Viaje a Capri.

Hola! 

Soy una chica de Erasmus en Roma y a mediados de octubre estuve de viaje en Nápoles y en Capri.

Para ir a Nápoles, había un viaje con la ESN de La Sapienza organizado, pero al tardar en decidirnos, nos quedamos sin plaza. El viaje consistia en salida el viernes a Nápoles desde Roma, sábado visita a Capri y el domingo, Pompeya y vuelta a Roma. Al quedarnos sin plaza, mis amigas y yo decidimos organizarlo por nuestra cuenta pero ir con el viaje organizado. Como Pompeya ya lo conociamos, decidimos no repetir esa visita. 

Lo primero que hicimos fue hablar con uno de los organizadores que solo nos puso facilidades: nos ayudó a encontrar un hotel en Nápoles cerca de donde se quedaban ellos, nos metió en la lista para el viaje a Capri y se preocupo un montón por nosotras en todo momento. 

Tema Capri. Ir desde Nápoles es muy fácil, ya que es coger uno de los muchísimos barcos que hay, normalmente son lineas regulares y hay cada 20 minutos así, ya que se van intercalando entre sí las salidas de los distintos barcos de las muchas compañías que operan el recorrido. Creo recordar que el nuestro salió a las dies y media de la mañana, y a las once y media estabamos en Capri, ya que es solo una hora de trayecto. No recuerdo exactamente cuanto cuesta el billete de ida y vuelta, ya que nosotras, al meternos en el grupo de la ESN (que era un grupo muy muy grande, como de ochenta personas) nos salió a tarifa reducida, rondando los veinticinco euros. 

Una vez llegamos a Capri, lo primero que hicimos fue hacer la vuelta a la isla en barco. Es un recorrido de una hora en barco que, obviamente, recorre la isla entera, parando en los lugares más icónicos. Creo recordar que la excursión costaba unos diez euros, pero, también, nos salio más barato por ser estudiantes erasmus. Esta excursión la recomiendo un monton, ya que Capri son acantilados y las vistas desde el mar son espectaculares. 

En nuestra excursión, existia la posibilidad de que por diez euros mas (no me acuerdo exactamente del precio, pero rondaba por ahí) podías entrar en la Grota Azzurra. Dudamos bastante si hacerlo o no, pero al final, es de estas cosas que no sabes si en algún momento vas a volver o no y, ya que estabamos nos decidimos. La experiencia es muy buena. La Grota Azzurra es una pequeña cueva, a la que se accede en barcas de tres - cuatro personas a través de un pequeño hueco en el acantilado. Debido al reflejo de la luz de Sol y la forma de la cueva, dentro el agua tiene un color azul celeste increible que no parece real. De verdad, la experiencia de entrar y verlo con tus propios ojos es increible. 

Cuando finalizamos la excursión, nos dedicamos a explorar lo que es la ciudad de Capri. Para ello hay que subir un montón, ya que está en lo alto. Hay un funicular que por 7 euros ida o 10 euros ida y vuelta te sube. En su momento, nosotras no lo pagamos, pero, a medida que ibamos subiendo a la ciudad y avanzando, nos empezó a parecer barato y una mala idea no haberlo cogido. 

Después de mucho sudar, sufrir y hacer ejercicio de piernas como hacía mucho, conseguimos llegar arriba. Las vistas son maravillosas. Una vez llegas, es pasear y buscar los sitios mas "tipicos" ya que merecen la pena por algo. Lo bueno es que hay muchos carteles que indican los nombres acompañados de fotos, por lo que puedes decidir como ir. Los Giardinni di Agusto fueron de mis sitios favoritos. 

Capri es especial. Es algo muy natural y nosotras tuvimos mucha suerte, ya que por las fechas, ya no había mucho turista. Es un sitio para ir y pasear, hacer senderismo y perderte admirando la naturaleza. O ahorrar mucho, mucho y soñar con pasar unos días en algún hotel. 

Capri fue un sitio en el que no tenía muchas expectativas, pero, quizá por esto, de los que mas me sorprendió y me ha gustado. 

Para ir a pasar el día es perfecto y es una excursión que, yo personalmente, os recomiendo un monton.