En la universidad en la que estudio es normal ver a muchos estudiantes de intercambio que vienen a conocer México por uno o dos semestres, pero es aún más común recibir extranjeros que pasarán sus cinco años universitarios viviendo en México, en específico en la bellísima ciudad de Querétaro. La mayoría de los extranjeros que se quedan a vivir en Querétaro por una larga estancia son latinoamericanos y si a alguno de ellos les mencionas María y su Bici podrás ver un destello en los ojos porque seguramente fue uno de los primeros restaurantes donde se deleitaron de la verdadera comida mexicana. Hoy en día es común verlos llevando a sus padres o familiares que los vienen a visitar, Mariá y si bici siempre será una excelente opción que no te defraudará si es que quieres conocer la verdadera comida mexicana.
(¡Bienvenido a María y su bici! )
Por si no lo sabías, la comida mexicana fue declarada como patrimonio cultural inmaterial en el 2010, en especial por los moles oaxaqueños, las sopas, las tlayudas y los chapulines. Todo eso lo podrás encontrar en María y su bici sin la necesidad de transportarte tan lejos.
Otro ejemplo de una tlayuda.
Un menú muy mexicano (y muy variado)
Cuando la gente viene a México lo primero que piensa es en tacos. Tacos de arrachera, pastor, bistek, suadero, morcilla, en fin… hay muchísimos! Aunque definitivamente esta es la comida mexicana que todos conocemos, hay platillos que corresponden a un estado de la república mexicana y es muy difícil encontrarlos en otro lado. María y su bici es una mezcalería que se especializa en la comida oaxaqueña, que por cierto es de las más ricas.
El diseño del menú es bastante original, ya que lo ponen en unos cocos y lo unen con un lazo, como se puede apreciar en la foto.
Las sopas (esperen, ¿insectos en la comida? )
En México acostumbramos mucho a comer sopa. La sopa es un alimento que comemos casi todos los días a la hora de la comida, es una especie de caldo diluido con agua y puede haber sopas de lo que tú quieras. Usualmente, una de las más conocidas es la típica sopa de tortilla, el caldo de pollo o la sopa de pasta, pero en este restaurante hacen sopas que uno como mexicano no tiene el gusto de saborear todos los días. Una de ellas es la sopa de frijol (o habichuelas, para entendernos mejor), la sopa de guias de calabaza y el típico pozole mixteco con mole negro. El mole es una comida mexicana típica, pero es originaria del estado de Oaxaca, donde lo preparan de mil maneras diferentes. Ahora, si lo que te interesa es comer algo nuevo, algo bastante exótico puedes empezar con la sopa de chapulines. ¿Chapulines? Sí, me refiero a los insectos que saltan y que en las noches no te dejan dormir.
Las sopas suelen servirse en platos hondos como estos, son iguales a los del cereal.
Si te gustaron los chapulines y quieres algo aún más exótico, te invito a probar el caldo de insectos ancestrales. Este caldo tiene chicatanas, chapulines, tantarrias, gusano de maguey guisado con chile seco y hierba santa. Las sopas anteriores no pasan de $ 95 pesos mexicanos (aproximadamente $ 4. 76 dólares americanos), pero ésta última es una obra maestra del restaurante, así que te saldrá en $ 135 pesos mexicanos, que vendrían siendo $6. 77 dólares americanos.
Si quieres seguir probando cosas nuevas pero no te atrae mucho la idea de los insectos, pueden probar un caldo de pollo (“Caldito de Pollo, pal malito”), un chichillo (sopa de res con chile costeño y verduras), un caldo de piedra (de pescado con camarón y con piedras del río adentro) o un “Caldo Amarillito”, que tiene carne de res y está picoso por ser cocinado en chile amarillito. ¿Quieres que sigamos con lo exótico? Realmente lo único exótico de los siguientes caldos sólo está en el nombre. Por ejemplo, ¿te espanta la idea de comer un “Caldo de ombligos”? ¡No deberías de estar tan espantado! Este manjar tiene calabaza y bolas de masa. Y el “Caldo de Gato Oaxaqueño” no tendrá ningún felino adentro, tendrá carne de pollo, de puerco, de res y unas cuantas verduras.
