La antigua República Romana; de la gloria a la decadencia (1/2)

A lo largo de esta entrada y la siguiente haré un pequeño resumen sobre un importante capítulo de la Historia. Veremos la evolución de una ciudad, Roma, que se formó a partir de la unión de varias aldeas y acabó siendo la capital de un imperio que consiguió conquistar parte de Europa, de África y de Asia. 

la-antigua-republica-romana-gloria-a-decEl imperio hacia el año 117 d.C. cuando, con Trajano al frente, alcanzó su máxima expansión en toda su historia (Fuente)

La fundación de Roma y su evolución hasta el imperialismo

La privilegiada situación del Palatino, cuna de Roma, en una encrucijada: el camino que unía Etruria y la Magna Grecia por Roma y el Tíber propició el asentamiento de las primeras aldeas, pastoriles probablemente. La fundación de Roma responde a la fusión de pequeñas aldeas que fueron instalándose progresivamente en el área de las siete colinas. Los restos del emplazamiento de una primera empalizada común, abarcando solo el Palatino, el Esquiilino, la Velia y el Celio, nos remontan al siglo VII a.C.

la-antigua-republica-romana-gloria-a-decEl Palatino desde el Foro Romano (Fuente)

El nacimiento de Roma, como ciudad y urbe al mismo tiempo, se corresponde con el asentamiento etrusco en la italia centro-meridional y con la aparición de una dinastía etrusca en el siglo VI a.C., compuesta , según la tradición, por tres reyes: Tarquinio Prisco, Servio Tulio (a quien se le atribuye la organicación de Roma coma ciudad) y Tarquinio “el Soberbio”. Las aldeas de pastores pasan entonces a desarrollar una nueva actividad y adquieren una nueva categoría social: la serviana. Con inspiración en el modelo etrusco se desarrollan grandes obras urbanísticas y se introducen novedades. Los templos, construidos ahora en piedra y con decoración de terracota polícroma, muestran ofrendas votivas de origen etrusco además de vasos griegos. Asimismo, la tríada arcaica es sustituida por la tríada etrusca latinizada cuyo culto sería probablemente rendido en un santuario de triple cella situado en el Capitolio, futuro símbolo del poder de conquista de los romanos. Fueron también los etruscos los que introdujeron el alfabeto, del griego, adaptado por Roma.

Según las fuentes, el último rey: Tarquinio “el Soberbio”, usurpó el poder de modo violento y simbolizó la figura del tirano oriental. Tras su expulsión por el rey de Clusium, tuvo lugar la fundación de la República (no antes de los años 480-475 quizás), sinónimo de libertad para los romanos; se produjo tras un levantamiento de los aristócratas contra un dominio despótico y extranjero; de ahí el intenso odio a la monarquía que alimentaría la retórica republicana.

la-antigua-republica-romana-gloria-a-dec

Tarquinio el Soberbio (Fuente)

Pero aún habría, desde la expulsión de Tarquinio, un periodo de tránsición. Comienza a aparecer la colegialidad y la anualidad de las magistraturas, características de la futura res publica, pero también surgieron graves conflictos entre patricios, continuos ostentadores del poder, y plebeyos, configurando éstos un Estado de hecho, mediante la creación de tribunos que, sin duda, contribuiría al desarrollo del imperialismo romano en el Mediterráneo.

Roma comenzó su expansión con las regiones circundantes, así dieron comienzo las llamadas guerras latinas. Con la conquista de territorios en el sur de Etruria, hacia el año 386 a.C., comienza a haber presencia de colonos romanos desplazados a las tierras conquistadas; la romanización se halla en el plano de la anexión. Entre los años 340-338 se rompe la Liga Latina y se establece una colonia militar en Antium; el territorio latino, por diversos motivos, ya pertenece a Roma. Concluidas las tres guerras samnitas, Roma logra derrotar a samnitas, galos y etruscos en la batalla de Sentinum. De este modo se consolida el poder romano en el sur peninsular, próximo a la Magna Grecia.

