Cómo encontrar alojamiento en tu destino Erasmus

¿Cómo encontrar el alojamiento perfecto para tu Erasmus?

Una de las cosas más importantes y estresantes que tienes que hacer antes de irte a tu nueva ciudad Erasmus es encontrar alojamiento. En este post, encontrarás los consejos clave para que buscar casa te resulte lo menos estresante posible.

Tener una habitación bonita y acogedora es una parte esencial de tu experiencia Erasmus.

Intenta reservar el alojamiento con antelación

Son muchos los estudiantes Erasmus que no reservan su alojamiento con antelación antes de mudarse al extranjero. La razón es sencilla: quieren ver los pisos o habitaciones en persona, porque hay muchas estafas hoy en día en internet. La idea está bien, pero tienes que depender de amigos (u otros estudiantes Erasmus) que ya estén en la ciudad y quedarte en sus casas si no quieres buscarte un hotel, y posiblemente tengas que dormir en sus sofás.

Compartir un espacio pequeño no mola nada y, además, tenéis que tener en cuenta que al no estar pagando un alquiler, pueden pensar que os estáis aprovechando de ellos si no encontráis alojamiento en una o dos semanas. Si aún así decidís optar por esto, limpiad lo que ensuciéis y ofreced preparar para ellos algún plato típico de vuestra ciudad.

Nunca estará de más irte con algunas opciones ya miradas, así que, si quieres, aprovecha y echa un vistazo a los alojamientos de Erasmusu y elige la opción que más se adapte a lo que buscas.

Plantéate vivir en residencias universitarias

Algunas de las universidades de destino Erasmus ofrecen alojamiento en sus campus. El precio del alquiler de estos sitios suele ser más barato; eso sí, recuerda que son residencias universitarias y tendrás que compartir la habitación con dos o más personas y, además, no habrá tantos estudiantes extranjeros. Esta opción de alojamiento es perfecta si lo que quieres es centrarte en los estudios y centrarte tanto en salir de fiesta ni visitar la ciudad.

Los campus de la universidad están situados normalmente un poco lejos del centro de la ciudad, pero si no te gusta madrugar mucho, quedarse en el campus de la universidad significa dormir más, ya que la universidad está justo al lado y no tienes que atravesar toda la ciudad para llegar.

Como decía, si decides quedarte en una residencia, posiblemente te tocará compartir la habitación con más de dos estudiantes. Es mucho más barato, pero no tendrás mucha privacidad. Si te apetece probar la experiencia de vivir en una residencia para estudiantes, tienes un montón de opciones donde elegir en esta misma web.

Encuentra varias alternativas de alojamiento antes de reservar

Buscar diferentes alojamientos es lo mejor que puedes hacer, no te decantes por la primera opción. Al fin y al cabo, ese lugar será tu casa durante los próximos meses, así que trata de contactar con los propietarios si te interesa algún alojamiento y compáralos. Pregunta siempre por los gastos extra, asegúrate de que sea una buena zona, etc.

Si después de mudarte al sitio no te gusta, siempre puedes irte a otro (aunque de hacerlo, olvídate de la fianza). Yo, personalmente, busco mucho antes de mudarme, así no tengo que estresarme por los posibles "¿y si...? ".

No tengas miedo de pedir más fotos

A veces, los propietarios publican fotos que solo muestran las mejores partes de la habitación o las mejores zonas del piso y eso puede conducir a terribles engaños. Si no has reservado el piso a través de una inmobiliaria, pide al casero que escriba tu nombre en un trocito de papel, que lo ponga en el suelo y que le haga una foto, de esta manera, podréis ver el estado real de la casa.

Si has reservado el piso a través de una inmobiliaria, los empleados suelen asegurarse de que el lugar está en las condiciones que se anuncian. Una de las inmobiliarias con las que busqué alojamiento tenía una manera muy curiosa de verificar los pisos: sus empleados iban allí y hacían fotos de las habitaciones y zonas comunes y salían haciendo una señal específica. Así, podías estar seguro de que lo que veías en las fotos era cierto.

