Mi Erasmus: cómo hacer que una relación a distancia sobreviva

Cómo hacer que una relación a distancia sobreviva

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El momento más difícil de mi vida fue despedirme de mi novio en la estación de tren, con lágrimas en los ojos y la incertidumbre de si duraríamos este último año. Me dirigía a Francia, donde iba vivir y a trabajar durante los siguientes 12 meses. Mi elección de irme al extranjero fue en cierto modo involuntaria, ya que era un requisito que me pedía el curso de mi universidad. Tenía miedo de marcharme. Al principio me hacía ilusión, pero eso cambió desde que empezamos a estar juntos.

Empezamos a quedar a principio de curso en la universidad y estuvimos quedando durante 10 meses antes de que me fuera a Francia. Me daba miedo incluso sacar el tema, recuerdo algún que otro comentario en referente a con quién podría empezar él a salir mientras yo estaba fuera. Pero después de una conversación difícil acerca de si debíamos romper o hacer que la relación funcionara, decidimos seguir juntos. Y 10 meses después, seguimos luchando por ello y aguantando el mes y medio que nos queda. Así que aquí está mi consejo para hacer que una relación a distancia sobreviva.

Decidir si vale la pena

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En primer lugar, una de las decisiones más difíciles es decidir si una relación a distancia vale la pena. Es importante tener una charla acerca de lo que vais a hacer durante tu Erasmus. Inevitablemente, cualquiera de las cosas que decidas va a ser dolorosa, pero has de decidir si va a ser más doloroso estar juntos que romper. Si la respuesta es "no, romper sería más difícil", entonces la mejor opción es tener una relación a distancia. Puede dar miedo y ser abrumador, pero hay miles de parejas Erasmus que hacen que las relaciones a distancia funcionen. Hay 7/8 parejas que conozco que actualmente todavía tienen una relación fuerte. Después de todo, solo es un año... Se pasa más rápido de lo que crees.

Hablar regularmente

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Hablar con regularidad es una de las claves (obviamente) para hacer que una relación a distancia funcione. Os salvarán el Skype y el Facetime, así que asegúrate de usarlos lo más frecuentemente posible. Hablo con mi novio varias veces a la semana, normalmente cada 1-3 días dependiendo de lo ocupados que estemos. Asegúrate de estar al corriente de lo que pasa en la vida de ambos y acuérdate de fechas y detalles importantes. No es nada del otro mundo, pero desearle buena suerte para los exámenes o preguntarle qué tal fue la noche de fiesta son pequeñas formas de demostrar que te importa.

Enviar mensajes regularmente es otra buena forma de comunicarte cuando no puedes usar una vídeo llamada. Comunicaros mutuamente tonterías o enviaros fotos divertidas garantiza hacer a la otra persona sonreír. Y no dudes en enviar algún que otro texto romántico de vez en cuando. Ya que no puedes expresar afecto a través de muestras físicas de amor (como un beso o un abrazo), enviarle un espontáneo "Te quiero", hará que se sienta seguro de lo importante que es para ti.

Ser sinceros el uno con el otro

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La honestidad es algo clave de cualquier relación, no solo de las relaciones a distancia. Aunque se aplican las mismas reglas: ser abiertos el uno con el otro es esencial para hacer que una relación a distancia funcione. Si echas de menos a alguien, díselo; hablar de ello os hará sentir mejor a los dos. No temas decirle que ha herido tus sentimientos. Lo peor que puedes hacer es encerrarte en ti mismo y no contarle qué te pasa. Habla sobre las dificultades que estés pasando, ya que tu rabia o tristeza puede que tenga el origen en otra cosa. Vivir en el extranjero es duro, y a veces tengo la costumbre de proyectar mis sentimientos en mi novio. Y es después de hablar de ello, cuando me doy cuenta de que el estrés que tengo en el trabajo es el causante de mi mal comportamiento. Del mismo modo, siempre colapso la semana siguiente después de verlo. Me encuentro mal y sola sin él por lo que es más probable que ataque verbalmente. Hablar sobre estos sentimientos y entender de dónde vienen nos ha ayudado mucho a seguir adelante.

Hacer planes de futuro

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Hacer planes para el futuro es una buena forma de hacer que vuestra relación marche. Hacer planes para que venga a visitarte o ir tú a verle a casa. Una visita ocasional hace que tu relación se mantenga viva y te da algo que anhelar. Haz planes para cuando vuelvas, haced una lista con todas las cosas que queréis a hacer para cuando vuelvas. Te darás cuenta de que el tiempo pasa más rápido de lo que crees y lo tendrás ahí contigo antes de que te des cuenta.

Mantener la llama

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No siempre es fácil mantener la llama en tu relación. En cuanto a las emociones, es posible hacer que las cosas vayan relativamente normal con una conversación abierta y regular. Pero en cuanto a los vínculos más íntimos, es un poco más complicado. Perder la parte física de la relación puede ser difícil para muchas parejas, y cada uno se las apaña a su manera. Cuando se trata de intimidad física, lo mejor es hablar sobre como quieres manejar la situación. ¿Te sientes cómodo evitando el tema? ¿O enviando mensajes? ¿Fotos? ¿Videollamadas? ¿Esperar hasta que quedéis? Es una decisión personal que tenéis que tomar los dos juntos. Mi consejo sigue siendo que habléis del tema en lugar de evitarlo. Creo que es sano hablar sobre la parte física de vuestra relación; ayuda a que la llama no desaparezca y que cuentes los días para vuestro próximo encuentro.

La intimidad física también puede considerarse como el simple contacto físico con la otra persona. Es difícil no echar de menos cosas como un simple abrazo o agarraros de las manos. Me di cuenta que tener algo de mi novio, una sudadera que se olvidó antes de que me fuera a Francia, ayuda mucho. Obviamente, no es lo mismo, pero poder ponérmela o dormir con ella al lado me hizo sentir más cerca de él. Esta estrategia no sirve para todo el mundo, pero para mí sí.

Que esté presente

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Tener a la otra persona presente en tu vida sigue siendo posible aunque esté lejos. Colgar fotos en la pared o tener un fondo de pantalla suyo es una buena forma de sentirte más cerca de él. Una videollamada también es una buena forma de tenerle presente. Si los dos estáis ocupados, puede estar bien llamaros y que sigáis haciendo vuestras cosas mientras la llamada sigue en curso. La mayoría de las parejas probablemente se sientan juntas a hacer cosas diferentes, simplemente disfrutando de la compañía del otro. No hay diferencia mientras estás fuera. Cualquier contacto con él ayuda, tanto sea hablar como trabajar juntos en silencio. Siempre y cuando comentéis algo de vez en cuando.

Pues ahí lo tenéis. Mis consejos para hacer que una relación a distancia funcione.

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