Gofres y barquillos

¡Hola, gente! ¡Espero que estéis pasando un buen día!

Hoy quiero hablaros de esas cosas que pueden ser de diferentes chocolates, sin chocolate y cosas por el estilo. La pregunta es: ¿gofres o barquillos? Mientras pensáis la respuesta, os hablaré un poco de ellos.

Gofres

El gofre es una masa que se cocina entre dos planchas; tiene cuadrados en la masa y por eso hace que la forma de los gofres sea tan distinguida. Se dice que a los belgas les encanta los gofres y que tienen varios tipos de estos. Supongo que por eso se conocen por todo el mundo como gofres belgas. Hay planchas y recetas especiales para prepararlos y utilizan diferentes tipos de complementos para comérselos. Están sabrosos, pero, para mí, la masa es normal y me recuerda a la de las tortitas, que no me gustan mucho. Sin embargo, a mucha gente sí les gusta y se mueren por comerse uno. Les gusta tanto como las tortitas y cocinarlas por las mañanas. Les gusta comer tortitas y gofres para desayunar y añaden diferentes complementos: azúcar de pastelería, caramelo, sirope de chocolate, algo de fruta como fresas y arándanos, miel y mermelada. Para seros sincera, si tenéis una gofrera, podréis preparar gofres en lugar de tortitas. Sin embargo, si me preguntáis a mí, diré que la masa es la misma.

Hay un puesto en Batumi Boulevard cerca de Batumi Pier donde una chica prepara gofres belgas con chocolate y esas cosas y había cola para pedir uno. Creo recordar que costaba 3 laris y estaba dispuesta a pagarlos porque quería probar uno de esos gofres. A pesar de eso, me di cuenta de que la chica tenía que prepararlos y tardaba un tiempo en preparar uno. Me fijé en toda la gente que había en la cola, cambié de opinión y decidí tomar un helado cerca de allí, ya que no quería esperar para comerme un gofre. Sin embargo, un chico nos dijo que los gofres estaban deliciosos y que valía la pena probarlos. No obstante, no quería esperar tanto, así que decidí probarlos en otro momento y fuimos a la heladería; tenían bolas de distintas clases de helado.

Ingredientes:

• 2 tazas de harina común
• 1 taza y ¾ de leche
• 2 huevos
• ½ taza de aceite
• 1 cuchara de azúcar
• 4 cucharadas de levadura en polvo
• Una pizca de sal
• Vainilla

Proceso de preparación:

Para ser realistas, no hace falta hacer mucho esfuerzo para prepararlos porque solo necesitáis una batidora y una gofrera. Tenéis que mezclar todos los ingredientes y después poner la mezcla en la gofrera precalentada y untada con aceite. Tenéis que hornearlos hasta que tengan un color dorado y tenéis que servirlos en caliente. Podéis elegir si queréis complementos y cuáles queréis. Sin embargo, eso es todo lo que hay que hacer para preparar unos gofres y, como he dicho, son como las tortitas, pero con otra forma. Si soy sincera, podéis hacer tortitas sin ningún esfuerzo o también podéis hacer las tortitas rusas que se conocen como "Blini". A mi hermana le gustan esas y mi madre se las suele preparar. Son como las tortitas pequeñas y se preparan sin ninguna dificultad, ya que no tienen muchos ingredientes y es un buen desayuno con un poco de mermelada y cosas por el estilo. Sin embargo, no me gustan mucho, así que prefiero unos muffins para desayunar, comer o lo que sea. Personalmente, me gusta el dulce Gata y cuando lo veo por ahí, no puedo resistirme a comprar uno. Hay uno que se conoce como "Gata de Armenia" que está delicioso y me encanta. Mi tía solía prepararlo cuando éramos pequeñas y me moría de ganas por probarlo.

Barquillos

En todo caso, pasemos a los barquillos que son mis favoritos y me gustan muchísimo. Me gustan tanto que cuando no tengo nada que hacer o estoy haciendo cosas en casa, bajo al supermercado y los compro porque necesito comer unos cuantos. Cuando voy a comprarlos, hay de varios tipos y todos son geniales; unos son marrones y otros son blancos con chocolate. Esos son los que busco cuando voy al supermercado, pero también podría probar otros diferentes. Esa vez cuando fui a comprarlos, se habían agotado los marrones y no pude hacer nada, pero también había otro tipo de barquillos marrones con cacao. En ese caso, cogí uno de cada. También tienen barquillos blancos con crema de chocolate en el centro y me llevé unos cuantos. Si queréis saberlo, tenía la cesta llena de todo tipo de barquillos, pero en mi casa también comerían. Si no se los comen, me los comeré yo poco a poco; algunos hoy, otros otro día y así. No tienen un precio muy alto, es decir, algunos son más baratos que otros y está muy bien. No podía esperar a llegar a casa, así que cogí un poco de cada y los probé de camino. Sinceramente, me gustaron más los blancos que los que llevaban cacao porque no eran tan dulces. Los marrones eran muy dulces y si os coméis uno, ya no podréis comer más. Los barquillos marrones de la marca Roshen estaban agotados. A pesar de estar deliciosos, son muy dulces y no se puede comer muchos. Sin embargo, a mi primo y a mi hermano les encantan y comen muchos cuando compramos.