Tengo una confesión que hacer, realmente yo nunca he probado la sopa de grillos o el caldo de insectos ancestrales. No es algo típico en el día a día de la comida mexicana, pero es comida tradicional de ciertos lugares de la república mexicana. En alguna ocasión probé los chapulines, pero no en sopa, realmente saben ricos. La primera vez que los probé fue en un festival de paella, donde una de las paellas concursantes tenía chapulines, si quieres saber más o menos a qué saben, saben a pollo. Aunque el sabor era bueno, no me gustaría repetir la experiencia porque al menos para mí fue difícil seguir comiendo al sentir las patas del insecto en mi boca, fuera de eso el sabor fue espectacular.
El ambiente es cien por ciento mexicano y siempre hay muchísima gente, que te tratará tan bien como si te conociera de toda la vida. En María y su bici también puedes comprar artesanía 100 % mexicana, desde joyería, hasta ropa y unos cuantos adornos.
¡Nada mejor que probar el mezcal en una mezcalería!
Una de las cosas que debes probar si vienes a México es el mezcal. El tequila es otra de las bebidas alcohólicas de México que son bastante conocidas a nivel mundial, así que no importa de dónde seas, estoy segura que al menos el tequila ya lo habrás probado unas cuantas veces.
En México tenemos el siguiente dicho: “Para todo mal, mezcal. Y para todo bien, también”. Siempre habrá una muy buena razón para probar esta bebida. El término de mezcal, viene de una antigua lengua mexicana: el náhuatl, y quiere decir “maguey cocido”. Esta bebida se produce a partir de una planta llamada maguey (o también del agave), ésta planta es originaria de México, es por eso que esta bebida es tan importante y tan tradicional. ¡Esta bebida es tan antigua, que investigadores han encontrado que nuestros antepasados lo producían desde hace 2500 años!
El mezcal se produce a partir de diferentes tipos de maguey, dependiendo de éste dependerá la versión el mezcal que se produzca y por lo tanto su sabor. Actualmente, de los 31 estados que tiene la República Mexicana, el mezcal sólo puede producirse en 9 de ellos, por lo que encontrar una buena mezcalería es cada vez más difícil, pero por suerte estás leyendo sobre María y su bici.
Así sirven un mezcal y una sopa.
¡Un gusano al fondo de mi botella!
El mezcal se produce a través de la destilación del maguey, usualmente en cada botella se puede encontrar un gusano hasta el fondo. Este gusano realmente es una larva que se encuentra en el agave desde donde se obtiene el mezcal. Unos dicen con el gusano el mezcal adquiere un sabor diferente, otros dicen que es realmente una estrategia de marketing, pero sea como sea, debemos admitir que es algo bastante original y para muchos asqueroso.
Debes de saber que no sólo se le pueden agregar gusanos, también puedes encontrar crema de café, cedrón, frutos, hierbas y hasta un alacrán. Esta bebida se considera mística, espirituosa y especial, tanto así que se exporta a veinte países.
Para poder fabricar el mezcal, necesitan el corazón del agave al que muchos conocen como piña del agave. Esta bebida que de seguro te la tomarás en pocos segundos, puede tardar hasta ocho años en hacerse, ya que eso es el tiempo que le toma al agave para llegar a su madurez. El agave parece una planta de marihuana muy grande. En tiempo de cosecha se le cortan todas las hojas dejando sólo su corazón, que se cuece y se muele para fabricar el mezcal. Si les interesa mi opinión, a mí realmente no me gusta el mezcal porque tiene un sabor a quemado o ahumado por el cocimiento de las piñas y hasta un toque de tierra, debido a las barricas.
En María y su bici vas a tener muchas opciones para escoger. Puedes pedir el “Mazunte”, que es mezcal con guayaba y curazao; “Istik” es una combinación muy interesante porque combina raspado de sabores con un toque de mezcal. Para los que no sepan que es un raspado, es una especie de bebida fría que te quita el calor, se hace raspando el hielo y agregándole un jugo. Un mezcal que se me hace súper exótico y para muchos poco apetecible es el “Azteca” porque tiene chocolate y chile. Si es difícil imaginarse una bebida alcohólica con chocolate, será más difícil imaginar ponerle chile también.
