Encontrar trabajo II

Los dos últimos días han sido una locura. ¡He tenido seis reuniones y entrevistas en dos días! Me estoy cansando de buscar trabajo y ya he concertado otras dos reuniones el lunes por si todo sale mal. Primero, os voy a hablar de la entrevista más larga que he tenido en mi vida.

El martes por la mañana, me invitaron a la primera ronda del proceso de admisión de Red Bull para el puesto de administrador financiero. La primera ronda debería haber sido antes de los exámenes, pero como nadie podía, tuvieron que posponerla. La noche antes, me di cuenta de que la oficina central estaba en Dejvice, por lo que podría dormir un poco más porque vivo ahí. Por la mañana, me sorprendió que aunque se suponía que estaba cerca de mi casa, tuve que andar, ir en tranvía, ir en bus y andar un poco más. De camino, hasta pensé en irme a casa porque el camino tenía una pinta horrible. Iba por mitad del bosque, parecía el fin del mundo. Cuando por fin di con el sitio correcto, otras cuatro chicas estaban esperando allí por la misma razón.

Ya sabía que la entrevista duraría cuatro horas y estaba preparada. Lo que fue una grata sorpresa fue que nos prepararan fruta, galletas, aperitivos salados y bebidas Red Bull ilimitadas. No bebo mucho porque no es sano, pero por esa vez, tomé uno. ¡Hasta pidieron cuatro pizzas en un restaurante para que comiéramos! Para empezar, tuvimos que dibujar una bandera del amor. No me hizo mucha gracia. Creo que ya somos adultos, no es necesario dibujar algo antes de explicarlo. La cosa es que dibujé la bandera y hablé de todo lo que me gusta. Todos parecían interesados. Me sentí orgullosa porque como soy tan activa, había tenido muchas experiencias distintas, como ser Aupair, ir a Sri Lanka, estudiar en Francia, estar de becaria, etc.

Después, tuvimos que elegir un animal que nos definiera. Tampoco me gustó mucho porque si te presentas a un puesto de administrador financiero, no sé para qué tienes que ser creativo ni qué pretendían evaluar con esa prueba. Escogí un gato porque es cariñoso, lo que quiere decir que me gustar estar con gente, y también es activo y juguetón, lo que quiere decir que me gusta probar cosas nuevas. Quería elegir un elefante porque me gustaron mucho en Sri Lanka, pero no quería compararme con un elefante y elegí un gato. Las otras chicas no pensaban como yo porque una de ellas eligió un hipopótamo. Yo hasta me ofendería si me comparasen con un hipopótamo.

Tras una breve pausa, seguimos describiendo nuestras características y dando ejemplos que lo demostraran. Yo dije que soy:

• Responsable;
• Con ganas de aprender cosas nuevas;
• Con grandes competencias cuantitativas;
• Precavida;
• Trabajadora.

Tampoco me entusiasmó esta actividad porque uno puede decir lo que quiera y nadie puede saber si es cierto o no. Y aún más aburrido fue tener que enumerar las características de un administrador financiero perfecto y hacer un consenso de las tres más importantes. Parecía que estábamos en el colegio. Después del descanso, hicimos unos tests, por fin. Me sorprendía que nos hicieran tests porque estábamos todo el tiempo hablando de la importancia del equipo y de la marca Red Bull, ya había asumido que el mejor administrador financiero era una persona muy maja que trabajara bien en equipo y poco más.

El examen de inglés fue bien. Era un test con varias opciones y aunque no me gustan los ejercicios de gramática, fue bien y solo tuve tres fallos. El test de atención era muy fácil, pero como tenía una duración limitada, no conseguí hacerlo todo perfecto. Lo peor fue el examen de contabilidad porque aún no sé cómo va todo eso. Por último, tuvimos un examen de Excel que fue bastante fácil, pero me cabreó que otras chicas lo terminaran antes que yo. O no se lo sabían del todo, o eran más rápidas, es decir, mejores. Al parecer no soy tan buena con Excel como pensaba.