Ponte en contacto con los anteriores inquilinos

Si el propietario no te facilita el número de los antiguos inquilinos para que puedas hablar con ellos, puede ser señal de alarma. Si el piso está en buenas condiciones, no debería negarse a esta petición. Además, así podrías conocer a tus futuros compañeros de piso si todavía están allí cuando llegues.

Yo tuve mucha suerte antes de mudarme por primera vez a Lisboa, el propietario me proporcionó los correos de los inquilinos que ya estaban allí, ya que quería que me sintiera lo más cómoda posible antes de llegar. Me sugirió que contactara con ellos y, así, haría amigos antes de ir. Y funcionó, estaba mucho menos estresada de lo que hubiera estado si no hubiera conocido a nadie antes de mudarme al país.

No pagues el alquiler con antelación a no ser que sea a través de una inmobiliaria

Como ya he mencionado, y como ya sabrás, internet está lleno de estafadores que quieren tu dinero. Si no reservas tu alojamiento a través de una página de confianza como lo puede ser Erasmusu, no pagues nada por adelantado. Aunque lo normal sea que cuando llegues la habitación esté libre, conozco la horrorosa historia de una chica que cuando llegó a su destino Erasmus, la habitación que había reservado estaba ocupada. El propietario ni siquiera le ofreció ayudarla a encontrar otro nuevo alojamiento, así que se quedó con nosotros una semana hasta que encontró otro piso.

Consejo extra: cómo evitar las tasas de la inmobiliaria

Reservar tu habitación o tu piso con una página de alojamientos tiene muchas ventajas, pero tiene un gran inconveniente: pagar las tasas por su "ayuda". Las tasas de las agencias varían de unas a otras, la tasa más común en Barcelona es de 50 euros. Puede parecer mucho dinero, pero merece totalmente la pena, aunque solo sea por tu propia tranquilidad.

En mi primera experiencia Erasmus, ni yo ni mi compañera de habitación reservamos el piso en una inmobiliaria, y para ser sincera, estaba nerviosísima semanas antes de llegar, porque tenía miedo de que algo fuera mal o que alguien me la quitara. Por suerte, todo salió bien, pero para mi siguiente experiencia Erasmus en Barcelona, decidí reservar la habitación con una agencia.

Tener que pagar fianza es totalmente normal

El depósito que tienes que dejar normalmente equivale al alquiler de un mes, lo que significa que el primer mes tendrás que pagar el doble. Algunos propietarios te devuelven la fianza antes de irte. Bueno, primero, revisarán que la habitación no haya sufrido ningún desperfecto, porque para eso está la fianza, para cubrir los posibles gastos por desperfectos. Otra cosa que se suele hacer (si eres un buen inquilino, claro) es que la fianza cubra el alquiler de tu último mes.

Asegúrate de que la habitación tiene ventanas

Tener ventana en la habitación puede que parezca una tontería, pero créeme, no lo es. Hay muchas habitaciones alquiladas para estudiantes Erasmus que no tienen ventanas. Cuando mi compañera de habitación y yo estábamos buscando piso durante el primer semestre en Lisboa, encontramos muchos pisos preciosos con vistas increíbles, cerca de todo y con alquileres baratos, pero sin ventanas en las habitaciones.

Y tener una habitación sin ventana no significa que el alquiler sea más barato. Una de mis amigas encontró un habitación sin ventana por veinte euros al mes menos que una habitación normal con ventana. Y, adivinad qué, tuvo que irse antes de un mes porque no podía estar así y, encima, no le devolvieron la fianza. Olvídate de las habitaciones sin ventanas, no son la mejor opción.

¿Están los gastos incluidos en el precio total?

Depende del sitio. Los gastos incluyen gas, agua caliente, calefacción y otras cosas. Cuando eches un vistazo a los anuncios de los alojamientos, te encontrarás de todo. La primera opción y la mejor es que estén todos los gastos incluidos en el precio, sin tener en cuenta cuánta agua gastes, etc. La segunda opción es que pagues una cantidad fija de gastos todos los meses aparte del alquiler. La tercera y la peor es que el precio de los gastos dependa de cuánto gastes cada mes.