la-antigua-republica-romana-gloria-a-decMapa de la península italiana alrededor del 400 a.C. (Fuente)

La victoria en Ausculum, en el año 279 a.C., de Pirro de Epiro (jefe de un reino poblado por tribus griegas, pobre y desheredado que llegó a ser rey, durante un tiempo, de Macedonia y Tesalia) y la toma por parte de éste de Catania, Siracusa  y Agriento no supuso en realidad más que una derrota, pues la alianza de los cartagineses con los romanos, contra Pirro, le acabaría otorgando a Roma la primera victoria sobre Grecia; tomó Lucania y Tarento, también codiciada por Cartago por su estratégico puerto, en el año 272. Este hecho da inicio a las guerras púnicas, para lo que Roma debe dotarse de una flota. Una primera guerra le daría la victoria, la primera victoria naval a Roma, con el dominio de Sicilia (anexionándose Cerdeña algo después). Pero además, obtendría el dominio sobre el comercio en el Mediterráneo. La Segunda Guerra Púnica, iniciada por la supremacía sobre Sagunto, involucraba a Capua, que habría sellado un acuerdo con Cartago en el año 215 para repartirse Italia en el supuesto caso de la derrota de Roma. Durante ese periodo, el ejército romano hubo de luchar en defensa de Roma, luchar contra Macedonia y marchar hacia la conquista de Hispania. La estrategia de Publio Cornelio Escipión el Africano logró derrotar a Aníbal Barca en la Batalla de Zama.

Después del año 211, Roma volvió a tomar los mandos del poder. Se confiscan territorios en favor de las colonias romanas; Capua se convierte en mero centro agrícola y 60.000 ha de los terrenos más productivos pasan a manos del Senado. Pero los itálicos no se sienten recompensados por su lealtad; la guerra social estallará en breve.

Roma realizó un gran esfuerzo financiero para hacer frente a las guerras; se reclamaron préstamos a los bancos e incluso se les pidió a los senadores un préstamo de oro o plata para el Estado.

El Senado, que desde el año 201 a.C. es el organismo capital de las instituciones republicanas, se convierte en la asamblea de magistrados, elegidos por el pueblo, y ex magistrados, encumbrados durante la Segunda Guerra Púnica. El poder alcanzado por estos hombres hace presagiar el futuro de la República en los siglos venideros.

Roma continúa su política de expansión hasta la Tercera Guerra Púnica, con la destrucción de Cartago en el año 146 a.C.; primero se desplaza hacia la cuenca oriental para resolver el problema de los piratas ilirios, después se crean las provincias de Bética, Hispania Ulterior e Hispania Citerior y la primera provincia africana. En esos momentos, la vida económica y comercial de la cuenca del Mediterráneo occidental estaba ya a los pies de Roma

De ciudad a imperio

Son diversos los motivos que pudieran haber llevado a Roma al imperialismo a partir de la destrucción de Cartago y el saqueo de Corinto: razones de seguridad, intereses económicos, superioridad a nivel militar, objetivos expansionistas, defensa y pervivencia de la península de Italia...

Podemos hablar de un imperialismo defensivo hasta el año 169 a.C. aproximadamente. Tras la conquista de Grecia se pasa del protectorado al sistema de la anexión. Con Pérgamo, herencia del rey Ptolomeo Physcon en  Asia, comienza la gran política anexionista del siglo I.

Asistimos al mismo tiempo a la conquista económica gradual de la cuenca oriental del Mediterrráneo por los Rômanoi, de gran peso en la política de Roma; Delos se convierte en el centro principal de atracción de itálicos y orientales de la cuenca mediterránea y aparecen las sociedades de prestamistas.

La política imperialista fue la línea seguida por los emperadores del último siglo de la República, como Escipión, quienes utilizaron las conquistas para favorecer sus intereses personales.

La ingente riqueza obtenida por Roma, procedente de los expolios y las contribuciones impuestas a los vencidos, fue acompañada de prisioneros de guerra esclavizados, anexiones provinciales, impuestos y el ingreso de un alto porcentaje del valor de las mercancías que pasaban por el territorio. En tan solo cuarenta y tres años, hasta el año 157 a.C., el Tesoro habría acumulado algo menos de 600.000.000 de denarios.