Tras cuatro horas, nos dijeron que nos teníamos que quedar más tiempo del estipulado porque necesitaban un descanso para decidir quién seguiría y quién se iría a casa. Increíble. Parecía que buscaban un director financiero. En vez de media hora, ¡tardaron en decidirse una hora! Mandaron a una chica a casa y nos quedamos tres. Me alegraba quedarme, pero después tenía otra reunión, por lo que quise ir la primera a la entrevista personal. ¡Me preguntaron de todo! ¡Hasta me preguntaron si me gusta ir de fiesta porque allí organizan muchas! No sabía qué pensar. Me gustaba la idea de trabajar como administradora financiera en su empresa porque podría aprender muchas cosas, pero no entendía por qué necesitaban medio día para elegir a alguien. ¡Deberían saberlo ya con solo mirar los tests! Me fui a las 14:15 con cinco Red Bulls y me dijeron que nos darían una respuesta en los siguientes días. Fue la entrevista más larga de mi vida: 5 horas.

Tras esta experiencia, tenía una reunión para un trabajo en Croacia. Tenía sentimientos encontrados. Me moría de ganas de ir para ganar dinero y pasarlo bien en el barco. Pero por otro lado, me preocupaba marearme en el barco y lo más importante, el trabajo no me inspiraba mucha confianza. Habían puesto un anuncio sin ningún tipo de agencia y describían el trabajo en tres líneas. Me dijeron que tenía que ir a Croacia por mis propios medios y que me pagarían todo lo relacionado con transporte, seguro y alojamiento. Si estuviera 100 % segura de que era algo legítimo, iría sin dudarlo. Sin embargo, no encontré a nadie que me llevara y me daba miedo ir sola...

Por último, participé en un experimento que organizó el CERGE. Me dio mucha rabia descubrir que era un experimento de dos días y que te pagaban al segundo día. Por tanto, fui para nada porque en el segundo día ya estaría en Hradec. Esta mañana me llamaron de Red Bull. Me felicitaron, por lo que pensé que me habían elegido, pero ¡resultó que había una tercera ronda en el proceso de admisión! ¿Os parece normal? Después de tanto rollo ahora tenía que hacer una presentación sobre el tema: ¡ser administrador financiero en Red Bull!

Ese mismo día, estaba muy emocionada por mi prueba como camarera en el bar cubano La Bodeguita a las 19:00. Estaba nerviosa porque era el trabajo que más me interesaba. Cuando entré al bar me quedé alucinada. Me esperaba algo parecido a La Casa Blu. ¡Se parecía, pero era enorme y mucho más complicado! En la entrada había dos porteros y una chica que iba sentando a los clientes. No me lo esperaba. También me sorprendió que las camareras llevaran un vestido especial corto y sin tirantes. ¡Lo peor era tener que llevar tacones 10 horas! Ignorando eso, tenían muchas salas con camareras y tres baristas, además de una cocina enorme llena de gente. Parecía una locura, pero todo tenía su sistema. Al principio, no podía imaginarme trabajando allí porque llevar tres platos o una bandeja con 8 mojitos es algo que lleva su tiempo. Pero el bar me gustó mucho. ¡Los cócteles tenían muy buena pinta y hasta tenían música en directo y actuaciones de baile todos los días!

Por último, ¡fui a La Casa Blu a ver a mis amigos! Fue genial. Todos se quejaban de lo injusto que era que no pudiera trabajar allí y me alegraba volver a verlos después de tanto tiempo. Terminé la noche en casa de Lucy porque siempre le prometo que me quedaré a dormir, pero nunca lo hago. Así que por fin lo hice y al menos así tuvimos más tiempo para hablar. Por la mañana, fui a Provinent a la segunda ronda de admisión. Me sentía segura con Excel porque ya lo había dado dos veces en clase y lo había usado mucho estando de becaria. Me equivocaba. El examen no fue nada fácil, o a mí se me olvidó todo lo que sabía, así que no estoy muy convencida de que me acepten... Siento que me voy a volver loca. La locura de buscar trabajo continúa y el lunes tengo una entrevista en el restaurante mexicano Las Adelitas y una prueba en una cafetería. ¡Espero encontrar pronto mi trabajo ideal para el verano!