Ten cuidado: en las ciudades muy frías usarás la calefacción en invierno y eso incrementa el precio de los gastos un montón. Yo tuve suerte de no tener ese problema en Portugal, porque los inviernos no son nada fríos y no tuvimos ni que preocuparnos de la calefacción. La cuarta opción es la más rara y la contó mi amiga que hizo el Erasmus en Turku, Finlandia. Sus gastos durante el año siempre eran los mismos, excepto en los meses de invierno. En invierno, pagaban mucho más que el resto del año y me contó que en enero, los gastos les costaban lo mismo que el alquiler de un mes, solo por el hecho de que hacía mucho frío y tenían que calentar el piso de alguna manera.

Tener que pagar los gastos aparte del alquiler puede costar mucho dinero, dinero que podrías gastar en otras cosas.

Presta atención al precio medio de alquileres de la ciudad

Es posible que, en tu búsqueda del alojamiento perfecto, encuentres habitaciones o pisos que estén bien de precio a tu parecer, pero investiga siempre cuánto cuestan de media los alquileres en esa ciudad. Por ejemplo, imaginemos que eres de Noruega, donde los alquileres de media cuestan 500 euros (he dicho el número al azar, es solo un ejemplo) y estás haciendo tu Erasmus en Portugal. Encuentras una habitación por 300 euros al mes y te parece que es muy barata. Sin embargo, el precio medio de una habitación en Portugal es de 200 euros o menos, por lo que estarías pagando de más por esa habitación.

Intenta compartir piso con gente extranjera

Al principio, compartir piso con otros estudiantes Erasmus del mismo país que tú parece muy buena idea, pero, en realidad, no lo es. ¿Por qué? Por las siguientes razones:

• Hablarás tu lengua materna todo el tiempo y así nunca aprenderás el idioma del país de destino.
• No conocerás gente nueva porque saldrás con la gente de tu país.
• Y, además, los estudiantes Erasmus de otros países no se acercarán a vuestro grupo porque se sentirán marginados.

Compartir piso con otros estudiantes Erasmus o trabajadores

A la mayoría de estudiantes Erasmus (bueno, a quién voy a engañar, a todos los Erasmus) les gusta salir de fiesta, así que si compartes piso con otros estudiantes Erasmus, tendrás la excusa perfecta para salir de fiesta todas las noches. En cambio, la gente que tenga que trabajar al día siguiente no querrá ruidosas fiestas en casa todas las noches. La segunda opción es genial si te gusta salir de fiesta de vez en cuando, pero prefieres dormir.

Habitaciones individuales versus habitaciones compartidas

Es genial (y más barato) compartir habitación con alguien, pero, para ello, tendrás que renunciar a cierta privacidad. Y si no te llevas demasiado bien con tu compañero o compañera, tendrás que sobrevivir en ese pequeño espacio reducido a una habitación. Mi compañera de habitación y yo discutimos mucho desde el primer semestre hasta el final de su estancia en Lisboa y era terriblemente incómodo estar las dos en la misma habitación después de haber discutido. Bueno, puedes irte de la habitación un rato, pero tienes que volver por la noche para dormir.

Lo último y no por ello menos importante: planea todos los detalles de tu llegada

Es muy importante ponerte en contacto con el propietario antes de llegar. Puedes pedirle que te recoja del aeropuerto (algunos te cobrarán más de lo que cuesta un taxi), algo fácil, que muchos se negarán a hacer. También asegúrate de tener su dirección y número de teléfono. Y no te olvides de la diferencia horaria, tenlo en cuenta para saber la hora a la que habéis quedado. Porque, créeme, esperar a tu casero delante de tu nueva casa para que te dé las llaves con tres maletas enormes no es nada divertido.

Unas palabras para terminar

Espero que después de leer este post, tengas menos preocupaciones a la hora de ponerte a buscar tu nuevo hogar Erasmus. ¡Te deseo mucha suerte! Y no lo olvides, si necesitas ayuda, ¡apóyate y confía siempre en los mayores expertos en alojamiento para estudiantes Erasmus del sector!

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