A  partir del año 209, la devaluación de la moneda de plata en peso y valor provoca un elevado incremento en el nivel de vida. Las clases superiores, sin embargo, pueden acceder a productos de lujo.

La crisis en el campo por el abandono de las tierras durante las guerras y la falta de mano de obra provoca un éxodo a la urbe en el siglo II. Los jefes militares adquirirían tierras, con parte de los botines, comenzando así una concentración de capital. Se tendía a los latifundios, una parte de terreno para el cultivo de productos agrícolas y otra destinada a pastos. Algunos campesinos optaron por diversificar el cultivo, para lo que debían hacer frente a un préstamo. Los deudores insolventes eran condenados a perder la ciudadanía jurídica o a ser esclavos de sus prestamistas.

Etruria sufrió el deterioro de sus ciudades y campiñas, mientras en Campania se vivió un periodo de prosperidad urbana y rural durante el siglo II a pesar de la emigración a la Cisalpina y las provincias. La política romana en Cisalpina se basó en la función defensiva, la instalación de colonos y la revalorización de la tierra.

La esclavización de los prisioneros, de bárbaros especialmente, conllevaba un aumento del botín y del capital. El precio de los esclavos se veía incrementado si éstos eran eruditos. El bandillaje y la piratería también proporcionaban esclavos en los mercados; unos 10.000 esclavos podían recorrer ciertos días el mercado de Delos. A nivel económico el esclavo es, como el hombre libre, un instrumento de producción; desarrolla servicios que justifican gastos y protegen el capital.

Existe un gran contraste en el siglo I entre las granjas tradicionales y las suntuosas villas propiedad de gente adinerada.

Una importante repercusión social fue la constitución de élites municipales compuestas por los notables de las ciudades municipalizadas. El prestigio, sus valores y virtudes y la posición social les lleva a la magistratura para ponerse al servicio de la ciudad y, a la misma vez, para servirse a sí mismos

El monopolio de las funciones principales es solo ostentado por algunas familias. Todos los ciudadanos son electores pero no todos son elegibles. Curiosamente, a la vez que se defiende la igualdad de los ciudadanos, se practica la desigualdad por derecho.

La cultura también se ve transformada por la llegada, a través del expolio de las obras de arte griegas y con la literatura, del helenismo. Se contraponen dos tendencias: la tradicional y la de los renovadores filohelenos de los Escipiones. A mediados del siglo II se imponen tres doctrinas: la Academia (de Platón), el Pórtico (de Zenon) y el Liceo (de Aristóteles); ninguno epicúreo. El estoicismo se impone sobre la ociosidad

En el siglo II se muestran profundos cambios en la arquitectura y la ornamentación urbana e itálica, tanto en edificios públicos como en las viviendas. Se emplean mármoles y metales preciosos. Al mismo tiempo, comienzan a importarse sedas para las vestimentas y los esclavos utilizan las materias primas más exquisitas en la cocina.

En cuanto a la introducción de cultos religiosos extranjeros, la célebre represión contra el culto báquico en el 186 a.C., pone de manifiesto el control del Estado a fin de salvaguardar los cimientos de la moral romana.

La indiferencia por los dioses, la obsesión por el placer, el lujo, la ambición y la corrupción simbolizan, para algunos autores antiguos, la decadencia de las costumbres y la honestidad. Esa pérdida de valores preceden a la crisis que llevará al fin de la República

 

 


Galería de fotos


Comentarios (0 comentarios)


¿Quieres tener tu propio blog Erasmus?

Si estás viviendo una experiencia en el extranjero, eres un viajero empedernido o quieres dar a conocer la ciudad donde vives... ¡crea tu propio blog y cuenta tus aventuras!

¡Quiero crear mi blog Erasmus! →

¿No tienes cuenta? Regístrate.

Espera un momento, por favor

¡Girando la manivela!