¡Hola de nuevo valientes y aventureros/as a los que os gusten los fenómenos naturales peculiares!
El lugar del que os voy a hablar en este post sigue causando mucha intriga en mí y en todos los que lo visitan seguramente, pues parece sacado de una película con temática astronómica, y es que en Lanzarote parece haber una conexión con el planeta rojo.
El Golfo y su misterioso lago verde.
El Golfo, que se encuentra al suroeste de Lanzarote y pertenece al municipio de Yaiza, lo encontraréis siguiendo la carretera de las salinas, la playa del Janubio y los Hervideros, a pocos kilómetros más adelante. Este pueblo sin duda os dejará con la boca abierta y con muchas cuestiones...
Mi primera pregunta nada más verlo fue: ¿Cómo puede ser verde?... Y es que al haber conocido ya la existencia de las olivinas, pues ya relaciono todo color verde con este mineral, pero no es la causa del fenómeno en cuestión.
Esta tonalidad verde la adquiere debido a las algas que habitan en él y al azufre que contienen sus aguas, de ahí la conexión que establecen con el planeta Marte y por lo cual lo están estudiando...
Debido a su riqueza natural y su rareza, este espacio de agua, denominado el charco de los Clicos, ha sido nombrado reserva de la Biosfera, por tanto olvidáos de un baño ahí si sentís la llamada de los poderes radioactivos o volveros mutantes...(este lago no tiene radiación, es sólo una broma).
Pero fijáos el contraste de colores entre las paredes que lo rodean y la playa que lo bordea, este es el aspecto que me enamoró de Lanzarote, la gama cromática que tiene en tan solo unos pocos metros, impresionante sin lugar a dudas.
Os adjunto otra imagen donde se puede ver que justo al finalizar el tramo de arena negra a la derecha se encuentra el mar, aportando otro tono distinto de color a la imagen, de cálidos a frios en tan solo un parpadeo.
Otra de mis cuestiones fue: ¿ Cómo ha llegado hasta ahí ese agua?
Pues no hay restos de marea que haya podido subir desde la otra parte de la playa...Y es que, después de mucho tiempo descubrí que hay una filtración subterránea que conecta este lago con el mar y a eso se le llama hidrovulcanismo y es un fenómeno que ocurre en tramos de poca altitud y del que no había oido hablar en mi vida y por supuesto que tampoco había presenciado, pero aquí con este lago lo entenderéis mejor y además de forma práctica.
Y es que desde la erupción volcánica del volcán Timanfaya en el Siglo XVIII la isla tomó un aspecto tolamente diferente y con el paso del tiempo ha ido adquiriendo este paisaje tan característico.
Unos metros antes del charco de los Clicos tenéis una zona de ensenada donde hay muchos barcos pesqueros, y es que la mayoria de pueblos costeros de Lanzarote se nutren de la actividad pesquera. Podéis bajar por la pared de arena y visitar esta preciosa playa en la que si podréis disfrutar de un baño, pero deciros que corréis el riesgo de adentraros en aguas donde las corrientes son bastante fuertes, asique está en vuestras manos la opción de remojar los pies o arriesgar vuestra existencia.
La visita a este lugar es gratuita y contáis con un parking muy bien señalizado justo en la entrada del pueblo del Golfo, donde veréis de frente un restaurante llamado " El siroco", como el viento.
Restaurante en el cual se come muy bien, y contáis con una gran variedad de platos de frituras de pescado, marisco, especialidad de arroces y tapas. Además cuenta con una terraza que hace las veces de mirador y que es sin duda el mejor lugar para poder disfrutar del mar y de la brisa, mientras tomas un café o una cerveza observando el vuelo de las gaviotas que rondan siempre cerca de la costa.
Y con esta recomendación gastronómica termina el post sobre el Golfo y el charco de los clicos, espero que este lugar peculiar y cientificamente enigmático os haya gustado.
¡Un saludo y a extender las alas por Lanzarote!