Almejas a la marinera

Aquí os traigo una de las recetas más típicas en mi casa para estas fechas tan próximas. Un plato de almejas a la marinera para una cena familiar a lo más típicamente navideña. 

No es secreto que no es la mejor época para consumir este tipo de producto (ya que o estás forrado para que te dé igual el precio, o normalmente te proporcionarán una almeja congelada o de mala calidad). En mi opinión, lo mejor es preparar esta riquísima receta fuera de temporada para sacarle el máximo partido con un producto de calidad. Y si te empeñas, como nosotros, en tener un plato de almejas como rutina navideña, cómpralas fuera de temporada y congélalas. 

Esta es una adaptación de recetas de varios libros de almejas a la marinera. Además, en mi casa es muy típico eso de cocinas "a ojo", pero las cantidades que os doy son bastante aproximadas. Claro que finalmente depende mucho del toque y del gusto de cada persona. 

INGREDIENTES: (Cantidades para seis personas)

Normalmente en las recetas aparecen menos cantidades, pero para mi gusta la cebolla y el perejil en abundancia, ya que le dan mucha sustancia a la salsa, por lo que suelo picar bastante.

- 2 Kilos de almejas

- 1 vaso de agua

- 1 vaso de vino blanco

- 2 cucharadas de harina

- 1 vaso de aceite

- 5 cebollas de tamaño medio-grande (no nos valen las pequeñas). 

- Perejil (abundante)

- 1 cucharada de pimentón

- Pimenta negra y sal

PREPARACION

Lo primero es lavar muy bien las almejas en abundante agua fría para que suelten todas las arenas (es bastante desagradable comerlas sin estar bien limpias. La sensación es la misma que cuando el sandwich se te cae en la arena de la playa...). A continuación picamos muy bien la cebolla y el perejil. Personalmente, a mi la cebolla me gusta bien picada pero que se diferencien bien los trocitos. Sin embargo el perejil suelo picarlo lo máximo posible. 

En una tartera bastante grande se echa el aceite y se sofríe la cebolla bastante tiempo hasta que esté muy blanda, bien pochada a fuego lento (ojo que no llegue a tostarse. Aunque no llegue a quemarse cambiando de color, se queda el regustillo y estropearía toda la comida). Ten paciencia, serán 30-35 minutos. Le lleva bastante tiempo, es lo que más tiempo nos va a llevar de toda la receta.

Cuando este sofrito esté listo, será cuando añadamos las almejas, revolviendo un poco. Añadimos también la sal, el pimentón y la pimienta al gusto. Lo mezclamos todo a conciencia y añadimos el vino. Se deja al fuego hasta que se evapora un poquito, vemos que las almejas se van abriendo y van soltando el agüilla.

En este punto se deslíe la harina en el vaso de agua y se le añade a la tartera poco a poco (no lo dejamos caer de golpe).

Por último, se le añade a la olla el perejil y se remueve un poquito más, mezclando bien las almejas tirando las del fondo hacia arriba.

Después de esto se deja pochar un poco a fuego muy lento.

¡A servir!

Se sirven así calientes. Aunque os diré que este es un plato que al día siguiente están incluso más ricas (lo que lo hace un plato aún más apropiado para navidad, ¡ya que son las fiestas de las sobras por excelencia!).

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