La gastronomía francesa: platos típicos en Francia

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La gastronomía francesa es conocida en todo el mundo por su calidad, refinamiento y variedad. El patrimonio culinario de Francia es inmenso, existen innumerables platos típicos. Algunos platos son relativamente caros y poco frecuentes. Por ejemplo, podemos hablar del foie gras, el caviar francés o las trufas, que no se comen todos los días, sino en días festivos, como la Navidad. Como las regiones son muy diversas, hay muchos productos diferentes. Por ejemplo, hay muchos ostricultores en la bahía de Arcachón o en Normandía. Desde el extranjero, a menudo tenemos el tópico de que los franceses comen ranas y caracoles. Cuando, en realidad, se comen muy raramente y muchos franceses ni siquiera los han probado jamás.

Otro producto fundamental de la cocina francesa es, por supuesto, el queso. Es imposible dejar de probar este producto, del que existen entre 1000 y 3500 variedades diferentes. Es muy típico comerlo con un buen pan, ya sea una baguette o un pan especial, todo ello acompañado con buen vino, a menudo un tinto. ¡Esta combinación mágica es probablemente una de las mejores cosas que Francia tiene preparadas para ti!

La gastronomía francesa se compone de innumerables platos y productos que hacen que la cultura francesa brille por todo el mundo.

Aquí tendrás un vistazo a los mejores productos de las distintas regiones francesas. Te sorprenderá la diversidad de platos que existen en Francia, incluso verás que no es lo mismo comer en el norte que en el sur de la región francesa.

Descubre los 3 productos insignes de Francia: el queso, el vino y el pan. ¿Quieres saber más sobre su historia, los diferentes tipos o la forma de comerlos? Pues lo mejor que puedes hacer es seguir leyendo.

Por último, te dejaremos una lista de 15 platos típicos franceses con una breve descripción de cada uno de ellos. ¡Después de esto, puede que quieras cocinar a la francesa!

Francia es un país con una amplia gama de especialidades culinarias regionales. No comerás exactamente lo mismo si estás en el norte o en el sur. En Bretaña, los crepes y las galettes (o tortitas) de sidra son imprescindibles, así como un tipo de conserva como el caramelo de mantequilla salada y la tarta far breton. Mientras que en el norte, las especialidades son el filete de arenque ahumado, los quesos maroilles, la cerveza y las frikandel compradas en la tienda de patatas fritas. En el este, son parte del tesoro gastronómico local los pretzels, el chucrut y el flammekueche. En el sur, los productos estrellas son la sopa bullabesa, la pasta tapenade, la sopa al pistou y el licor llamado pastis. Y, finalmente, en el sudoeste, el magret de pato, el foie gras, el pimiento de Espelette y el jamón de Bayona ocupan el puesto de honor.

• El queso

Existen al menos 1000 tipos de quesos diferentes; exquisiteces que son apreciadas, por supuesto, en Francia, pero también en el extranjero. Cabe destacar que, de media, cada francés consume al rededor de 24 kg de queso al año, lo que hace que esta población sea la segunda mayor consumidora de queso del mundo. En materia de quesos, cada región de Francia tiene sus propias especialidades.

En Saboya, por ejemplo, la leche se usa para hacer un queso lo más grande posible que dure todo el invierno. En esta región se permite a las vacas disfrutar de sus pastos y montañas, y de las condiciones excepcionales de la naturaleza. Todo para elaborar deliciosos quesos, como el Beaufort, el de manzana de Saboya o el Reblochon, ingrediente estrella de la Tartiflette.

En el norte, hay una gran variedad de quesos, pero el más conocido es un queso especialmente fuerte llamado maroilles, que se come con tarta, o que incluso, según dicen, se puede comer mojándolo en el café. También se puede mencionar el Bergues y el Pavé de Roubaix.

