Explorando Tiflis- La fortaleza de Narikala

¡Hola, amigos!

Siempre ha sido un placer escribir aquí en Erasmusu. Hoy estuve echando un vistazo a algunas fotos de mis amigos y yo en la fortaleza de Narikala, en Tiflis, y entonces pensé en compartir con vosotros esta fantástica experiencia. Queríamos reunirnos una semana con todos nuestros compañeros de clase, por lo que planificamos este pequeño viaje a Narikala, ubicada en Tiflis. Se dice que la fortaleza se estableció por primera vez en el siglo IV y luego se expandió en el siglo VII por el rey David El Constructor. Los invasores mongoles cambiaron el nombre de la fortaleza a Narin Qala, que significa "pequeña fortaleza". La fortaleza sufrió daños severos durante varios terremotos y la mayoría de sus partes fueron destruidas.

Comenzamos nuestro viaje desde una estación de metro cerca de nuestra casa. Una vez nos hubimos reunido todos, fuimos a un supermercado cercano a comprar algo de comida para el camino a Narikala. El trayecto es corto; cogimos el metro y nos bajamos en una estación llamada Avlabari. Anduvimos 10 minutos desde allí nos hasta llegar a la estación del teleférico que se encuentra cerca del puente Peace. El servicio de teleférico se ha abierto hace apenas unos meses y cuesta sólo 0. 20 GEL (laris georgianos) para los estudiantes. Nos subimos todos en una de las cabinas y el viaje fue increíble. Pudimos disfrutar de una magnífica vista de la ciudad desde allí arriba. Ascendimos suavemente hasta el borde de la fortaleza, desde donde se veían todos los tejados de color naranja y los coches moviéndose bajo nosotros. ¡Era genial!

Cuando nos bajamos del teleférico, todo lo que veíamos eran restos de la antigua fortaleza. Desde allí teníamos una vista perfecta de la ciudad con todas sus estructuras destacadas, como el Puente de la Paz, el Salón de Servicios Público recién inaugurado, la iglesia de la Trinidad, etc. También se puede contemplar la iglesia de San Nicolás de nueva construcción sobre el lugar donde se encontraba la antigua iglesia encomendada al mismo santo, que fue destruida durante un accidente de fuego. Otro de los monumentos visibles desde este punto es una enorme estatua que parece ser una mujer contemplando la ciudad de Tiflis. Hay unas escaleras cerca de la estatua para subir hasta el nivel de sus piernas. Hay algunos escalones empinados y creíamos que estábamos haciendo senderismo.

Al otro lado de la fortaleza está el Jardín Botánico Nacional de Tiflis, que en sí mismo es un lugar de interés. Bajando los escalones empinados con cuidado, pudimos acceder al centro del Jardín Botánico. Éste se encuentra en el desfiladero de Tsavkiss Tskali, en las estribaciones de la cordillera de Sololaki. Se encuentran más de cuatro mil especies diferentes de plantas en este jardín que recubre un área de 160 hectáreas. Ya lo he visitado muchas veces y es especialmente recomendable hacerlo durante la primavera y el verano. Hay una gran cascada dentro y hay un espacio inmenso para que camines y explores diferentes tipos de plantas, flores, etc. Comenzamos a caminar por los senderos del Jardín Botánico y finalmente encontramos unos bancos para descansar. Entonces, decidimos tomar un pequeño refrigerio hacer un picnic; así que sacamos los alimentos que habíamos comprado en el supermercado y los compartimos mientras charlábamos y bromeábamos. Después de la merienda, nos entretuvimos un rato con un juego. A medida que pasaba el tiempo, nos agotábamos más, así que decidimos emprender el camino de vuelta, donde vimos una escena inolvidable: Nos encontramos con una pareja mayor, probablemente de unos ochenta años, que recorría el camino que había que escalar para llegar a la fortaleza de Narikala de nuevo. Nos sorprendió mucho verlos, pero nos sonrieron gentilmente y nos desearon buena suerte.

Finalmente llegamos al nivel de la fortaleza de la misma manera. La prominente estructura arquitectónica que pudimos ver fue el precioso Puente de la Paz, que se vislumbra tras el río Mtkvari. Éste no carece de historia: fue diseñado y construido por un arquitecto italiano; el puente fue traído a Tiflis desde Italia en 200 camiones y luego se montó en su posición actual y se fijaron las lámparas LED blancas por todo él. Es una estructura de las estructuras más increíbles de Tiflis. Sin embargo, sólo se utiliza por los peatones. Desde allí también obtenemos una vista magnífica de otros edificios importantes en Tiflis, como el Palacio Presidencial. En una orilla del río tras cruzar este puente se encuentra un parque precioso con una fuente musical. El puente y el parque cobran vida durante la noche debido a su iluminación y la fuente musical baila con música georgiana y occidental. En medio del parque hallamos un gran tablero de ajedrez gigante con fichas en el que puedes jugar como en la realidad. El diseño artístico del parque es excelente, y puedes pasar una noche agradable allí sin gastar nada. Por tanto, antes de volver a casa, tomamos el teleférico y bajamos hacia allí. Una vez en el parque, nos relajamos un poco y luego caminamos hacia la estación de metro de Avlabari para llegar a casa. En general, el viaje estuvo lleno de diversión y nos lo pasamos todos muy bien. Además, es un lugar estupendo si no tienes mucho tiempo y aún quieres visitar algo interesante en Tiflis.

Visite Tiflis si tiene algo de tiempo libre.

¡Hasta que escriba mi próximo artículo! Siga sonriendo. Saludos. :)

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