sin él. Por eso hoy os voy a enseñar el tipo de “bizcocho” que hago yo cuando me entra antojo de algo dulce y no tengo horno: el mugcake de chocolate.

Ingredientes

• Dos cucharadas soperas de azúcar (aunque esto es un poco al gusto)
• Dos cucharadas soperas de harina
• Una buena cucharada de cacao (yo uso Nesquik porque tampoco voy sobrada de ingredientes)
• Un huevo
• Una cucharada de aceite de oliva
• Una cucharada de leche
• Pepitas de chocolate (esto es opcional, yo lo que hago es rallar onzas de chocolate)

Elaboración

Pues mira, más sencillo imposible, vamos a coger todos los ingredientes por el orden que los he colocado, los ponemos en una taza, los mezclamos y listo. Pero venga, vamos a hacerlo bien:

1. Tomamos una taza más o menos grande. 
2. Echamos las cucharadas de harina, las de azúcar y la cucharada de cacao, nesquik, colacao o de lo que tengáis por casa.
3. Cascamos el huevo en la taza y lo batimos todo para que no queden grumitos de ningún tipo. Si queda demasiado líquido es porque le habéis echado poca harina.
4. Le añadimos el aceite de oliva y la leche.
5. Volvemos a moverlo y mezclarlo todo para que quede perfecto.
6. Por último, si queréis podéis añadir pepitas de chocolate, onzas de chocolate, nutella, nocilla o lo que queráis, va a estar bueno de cualquier manera.
7. Cuando tengamos la mezcla hecha, metemos la taza al microondas, a máxima potencia durante dos minutos, aunque podéis ir mirándolo por la ventanilla del microondas.
8. Cuando veáis que ya ha crecido y está bien hecho, lo sacáis y le añadís azúcar glás o lo que os apetezca.
9. ¡Y listo! A comer nuestro bizcocho de microondas.

Obviamente no está tan bueno como un buen bizcocho hecho al horno, pero no está nada malo y es mucho más sano hacerlo con nuestros propios ingredientes, que ir al supermercado a comprar unas galletas ultraprocesadas. 

Cuantas más veces pongáis en práctica esta receta, más gustillo le vais a ir cogiendo y vais a empezar a experimentar como hago yo. Podéis echarle los ingredientes que más os gusten para hacerlo de otros sabores, sin embargo, el que más me gusta a mí por el momento es el de chocolate.

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