En Normandía hay una verdadera tradición agrícola, pero, sobre todo, de quesos. Allí a la gente le encanta especialmente el queso blando. Uno de los quesos más famosos de Francia es el Camembert. Pero, además de este, están el Livarot y el Pont-l'Evêque, ambos de corteza lavada.

Por otra parte, las regiones del sur no se quedan al margen. Por ejemplo, si te da por pasar tus vacaciones en Provenza, podrás probar, además de la tapenade y las aceitunas, el tomme de brebis d'Arles, un queso de cabra hecho a la antigua usanza; o el Banon, otro tipo queso con mucho carácter.

• El vino

Como ya sabrás, los franceses son los mayores consumidores de vino del mundo y, de hecho, lo consideran parte de su patrimonio cultural. Es uno de los productos más conocido fuera de Francia.

En gastronomía, el vino no se elige al azar, de hecho, los chefs seleccionan un vino diferente en función de cada plato. Para que la vid crezca, deben darse condiciones especiales, por lo que el vino no se puede fabricar en cualquier parte; tiene que haber mucho sol, las temperaturas deben ser suaves y secas, y el suelo no debe ser demasiado absorbente. Los viñedos más famosos son los de Burdeos, los de Beaujolais, los de Loira, los de Valle del Ródano, los de Languedoc-Rosellón, los de Provenza y los de Alsacia.

Hay varios tipos de vino: el tinto, el blanco, el rosado, el muté y el famoso champán, que se sirve en los eventos sociales de todo el mundo. A su vez, hay subcategorías: secos y fuertes, dulces, licorosos, etc. Puedes inscribirte incluso a cursos de cata y enología en toda Francia para aprender más sobre el vino y cómo reconocerlo (el precio medio es de 50 euros).

Cuantos más años tengan las botellas de vino, más caras son. ¡Hay algunas botellas que pueden llegar a costar hasta 14 000 €! Tranqui, que si tan solo quieres comprar vino para probarlo, en las tiendas el precio oscila entre los 4 € y los 8 €. Acompáñalo con un poco de queso y verás lo delicioso que está.

• Las panaderías

Hablemos un poco de las panaderías. En las panaderías se venden varios tipos de pan, pero el producto estrella es la baguette. También se pueden comprar pastas y viennoiseries típicas francesas, muy deliciosas, por cierto. No puedes irte de Francia sin probar la tarta de limón y merengue, el éclair de chocolate (o de café) o el Paris-Brest, que te harán la boca agua. Al salir a la calle, podrás disfrutar de buena mañana del olor a cruasán y pain au chocolat (también conocido como chocolatine en la zona de Toulouse, este tema es delicado).

Si quieres probar el típico desayuno francés, pásate por cualquier panadería de tu ciudad y pide un cruasán (¡o dos si ves que te quedas corto!); siéntate cómodamente en la terraza, disfruta el sol y acompaña tu desayuno con un buen café y un zumo de naranja recién exprimido. Lo único que tienes que hacer es disfrutar.

Los 15 mejores platos y especialidades de la gastronomía francesa

Ahora te vamos a dar una breve lista de 15 platos franceses para que te hagas una mejor idea de la cocina francesa.

Boeuf bourguignon

El boeuf bourguignon es un plato tradicional de domingo originario de Borgoña. Es un plato de carne de vacuno en vino tinto de Borgoña, acompañado de setas, cebollitas y panceta. Hay muchas variantes de este plato con, por ejemplo, patatas, zanahorias, judías, pasta, etc. Perfecto para las comidas de invierno con la familia y los amigos.

Blanquette de veau (guiso de ternera)

¿Te apetece un plato delicioso con textura cremosa? Pues la blanquette de veau te va a encantar. Se prepara con ternera hervida, zanahorias y salsa de mantequilla. ¡Realmente exquisito!

Ratatouille

La ratatouille, un tipo de pisto, es una especialidad culinaria de Niza y Provenza, a base de verduras como: berenjenas, calabacines, pimientos, tomates, así como cebollas, ajo, aceite de oliva y especias, todas cortadas en rodajas o cuartos y cocidas. Es un plato para los amantes de las verduras o los vegetarianos, sin embargo, también se puede servir como guarnición.

