¿Qué sitios no te puedes perder?
Los lugares más turísticos de Rio de Janeiro
Cristo de Corcovado:
Tengo bastante que contaros acerca del Cristo de Corcovado o el Cristo Redentor. Primero os haré una introducción teórica para contextualizar qué es y porqués es tan importante. La mayoría de nosotros solo lo conocemos por una estatua de Cristo muy grande, una de las nuevas 7 maravillas del Mundo Moderno desde 2007, aunque es cierto que todavía a no ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad.
La montaña de Corcovado sobre la que se sitúa el Cristo (de ahí también el nombre de Cristo de Corcovado) pertenece al Parque Nacional De Tijuca, el bosque urbano más grande del mundo.
Como decía, es una escultura de 38 metros que representa a Jesús (más los 8 m del pedestal), cuyo mirador donde se sitúa, ofrece una de las vistas más espectaculares de la ciudad brasileña de Rio de Janeiro, así pues, a 710 metros de altura sobre el nivel de mar, tenemos una panorámica de toda la ciudad. Además de constituir un sitio privilegiado desde el que disfrutar de la ciudad, constituye un lugar muy apreciado y valorado por los creyentes.
Es un destino obligado para todos aquellos que viajen a Rio, es abrumador la cantidad de turistas al año, y no solo extranjeros como sería comprensible pensar, sino que la gran mayoría de los turistas que se acercan al mirador para contemplar la majestuosa estatua, son brasileños, de todas las partes del país.
Lleva en pie desde el año 1931. Me llama la atención como en esos años pudieron construir algo de tales dimensiones (aunque también es cierto que me cuesta imaginarlo hacerlo hoy en día). Resulta que para construirlo hicieron una colecta entre los habitantes de Rio para que ayudasen a levantar el famoso Cristo, colocando la primera piedra en el 1922 y siguiendo su construcción hasta el año 1931.
La estatua del Cristo de Corcovado cuenta con un sistema de iluminación que le permite ser observado desde cualquier punto de la ciudad. A medida que el cielo se oscurece, comienza a verse un punto brillante en las alturas, y puede apreciarse con toda claridad la forma de Jesús con los brazos abiertos.
Para visitar el Cristo tengo que…
Para poder visitar el Cristo lo primero que tienes que saber es: hay que ir temprano. Es totalmente imprescindible si no quieres pasarte todo el día haciendo colas y sin oportunidad de ver nada más en todo el día.
Una vez llegada a la entrada de la “atracción turística” probablemente te encontrarás una cola interminable (que puede durar horas). Deberás hacerla para comprarte la entrada y poder acceder al mirador.
En el lugar donde se compran las entradas, hay una pequeña cafetería, que sin duda le sacan rendimiento ya que en ocasiones llegan a ser horas lo que hay que esperar en la cola. Aqui os dejo una foto enternecedora que nos encontramos de un peque durmiendo.
Una vez que ya tienes la entrada, debes esperar de nuevo, a que algún vehículo esté libre para acercarte el punto medio del camino (pues no se permite ir caminando).
Una vez que te dejan a medio camino tienes dos opciones:
- continuar caminando
o
- de nuevo hacer una cola interminable para coger un segundo vehículo que te llevará al mirador.
Bien, si no te importa caminar es totalmente recomendable darte el paseo de subir andando. No es demasiado esfuerzo y merece la pena. Vas ascendiendo por la carretera, rodeando la montaña, disfrutando de las vistas cada vez desde un punto más alto.
Una vez llegados arriba aún no te encuentras en el mirador. En la entrada te encontrarás, como todo destino turístico, varios bares y tiendas de recuerdos, además de otra cola de gente (como no) esperando el vehículo correspondiente para bajar a la ciudad (imaginaos el tráfico constante que debe haber si hay miles y miles de turistas y cada coche puede transportar a unas 12 personas).
Esta es la imagen del cristo desde ese punto.
Pues bien, es el momento de subir los 226 escalones que te acercan a la gran estatua. Antes de llegar tienes la opción de hacer un alto, y acercarte a este pequeño mirador, aunque un poco más bajo que nuestro destino, las vistas no desmerecen.
Estoy segura que, una vez llegados arriba, lo primero que haréis es subir y subir la cabeza para llegar a ver el fin de la estatua… Es verdaderamente alta. Es practicamente imposible conseguir sacarse una foto en la que aparezca uno entero y también el cristo... hay tanta gente que encontrar ese ángulo que todo el mundo busca no es nada fácil.
Aunque el mirador esta terriblemente abarrotado, merece la pena abrirse camino entre la multitud para acercarse a los diferentes puntos del mirados y observar las increíbles vistas que ofrece.
Puede verse toda la ciudad de Rio, la laguna al completo e incluso Niteroi, otra ciudad del estado de Rio de Janeiro, famosa por albergar el conocido museo de Arte Contemporáneo de Niteroi, del arquitecto Oscar Niemeyer.
Si os fijáis, en esta última foto hacia el fondo, en el medio del mar, podemos ver el puente que comunica la ciudad de Rio con Niteroi, ¡con 14 Km de largo!
Espero haberos motivao para visitar el Cristo (si es que aún no lo estabais! ). Es muy fácil llegar pero hay que tener muy encuenta todo el tema de horarios y que depende en la época que vayas habrá más o menos gente. Si coincide como nosotros que aprovechamos un puente que hicieron ya que el jueves era día festivo en el país... Fue horrible convivir en el mirador con tanta gente. Pero aun así, merece la pena. Animaos!