El mezcal “Zapoteco” viene con zapote, que es una fruta tropical de México. Si quieres terminar con una combinación de mezcal súper completa, puedes animarte por pedir el “Campiña” que tiene toronja, lima, naranja, refresco de toronja, hielo, sal de gusano y burrito de mezcal. Toda una delicia hecha a base de ingredientes que imagino que nunca has escuchado en tu vida.
En los postres también hay tradición
Cuando uno viene a comer a María y su bici tiene que esperar que todo en la carta sea algo nuevo, exótico, típico, delicioso y que nunca hayas probado. Muchos restaurantes de comida típica pueden dar batalla con la comida, pero en los postres terminan vendiendo el típico flan, gelatina, pie de queso o arroz con leche. Aquí no pasará eso porque también en los postres encontrarás el toque oaxaqueño que tanto estabas buscando.
¿Te apetece probar los dulces típicos de Oaxaca? Anímate a pedir un casquito, pan de yema, mamon, jamoncillo, nenguanito, nicuatole y hasta el corazón de maguey. Ahora, si sientes que no tuviste suficiente mezcal, puedes pedir “El mezcalero”, un dulce a base de mezcal. Otra cosa típica no sólo de Oaxaca sino de México es el “atole”, que se prepara con leche y tiene una consistencia más cremosa. También puedes pedir el “Beso oaxaqueño” que se prepara utilizando la crema de mezcal.
En este restaurante puedes pedir una variación, que decidieron ponerle “Nicuatole”, en el que no sólo lo cocinan con leche sino aparte le adicionan más masa hasta que se cuaje. Ese ya lo he probado y es una delicia. Muchos postres de María y su bici son únicos del restaurante, experimentos y recetas familiares tan ricas que duraron generaciones. Si eres chocolatero puedes pedir el “Volcán”, que es un panqué de chocolate artesanal de origen oaxaqueño con helado al centro. El probar algo caliente que a la vez tiene algo helado, le da un toque único al postre.
¿Y para beber qué podemos pedir? ¿Sólo mezcal?
En María y su Bici siempre podrás encontrar miles de opciones tanto mexicanas como estándar, todo depende del humor en el que te encuentres. Puedes pedir el refresco que te encontrarás en tu país, como la Coca Cola, aunque aquí también son diferentes porque las hacemos con azúcar de caña.
Anímate a pedir muchas de las “aguas de María” que están hechas de tantos ingredientes que hasta unos ni siquiera los conozco, como la chaya y téjate. Los que sí conozco y son unas delicias mexicanas es el agua de Jamaica, el agua de lima, de horchata y de chía (una semilla que mejora la digestión). En general podría decir que las aguas son de México porque en los otros países no existen, o toman agua natural o consumen zumos concentrados de fruta. Un agua fresca de sabor podría decirse que es el punto medio entre agua natural y un zumo concentrado de naranja, es mucho más diluida.
Puedes pedirte un rico rompope o un tepache, que es aguardiente de caña, una bebida que era nativa de nuestros indígenas pero durante la conquista española fue prohibida para ellos por su contenido de alcohol. También puedes pedir las cervezas nacionales, las más conocidas en México y algunas en todo el mundo, como la cerveza Indio, Bohemia Clara o Oscura, una Tecate Roja o Light, Corona o una XX Lager. Si te gusta algo más artesanal, puedes pedir la carta de cervezas artesanales elaboradas en Querétaro, donde te puedes encontrar una IPA, una Pilsner, una Lager o una Stout.
También puedes pedir un té de cáscara de cacao o el famosísimo café de olla, éste café de origen oaxaqueño es muy diferente a todos los que has probado, te lo aseguro. Muchos suelen amarlo u odiarlo porque está un poco más diluido que el café normal, está echo en una olla de barro mexicana por lo que le da un toque más de “pueblo”. Muchos a los que no les gusta es porque dicen que sabe a agua sucia con un toque de café, pero siento que para todo hay gustos y si estás de visita en México definitivamente deberías probarlo.
El mejor lugar para probar “tlayudas”
Las tlayudas son junto con el mole, el sello de Oaxaca. Tienen aproximadamente 40 centímetros de diámetro en tortilla pero sabe completamente diferente al de una tortilla clásica. Se encuentra ligeramente tostada pero al mismo tiempo es suave y crujiente. Generalmente se le pone carne de puerco, quesillo (queso oaxaqueño), col, cebolla, tasajo y no podría faltar el toque característico de todo México: la salsa.