Quiche lorraine

La quiche lorraine es una tarta salada hecha de pasta quebrada rellena de una mezcla de huevos, nata fresca, pimienta y nuez moscada, así como de panceta ahumada. Se suele comer caliente como entrante, y, cada vez más a menudo, como aperitivo.

Pollo a la vasca

El pollo basquaise es una especialidad culinaria tradicional del País Vasco. El pollo se cuece a fuego lento en una salsa de pimientos, tomates y cebollas troceadas, con ajo y vino blanco, además se le sazona con sal, pimienta y pimiento de Espelette. ¡Tremendo!

Foie Gras

El foie gras es un plato tradicional francés elaborado con hígado de pato o ganso. Tradicionalmente se come frío como aperitivo, sobre todo durante las comidas especiales como Nochebuena y Nochevieja. Si quieres disfrutarlo todavía más, acompáñalo con pan de jengibre y mermelada de higo o cebolla.

Hachis parmentier

El hachis parmentier es un plato elaborado con puré de patatas, carne picada y nata. Es un plato que combina una textura suave y un placentero sabor que harán las delicias de tu paladar.

El gratin dauphinois o gratinado delfinés

El gratin dauphinois es un plato francés de origen delfinés, a base de patatas y leche. Es un clásico de la gastronomía francesa y, aunque la receta es supersencilla, igualmente es un placer comerlo.

Tartiflette

La tartiflette es un gratinado de patatas, beicon y cebolla sobre el que se funde el Reblochon, un queso de la región de Saboya. Es un plato que se suele comer en invierno. ¡Es una delicia!

Caracoles de Borgoña

Los caracoles de Borgoña son una especialidad tradicional de Borgoña. Se suele servir en ocasiones especiales como cenas familiares y en Nochebuena. Los caracoles se presentan horneados en sus cáscaras con mantequilla de ajo y perejil picado. ¡Tienes que probarlos!

Croque-monsieur

El croque-monsieur es una especie de sándwich caliente con pan molde, jamón y queso, normalmente emmental, gratinado en la sartén o en el horno. Se puede comer como principal con ensalada o como tentempié en una tienda de sádnwiches.

Ancas de rana

Aunque la mayoría de los franceses probablemente nunca las haya comido, es una de las especialidades francesas más famosas. Al igual que los caracoles, suelen cocinarse con ajo y perejil.

Te recomiendo además que pruebes un par de postres típicos de este país.

Crème brûlée

La crème brûlée o crema caramelizada es un postre a base de yema de huevo, azúcar, nata, vainilla y caramelo. Una vez fría, la parte superior se carameliza con la llama de un soplete, al grill o flameándolo. templado o frío, se sirve en un recipiente alto con la corteza caramelizada por arriba, que está caliente y crujiente.

Macarrón

El macarrón es un pequeño pastel blando con forma redondeada, de alrededor de unos 3 a 5 cm de diámetro. Es un tipo de merengue que se elabora con polvo de almendra, azúcar glas, azúcar y claras de huevo. A continuación, se coloca la masa en una bandeja de horno y se hornea. Los mejores macarrones que se pueden comer son los de Ladurée, pero desgraciadamente solo lo encontrarás en París.

Crepes

La crêpe es una especialidad francesa que consiste en una capa muy fina de masa, elaborada con harina, huevos, leche y azúcar. La crepe se cocina en una sartén especial para crepes o en una sartén normal. Puede comerse caliente o fría, dulce o salada, como plato principal, como postre o simplemente como tentempié. Se sirve tal cual, con un aderezo o rellena. Se puede comer en casa o en un restaurante, incluso se puede encontrar en los supermercados o en eventos festivos, como las ferias de atracciones.

¡¿Cómo no te va a hacer la boca agua?!

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