Provinent está cerca de la estación de metro Budějovická, ¡así que era una oportunidad perfecta para ver a mi tía Moni! ¡Llevábamos mucho sin vernos y teníamos un montón de cosas de las que hablar! Quedamos en nuestro restaurante favorito, al que vamos siempre, Primo Piatto. Es un restaurante italiano de dos plantas. También tiene una pequeña zona para que jueguen los niños. A veces se llena mucho al mediodía, es mejor ir temprano. Para comer tienen siempre un menú del día, en el que te dan a elegir entre cinco platos distintos. Los platos son curiosos, como ensalada con melón o postres ricos. Normalmente, pedimos sopa o una ensalada pequeña, el plato principal, postre y café. ¡La comida ideal! Pedí tortellini con jamón como plato principal y piña al caramelo de postre. Buenísimo, como siempre. Estuvimos hablando de todo lo que nos había pasado. ¡Mi primo está enorme! El tiempo pasa volando.

Moni también me dijo que se iban tres semanas a Córcega y que después, harían otros viajecitos en agosto. Cuando lo oí, me daban ganas de ir con ellos. Me encantaría ver Córcega. Busqué billetes para ir cuando estaba en Francia, pero era carísimo y al final pasé del tema. También me interesaba lo que me contaba de México porque ¡Moni estuvo estudiando allí todo un año! En realidad, me dijo que no estudió mucho, más bien estuvo viajando. ¡Lo peor fue cuando vi que había billetes especiales de Milán a Ciudad de México tirados de precio! Pero debo ser paciente, algún día podré ir.

Por fin estoy en casa y puedo disfrutarlo. Pensé que tendría tiempo para hacer ejercicio, ver películas o limpiar mi habitación, pero mi tutor me saturó de trabajo porque quedamos en que escribiría un reportaje sobre mi trabajo final. Lo gracioso es que cuando elegí ciudades europeas, lo hice al azar, sin ningún criterio. Después, cuando tuve que explicar las razones por las que quería estudiar esas ciudades, me resultó complicado porque en realidad no tenía ninguna motivación. Al final, como vi noticias sobre Madrid y Berlín en relación con las prohibiciones y los alojamientos a corto plazo, ¡me vino genial haber incluido estas ciudades! Pronto empezaré a trabajar en el tema.

¡Mis próximos planes son ir mañana a probar Vacutherm por segunda vez e ir a ver a mi padre y mi abuela después de todo un semestre! Mi hermana se viene conmigo, con un poco de suerte, podremos bañarnos en la piscina. Lo peor es que antes tengo que pensar en un regalo para mi padre. Este fin de semana Lucy y yo estamos organizando una fiesta para celebrar la graduación en Hradec Králové. Para ello hemos escogido el restaurante Na Hrade. Espero poder ver a todos mis amigos de Hradec.

Casi se me olvida mencionar que hoy fui al cine a ver Ahora me ves... 2. ¡Tenía muchísimas ganas de verla! La primera parte me encantó. En general, me gustan este tipo de películas. Esta estuvo tan bien como esperaba. El argumento era totalmente impredecible, quizás tan complicado que no lo llegué a entender del todo. Me encantaron las escenas tan bien desarrolladas con la música perfecta y unos actores geniales. Al principio de la película sale Jesse Eisenberg, famoso por protagonizar La red social. Diría que con los años está cada vez más guapo. Mi actor favorito de la película es Mark Ruffalo, uno de los protagonistas. Tengo que mencionar que los trucos de magia y los impresionantes efectos especiales hacen que la película te tenga enganchado. No me importó que esos efectos fueran poco realistas porque al fin y al cabo la película es así. Además, la escena principal transcurre en Londres, un lugar que me encanta. ¡Ahora tengo ganas de ver otra vez la primera parte de Ahora me ves... !

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