¿Vas a un baño turco? Diez cosas que debes saber antes de ir

Creo soberanamente que todos debemos ir a un baño turco (o "hammam" como lo llaman los locales) al menos una vez en la vida. Es el tipo de cosas que te levantará el ánimo a la vez que te calmará, te proporcionará un sentimiento totalmente nuevo de confianza, al mismo tiempo que te ayudará a liberar la tensión de los músculos. En cambio, la experiencia en su totalidad puede ser algo sobrecogedora si es tu primera vez, si has leído el séptimo artículo de mi saga "De turismo por Turquía", sabrás que he tenido ciertas dudas antes de ir a Kadırga Hamamı en Estambul. Podéis estar tranquilos, ya que he elaborado una lista de las diez cosas que debes saber antes de tu primer baño turco.

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Hay muchas trampas para turistas

El baño turco es lo que más curiosidad produce a los visitantes de este país y los propietarios lo saben. Como consecuencia, hay muchas trampas para turistas que, a menudo, son sitios que ya en los hoteles y hostales te advierten para que no vayas. Es recomendable hacer una investigación aparte y también, debes tener siempre en cuenta que todo es mucho más barato en Turquía que en el resto de países de Europa Occidental.

Pagar 250 TL (algo menos de 42 EUR) no es un chollo: es un timo (a no ser que vayas a un sitio súper sofisticado y te vayas a hacer un montón de tratamientos). Una idea mucho mejor es ir a un sitio más barato y auténtico: mi experiencia completa (sauna, exfoliación y masaje de espuma) me costó menos de 100 TL (unos 16 EUR) y fue maravillosa.

El mejor momento es por la tarde

Por muchos motivos, el mejor momento del día para visitar un baño turco es por la tarde. Estará un poco más lleno (las horas puntas suelen ser entre las 5 y las 8 p. m. ), pero así no será una preocupación el haber perdido tiempo de hacer turismo, ya que la mayoría de los sitios para visitar a esa hora están cerrados. Además, seguramente te sentirás tan somnoliento tras tu experiencia en el hamán, que el resto del día estarás luchando por sobrevivir. Te aconsejo que te tomes este momento de relajación coincida con tu hora de dormir.

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Hombres y mujeres por separado

Parejas: ¡esta actividad la vais a tener que disfrutar por separado! Mientras que la mayoría de los baños turcos para turistas suelen ofrecer masajes en pareja, los sitios más auténticos te exigirán que hombres y mujeres no estén juntos. Verás más claro el motivo cuando sigas leyendo el siguiente punto.

Tienes que ir sin ropa

Sí, así es: si quieres experimentar el baño turco como un local, tienes que quitarte toda la ropa. Puede que este concepto te dé bastante pavor (a mí también me pasó), pero no hay absolutamente nada por lo que preocuparse. Todo el mundo está en tu situación, si intentas taparte con algo, no harás más que llamar la atención. (Una vez dicho esto, si todavía no te sientes cómodo al estar desnudo, normalmente permiten dejarte puesta la ropa interior. ) Acepta la novedad de la experiencia y disfruta de la libertad recién encontrada.

No tienes que preparar tu cuerpo de ninguna forma

Especialmente, las mujeres son las que más se preocupan antes de ir a un baño turco: ¿debo depilarme o no? Esa es la cuestión. Bueno, en realidad, haz lo que quieras. No hay una forma incorrecta de reaccionar antes cosas y, desde luego, nadie va a juzgar tus propias decisiones. Sin embargo, merece la pena tener en cuenta que los productos exfoliantes serán algo más dolorosos, si también tiran del vello corporal más largo. Por otro lado, la depilación, en realidad, es una especie de ritual religioso entre las mujeres musulmanas, si lo que quieres es integrarte, es una buena forma.

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A nadie le importa tu aspecto

No merece la pena preocuparse por el aspecto del cuerpo, porque te prometo que nadie le va a dar la más mínima importancia. Tus compañeros en el baño ya estarán bastante ocupados sintiéndose también cohibidos, que ni se enterarán de que estás allí, más aún si son seguros de sí mismos, de este modo, tampoco te van a comer con los ojos.

Los masajes de espuma son lo mejor del mundo

Hay un tratamiento que tienes que probar, se trata del masaje de espuma. No solo es una experiencia absolutamente sublime, sino que, además, las burbujas harán maravillas a tus músculos tensos. Casi todos los baños ofrecen este servicio, asegúrate de incluirlo en tu lista. ¡Ya me lo agradecerás después!

Hay que dar propina a los masajistas

Es muy importante dar una propina a los masajistas, especialmente si vas a un hamán de los más económicos. Algunos te pedirán directamente unas monedas, otros no serán tan explícitos, pero estarán esperando que les dejes algo. Que sea una propina generosa: entre el 10 % y el 20 %, con eso bastará.

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La experiencia te dejará una sensación increíble de liberación

Cuando salí por primera vez de un baño turco, me sentí una mujer nueva. En ese momento, no solo estaba limpia y reluciente, sino que también me recorría una sensación de logro y liberación. Entré sintiendo una gran timidez, preguntándome si tendría valor para quitarme la toalla en el masaje, pero terminé sintiéndome totalmente cómoda sin nada con lo que taparme. Fue como si hubiese desbloqueado algo de la confianza en mí misma que tenía oculta.

Si tienes muchas inseguridades sobre tu aspecto físico, ir a un baño turco será una gran idea. Te darás cuenta de que a nadie le importa tu aspecto físico. Además, mediante masajes y tratamientos, descubrirás que tu cuerpo no está para atraer a los demás en primera instancia, pero sí para darte satisfacción a ti.

Me encantaría volver

Los baños turcos son algo de lo que nunca te cansarás: una vez que lo has probado, estarás deseando volver y probar en otro (y sin duda, se lo recomendarás a todos tus amigos y familiares). Tu cuenta corriente puede que no te lo agradezca, pero tu cuerpo definitivamente sí.

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¡Pruébalo tú mismo!

¿Sientes la tentación? Si vas a Turquía pronto, ¡prueba esta experiencia tú mismo! Podrás decir adiós a todos esos dolores y molestias constantes y decir hola a la relajación y una renovada confianza en ti mismo. ¡Pásalo bien! Y recuerda: no des por finalizado el baño sin un masaje de espuma.

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