Puffin Hotel Vík

Últimamente me gusta hacer una reseña de los hoteles en los que me quedo en mis viajes que me parece que merecen la pena en relación calidad/precio.

En este caso os hablo de Puffin Hotel Vík sitio en el que me hospedé durante mi viaje por Islandia del cual ya os conté algo en el tercer post del blog.

Todas las fotos que os muestro a continuación son cogidas de la página del hotel el cual encontré por booking pero pertenecen justo a la habitación que me toco. La página web que os pongo en el hotel es la propia del hotel (a mi actualmente me sale que están haciendo mejoras en ella, asique yo en vuestro caso lo buscaría por booking o alguna otra página de búsqueda de hoteles que además seguro que os sale más barato. )

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Por lo que puedo ver en sus demás fotos tienen habitaciones dobles y algo parecido a bungalós por si os interesa.

Respecto a la ubicación:

Me parece que es excelente por el tema de que es muy fácil aparcar y está muy cerca de la playa de Vík, lugar obligatorio en el que parar si vais a este pueblo. Pero también creo que no es algo excesivamente relevante teniendo en cuenta que es un pueblo tranquilo y zona de descanso para los viajeros asique supongo que sea parecida en todos los hoteles del pueblo.

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Lo que si puede destacar con respecto a los demás es que tienen restaurante. Nosotras cenamos y desayunamos allí como ya os dije y la verdad es que tanto el trato al cliente como la comida fue excepcional. Otro punto a favor es que el desayuno estaba incluido en el precio de la habitación y la cena no fue nada cara en comparación con los precios del país.

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Respecto a la habitación:

Una cosa que se agradece sobre todo cuando viajas por Islandia es tener una zona donde dejar la ropa antes de llegar a las camas. Tienes las botas sucias y vas con mil prendas encima por lo que el detalle del perchero a la vista es un plus en este país.

Otra cosa es la calefacción. Er aun radiador era bastante grande lo que nos permitía secar los pantalones de las tres sin ningún problema a parte del calorcito con el que dormimos.

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Las camas eran muy cómodas y toda la habitación estaba limpia. Sé que parece algo obvio, pero no todos los hoteles en los que me he quedado lo mantenían tan bien. Para mi gusto un sitio perfecto para pasar una noche de descanso como necesitareis a lo largo del viaje.

La mejor cosa sin duda fue el baño. Todo muy limpio y cuidando los detalles. Teníamos toallas pequeñitas para las manos a parte de las normales de ducha. El jabón que tenían era una pasada y disponíamos de secador (también importante para los que se duchan sobre todo por la mañana).

Una cosa como os dije en el post de recomendaciones, pero para lo que no lo hayáis leído es que ¡no os asustéis por el olor el agua! Parece una tontería, pero es algo que impacta. Allí el agua es azufrada y la beben directamente del grifo así. El sabor es extraño, pero terminas acostumbrándote. Para mí lo más difícil era el olor que desprende cuando te estas duchando.

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La única cosa mala que puedo decir al respecto es que no había ascensor. Pero también os digo que no me parecía un hotel excesivamente grande asique era un poco innecesario. Nosotras llegamos tarde y con las maletas a tope ya que íbamos de un lado a otro y por eso se me quedo como negativo, pero no es exagerado.

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Por si os interesa os dejo unlink directo a mi blog de Islandia, por si os puede ayudar a organizar mejor vuestro viaje o añadir algun lugar que no teniais.

Espero que os haya servido de ayuda y cualquier cosa no dudeis en dejar un comentario estare encantada de ayudaros en todo lo que pueda.

¡A disfrutar!