Así de ricas se ven las tlayudas. Creéme que con una sola te llenas!
¿Pero por qué se llama María y su bici? ¿Quién es María?
María es nada más y nada menos que la fundadora de estas delicias. La historia de María es muy linda porque desde muy pequeña tuvo que tomar las riendas del hogar para ayudar a su madre a hacer la comida. Después fue dirigida por Don Isaías, ayudando a su familia para sobrevivir, sobre todo a su hermano Roberto al que le tocaba vender la leche, afortunadamente regresaba sin leche, pero también sin dinero! Porque se la regalaba a la gente pobre.
Debido a tanto tiempo de práctica en la cocina y desde que María era muy pequeña, mejoró mucho todos sus platillos, sobre todo las tlayudas, moles, platillos con chapulines, leche bronca y demás. Fue hasta muy poco cuando Doña María se trasladó a la ciudad de Querétaro para crear un lugar de degustación donde pudiera poner a prueba todos los legados Oaxaqueños que le dejó su familia: su abuela mamanilla, su madre Ana y su padre Don Isaías. Como podrán darse cuenta, María es amante de sus raíces y sus sueños, e intentó replicar con éxito la comida de su pueblo natal.
¡María y su bici presente siempre en tu "jolgorio"!
En México, le decimos jolgorio a cualquier tipo de celebración. Si te gustó mucho la cocina y la comida de María y tu bici, puedes cotizarlo en su página de internet. Ellos están dispuestos a ir a tus eventos más especiales como bodas, bautizos y hasta cosas más familiares como una comida, un cumpleaños o una entrega de anillos.
Datos curiosos de María y su bici que te enamorarán más
- No importa si vas con toda tu familia, siempre estarán listos para recibirlos a todos. Tienen mesas de hasta 8 metros donde pueden caber hasta 45 personas.
Te puedes dar cuenta de lo grande que son las mesas, cabe toda tu familia y hasta puedes conocer a más.
- Hay juegos para todos los chiquitos, por si es que deciden ir los nietos, los primos y los amigos.
- Tienen espacios acondicionados para personas con capacidades diferentes.
- En México tenemos algo que se llaman “hamacas”, se pegan a los árboles para poder descansar elevado a unos centímetros del suelo y mecerte para echarte una buena siesta sin ser juzgado.
- Tienen un patio acondicionado para 150 personas y hay muchos hoteles tipo boutique cerca de ellos donde te puedes quedar con tu familia.
- Hay cuatro estacionamientos públicos a menos de una cuadra donde puedes dejar tu carro, pero si vienes en bici puedes dejarlo en su estacionamiento gratuito.
- Si llevas niños puedes estar tranquilo porque hay niñeras contratadas para cuidarlos y jugarán con ellos juegos mexicanos típicos para no perder la cultura.
- El ambiente es increíble porque siempre habrá música mexicana muy típica.
El ambiente es tan agradable, que mi abuelita disfruta mucho ir con sus amigas a probar la verdadera comida mexicana que pocos saben hacer.
¡Ya quiero ir! ¿Cuál es su horario?
¡María y su bici abre todos los días! Los mexicanos somos bien trabajadores y un negocio tan mexicano como este debía de poner el ejemplo. Abren desde la 1 pm hasta las 12 de la mañana. Los domingos tienen desayunos, por lo que abren desde las 9 de la mañana pero cierran más temprano, como a las 7 de la noche.
¿Dónde se encuentra María y su bici?
María y su bici se encuentra en la Calle 5 de Mayo #91 en el Centro de la Ciudad de Querétaro. Así que si estás de visita por México no solamente comerás una deliciosa comida mexicana, sino que también conocerás el centro histórico de Querétaro, que se considera como Patrimonio de la Humanidad ya que vio acontecer hechos históricos en México, sobre todo de la independencia.
No será difícil encontrar María y su bici cuando veas esta enorme bicicleta de hierro en la calle. Mi amigo de Costa Rica llevó a su madre cuando vino de visita a Querétaro y no dudamos llevarla a María y su Bici, donde probó de todo y le encantó!