Supongo que a mucha gente le gusta las barritas de chocolate conocidas como Kit Kat. Tienen barquillos en el interior y por eso están crujientes. Me encanta lo crujiente y por eso me gustan los barquillos porque son crujientes y hacen ruido cuando nos los comemos.

Cuando éramos pequeños, nos comíamos estos barquillos rellenos de crema y cubiertos de chocolate; se llamaban "Prichuda" o algo por el estilo. No lo recuerdo bien. Eran dulces rusos y estaban deliciosos. Además, algunos tenían avellanas y eso hacía que estuviesen más buenos. He intentado probar otros del mismo estilo, pero todavía no he encontrado unos que estén igual de buenos. En los grandes supermercados, donde suelo ir a comprar, no están, pero hay tiendas pequeñas donde puede que sí estén; todavía no he ido a comprobarlo. Como he dicho, los que he comprado no saben como los que solía comer. Sinceramente, no sé si encontraré algunos que estén igual. A pesar de eso, no cesaré la búsqueda para encontrar esos barquillos.

De todos modos, hay un gran centro comercial en Station Square donde podéis comprar muchas cosas. Podéis comprar utensilios para cocinar y también tienen galletas que podéis comprar. Además, podéis comprar cualquier cosa que necesitéis. Así que cuando no quiero cocinar, voy y compro algo de allí. Asimismo, renuevan sus productos cada día porque un día fui a comprar unas galletas para una tarta y solo quedaba un paquete. Me dijeron que estaban esperando los nuevos productos y que esperase unos minutos; así podría preparar la tarta con esas galletas. Es lo que tienen de bueno los supermercados. Gracias a ellos, la vida es más fácil. Los supermercados son perfectos para aquellas personas que quieran cocinar algo, pero no son muy buenas, así que compran productos preparados y no gastan el tiempo cocinando algo que no saldrá bien. Está genial.

Además, también tienen barquillos crujientes, esos blancos que tienen cuadrados pequeños y que se usan para hacer barras de chocolate como el Kit Kat; a la gente les gusta mucho por lo crujientes que están. Hay algunas recetas que explican cómo preparar la crema para el relleno y que no ablande los barquillos. Sin embargo, no he intentado hacerla, aunque puede que algún día lo intente. Ahora solo disfruto de los barquillos que compro rellenos de crema y cubiertos de chocolate. Como sabéis, se venden en los supermercados y están deliciosos. Vale la pena probar esos barquillos y una vez que lo hagáis, querréis comerlos una y otra vez. Sin embargo, están muy dulces y no os podréis comer muchos debido a eso. Así que lo mejor para decidir cuántos barquillos comerse es elegir los correctos, es decir, los marrones son más dulces que los blancos. Además, hay algunos barquillos ya hechos que no están tan dulces y no os llenan tanto. Podéis comprarlos y os aseguro que no están tan mal. Lo digo porque mucha gente no compra barquillos ya hechos porque piensan que tienen menos sabor que los caseros, pero no estoy de acuerdo. Algunas veces los que ya vienen hechos están incluso más buenos que los caseros. Son más ligeros, por ejemplo, porque se emplea aceite vegetal en lugar de mantequilla y no añaden ni huevos ni leche. Por eso, son más ligeros.

Hay diferentes tipos de crema para estos barquillos. Sé de dos que me gustaría compartir con vosotros y son cremas que no ablandan el barquillo y mantiene el efecto crujiente.

Relleno nº 1

Ingredientes:

• 3 cucharas de miel
• 1 taza de nueces troceadas
• 4 cucharaditas de cacao en polvo
• 1 taza de azúcar
• 150 gramos de mantequilla

Proceso de preparación:

Añadid las 3 cucharas de miel en un recipiente, añadid las nueces y el cacao en polvo y mezcladlo todo. Después, añadid los 150 gramos de mantequilla y mezcladlo otra vez. Después de eso, poned el recipiente al fuego y cuando esté listo, apagadlo y añadid un poco de vainilla. Finalmente, poned la crema en los barquillos cuando aún esté caliente.

Relleno nº 2

Ingredientes:

• 3 cucharas de harina
• 100 gramos de mantequilla
• ½ lata de leche condensada
• 2 cucharas de nueces troceadas

Proceso de preparación:

Cocinad la harina en una sartén hasta que esté dorada. Mientras, mezclad los 100 gramos de mantequilla en temperatura ambiente con la media lata de leche condensada. Es recomendable que mezcléis primero la mantequilla hasta que esté de color blanco y esponjosa y después añadáis la leche condensada poco a poco. Después, tenéis que añadir las nueces y la harina al recipiente anterior y mezclarlo todo. Si veis que la crema está un poco seca, podéis añadir un poco más de leche condensada. Finalmente, ponéis la crema entre los barquillos. También se recomienda añadir una cobertura de chocolate.

Hay muchos tipos de barquillos y tenéis que elegir sabiamente porque tienen sabores diferentes. La gente también tiene gustos diferentes y cuando se elige un tipo de barquillo, se está eligiendo algo especial. No me suele gustar el relleno blanco, que es de vainilla. Prefiero los barquillos blancos que tienen el relleno marrón y son de chocolate o de chocolate con café. Los barquillos marrones están rellenos de chocolate y si os gusta el cacao, es una buena opción. Sin embargo, son muy dulces y debéis tenerlo en cuenta.

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