Un día en Bérgamo

Una ciudad especial para conocer fuera de los destinos turísticos más visitados es sin duda Bérgamo y en particular la antigua y monumental ciudad alta , una joya encastrada en la colina en una localización espectacular a la puerta de los Alpes y de los dos famosos valles bergamascos: val Brembrana y val Seriana.

Un día en Bérgamo

Al ser una gran ciudad si puede llegar a ella de múltiples formas, aconsejo en concreto el itinerario en tren con la línea S9; porque aunque no es la alternativa más rápida (hace bastantes paradas y tarda como una hora) este tren os lleva a través de los lugares más bonitos de la Brianza enmarcada en los paisajes de la montaña. En concreto, para en la espléndida Monza, sobrepasa la profunda garganta del Adda a través del viejo puente de hierro San Michele, bordea la bella montaña de Sotto il Monte y finalmente llega hasta la ciudad baja.

La ciudad baja

Saliendo de la estación veréis justo en frente una larguísima y extensa avenida y al fondo la magnifica vista de la ciudad alta en todo su esplendor. Asi que, deteneos un momento para ver las dos estaciones de tranvía antiguas y los valles bergamascos, desde un lado de la plaza y comenzad después a andar por la avenida. A lo largo de la calle encontraréis numerosos edificios y monumentos interesantes de la ciudad baja como el Piazzale degli Alpini, la Porta Nuova que queda como testimonio de la antigua muralla de la ciudadela, la Torre a los caídos y, en la primera calle paralela a la derecha, las dos bellas plazas Dante Alghieri y de la libertad.

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Subida a la ciudad alta

Una vez llegados al final de la avenida, en la base de la colina, hay dos posibilidades para subir a la ciudad alta. La primera de ellas sería la de subir de forma sencilla y emocionante con el funicular histórico que os llevará hasta la 'Plaza del Mercato delle Scarpe'. La otra forma es utilizar una de las tantas escaleras de piedra que serpentean entre los jardines hasta llegar arriba del todo; en particular aconsejo la escalera que encontraréis en un lado de la plaza que está en frente del funicular y que os conducirá hasta la panorámica de Porta San Giacomo.

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La muralla veneciana

Declarada hace poco patrimonio de la humanidad por la UNESCO, esta ciudad posee una muralla del siglo XVI protege incluso hoy en día perfectamente intacta toda la ciudad alta, con numerosos bastiones y dotada de algunas puertas bonitas. Para poder disfrutar mejor del paisaje que ofrece os aconsejo en particular pasear a lo largo de todo el lado sur, mirando hacia la ciudad baja y hacer una parada en las puertas de Sant'Agostino (con un monasterio al lado con el mismo nombre), San Giacomo y Sant'Alessandro.

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La ciudad alta

Presentar al detalle todas las maravillas de la ciudad alta sería imposible, por lo que me limitaré a dar un elenco de los sitios de mayor interés que no os podéis perder.

La roca de Bérgamo

Situada en el punto más alto de la ciudad alta, esta histórica roca tuvo en el pasado múltiples funciones y ahora alberga el Museo histórico del 'ottocento'. Recuerdo que me gustó mucho el jardín de la roca y admirar entre sus bastiones toda la ciudad alta con sus numerosas torres y las montañas al norte.

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Piazza vecchia

Sin lugar a duda, el lugar más espectacular de la ciudad alta es la plaza principal que tiene realmente mucho que ofrecernos: podéis subir a su torre del Campanario, visitar el neoclásico Duomo y la gótica Basílica de Santa Maria Maggiore con su Capilla Colleoni, quedaros a la sombre del pórtico del Palazzo della Ragione con un reloj de sol, refrescaros en la Fontana dei Contarini que fue desenterrada hace pocas décadas y visitar la maravillosa Biblioteca Angelo Mai. ¡Tomaos todo el tiempo que necesitéis!

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Plaza de la ciudadela

Al fondo de la VIa Bartolomeo Colleoni encontréis la gran ciudadela de Bérgamo, en la cual están presentes un par de museos. Desde fuera es interesante ver la torre del reloj y las balconadas presentes. A penas saliendo de la ciudadela por donde está el restaurante Hostaria, os aconsejo echar un vistazo dentro de los antiguos restos de la muralla romana de la ciudad entre los cuales hay mesas; si después queréis además probar este local prestigioso mejor todavía.

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Qué comer en Bérgamo

A propósito del restaurante, en cuanto a la comida local os aconsejo como pasta probar los casoncelli alla bergamasca, mientras que como postre podéis entrar en una de las tantas pastelerías históricas y coger la particular versión dulce de la polenta, osei.

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Il castillo de San Vigilio

Saliendo por la Puerta Sant'Alessandro es posible tomar un segundo funicular o la calle de al lado para ir al Castillo de San Virgilio, situado un poco más arriba sobre la cima de la colina. Desde aquí se puede disfrutar de su jardín y admirar el casco antiguo desde arriba asi como el resto del paisaje entre llanuras y montañas.

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Compras en la ciudad

Para concluir la visita se puede siempre hacer unas compras de calidad en las calles de Borgo San Leonardo, uno de los zonas de la ciudad baja, en concreto a lo largo de la via Sant'Alessandro y via XX Settembre.

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